El PIB de la eurozona cayó un 0,1% en el tercer trimestre y se mantuvo estable en la UE

• El empleo creció un 0,3% de julio a septiembre en la zona euro
• Alemania registra un crecimiento negativo del 0,1%

Una fábrica de camiones en Múnich.

El producto interior bruto (PIB) de la eurozona registró una caída del 0,1% en el tercer trimestre, periodo en el que se mantuvo estable para el conjunto de la Unión Europea, según la nueva actualización de los datos publicada por la oficina comunitaria de estadística, Eurostat.

El enfriamiento de la economía europea contrasta, no obstante, con el comportamiento del empleo, que creció durante el mismo periodo un 0,3% en la zona euro y un 0,2% en el conjunto del bloque, que se aceleran tras el incremento del 0,1% visto en ambas zonas en el trimestre previo.

La segunda estimación del PIB, en todo caso, confirma la contracción de la zona euro que recogía el dato preliminar publicado el 31 de octubre, pero rebaja al 0% el comportamiento de la actividad económica para la UE, puesto que entonces estimó un ligero crecimiento del 0,1%.

En el caso de los países de la moneda común, hay que remontarse al segundo trimestre de 2020, en plena pandemia, para encontrar un periodo de contracción del PIB en la zona euro (un 11,3%).

El PIB de la eurozona había comenzado el año con un crecimiento nulo en el primer trimestre y una expansión del 0,2% en el segundo, mientras que la UE se había apuntado un aumento del 0,1% entre enero y marzo y una tasa plana del 0% entre abril y junio.

A las puertas de la recesión

Estos datos visibilizan la ralentización de la economía de la zona euro desde el pasado verano y llegan justo un día antes de que la Comisión Europea actualice sus previsiones de crecimiento y déficit para los próximos años.

Una nueva contracción de la economía de la eurozona en los tres últimos meses del año significaría la entrada en una recesión técnica, aunque los países de la moneda común descartaron en una reciente reunión del Eurogrupo que sea "profunda y prologada", al tiempo que apostaron por un aterrizaje suave.

A su vez, el Banco Central Europeo (BCE) sigue enfrascado en su lucha para descender la inflación a su nivel objetivo del 2% y, para conseguirlo, su presidenta, Christine Lagarde, descartó hace poco que la entidad vaya a reducir en el corto plazo unos tipos de interés que tras diversas subidas se sitúan actualmente en el 4,5%.

España, la gran economía que más crece

España fue la economía que más creció entre las grandes del bloque con una expansión del 0,3% que, no obstante, es inferior al aumento del 0,4% observado en el segundo trimestre y al de 0,6% de los primeros tres meses del año.

Alemania es la única de las grandes economías del bloque que registró un crecimiento negativo entre julio y septiembre (un -0.1%), tras empezar el año en el 0% entre enero y marzo y una ligera expansión en los tres meses siguientes del 0,1%.

A pesar de que se apunta un crecimiento del 0,1%, la economía francesa sufrió en el tercer trimestre una importante ralentización, puesto que su PIB se había incrementado un 0,6% en el periodo anterior, mientras que la italiana registró un comportamiento estable tras haberse contraído un 0,4% en el segundo trimestre.

El mayor descenso de la actividad económica fue el de Irlanda, con una caída del 1,8%, aunque se trata de un país cuyo PIB sufre importantes actualizaciones a medida que se conocen más datos.

Entre los países de la UE que no tienen la moneda común, Polonia fue la que más creció, un 1,4%, aunque esta segunda actualización de Eurostat todavía carece de datos para países como Grecia, Luxemburgo, Malta o Croacia.