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Análisis | Elecciones en Argentina

La lucha por los votos de Bullrich decidirá el futuro de Argentina

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Una imagen de archivo de Patricia Bullrich durante un acto de campaña de Juntos por el Cambio.
Una imagen de archivo de Patricia Bullrich durante un acto de campaña de Juntos por el Cambio.

Los argentinos solo tienen dos opciones este domingo: o la continuidad con el peronista Sergio Massa o el cambio total -y desconocido- que propone Javier Milei, y en esta decisión van a ser fundamentales los más de seis millones de votos que logró Patricia Bullrich como candidata de Juntos por el Cambio, la coalición conservadora que llevó al poder a Mauricio Macri entre 2015 y 2019.

En apenas unos meses este colectivo creado en su día como frente contra el peronismo ha pasado de creer que tenía la Presidencia en el bolsillo a ver cómo Milei les adelantaba por la derecha y les dejaba con una sensación inequívoca de haberse equivocado. Apenas 48 horas después de la votación, Bullrich y Macri sellaban con Milei un acuerdo -oficialmente sin condiciones -para apoyarle en segunda vuelta.

Horas antes de acabar la campaña, era la candidata quien se subía al escenario de la mano del polémico economista que llegó a decir que había cometido ataques terroristas con el grupo Montoneros. "Te tocó el turno, Javier. Fuiste quien ganaste la opción de cambio y con patriotismo te acompañamos para que seas el próximo presidente”, aseguraba Bullrich junto al que hace apenas un mes era un candidato de “ideas malas y peligrosas".

Javier Milei (i) junto a Patricia Bullrich durante el cierre de campaña del líder de La Libertad Avanza. DIEGO LIMA / AFP

"No hay que olvidar que en una primera vuelta se elige y en la segunda se opta. Massa es la continuidad del peor gobierno de la historia, pero hoy el cambio lo representa Javier Milei aunque tengamos muchas diferencias", explicaba a RTVE Hernán Lombardi, diputado del partido PRO y muy cercano al expresidente Macri. "Esta vocación por el cambio va a definir cómo trabaje el futuro gobierno y por supuesto, dependerá de los equilibrios parlamentarios", añade, sabedor de que Juntos por el Cambio será esta próxima legislatura la fuerza clave para aprobar cualquier ley con sus 93 diputados en la Cámara.

La división entre Massa y Milei

Una bancada que está formada por representantes del PRO, la histórica Unión Cívica Radical (UCR) y Coalición cívica y a la que solo le hace falta sobrevivir tras el apoyo dado a Milei por el PRO sin consultar con el resto. Aunque dicen mantenerse en la neutralidad, algunos radicales no le cierran la puerta a Sergio Massa y esa puede ser la esperanza a la que se acoja el ministro de Economía de cara a la segunda vuelta. "Una cosa es ser antiperonista y otra es votar a alguien como Milei", aseguraba un político radical bajo condición de anonimato.

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El presidente de los radicales, el gobernador de Jujuy, Gerardo Morales, llegaba a decir estos últimos días que si ganaba Milei, "no podrían pagar a los funcionarios provinciales" y comparó a Macri con Cristina Fernández de Kirchner, lo que provocó un ataque furibundo en su contra en las redes sociales. El caso es que incluso dentro de las filas del PRO, la decisión del expresidente no ha sido bien recibida. Quien fuera rival de Bullrich en las primarias, el jefe de gobierno de la Ciudad de Buenos Aires ha señalado que las ideas de Milei no son compatibles con las de su partido.

Otro que fue ministro de Cultura con Macri, Pablo Avelluto, tampoco está de acuerdo con un apoyo que califica de "sometimiento". "Siempre estuve en contra del revisionismo de Milei con lo ocurrido durante la dictadura, su mirada peyorativa hacia las mujeres y las minorías sexuales o su desconocimiento del calentamiento global, todo espacios comunes de estas corrientes populistas de derecha que hay por el mundo", asegura a RTVE.

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Defiende su voto en blaco y critica además que el único ideal esgrimido durante la malograda campaña de Bullrich haya sido acabar con el kirchnerismo. "Esconde una vocación antidemocrática porque es un movimiento que representa un porcentaje de los argentinos y lo que hay que hacer es ganarles en las urnas, no eliminarlos", señala. Y lamenta que este domingo, él y muchos otros votantes de Juntos por el cambio se enfrenten a una difícil elección: "para mí es como elegir entre susto o muerte. Y yo no quiero ni morir ni vivir asustado", asegura.

La incógnita de los votos de Bullrich

Lo importante, sin embargo, será comprobar si esos seis millones de votos logrados para la tercera fuerza política el 22 de octubre siguen las instrucciones de Bullrich y Macri o si por el contrario actúan libremente haciendo de esta elección algo mucho más impredecible.

"No solo hay discusión entre los partidos, de hecho hay mucho desacuerdo interno entre los propios grupos de la coalición. Ha sido una elección devastadora para este espacio como espacio identificable de ideas o valores", asegura la directora de la consultora Trespuntozero, Shila Vilker, en el programa Cinco continentes de Radio 5 que sin embargo destaca la importancia que tuvo Macri tras la primera vuelta a la hora de reflotar a Milei tras verse superado por Massa.

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Ante lo que pueda pasar el domingo asegura que “esta ha sido la elección menos ideológica de todas, porque las razones del voto y la adhesión están más relacionadas con la materialidad y la vida cotidiana o simplemente porque lo que quiere la gente es un cambio, sin entrar en cuestiones de fondo e incluso cuestionando o minorando las propuestas de su candidato. En el caso de Milei es un fenómeno de carisma y de lo que él transmite”.

Y aunque la tendencia de los expertos en demoscopia es señalar que la mayoría del voto de Bullrich irá hacia Milei, ahora mismo nadie se atreve a predecir cómo votarán este domingo y, por tanto, quién será presidente de Argentina a partir del 10 de diciembre.