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Patricia Campos: confianza y respeto para las mujeres de Uganda a través del fútbol

  • Ha sido la primera mujer en pilotar un caza, además de jugadora, entrenadora y comentarista de fútbol
  • Colabora con la ONG 'Goals for Freedom y ha publicado "Cambiemos las reglas", un alegato contra el acoso
  • En Objetivo Igualdad, el domingo a las 14,25h en Canal 24horas

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Imagen de Patricia Campos en Uganda, donde trabaja con la ONG 'Goals for Freedom'
Patricia Campos en Uganda con la ONG 'Goals for Freedom'

Patricia Campos Domenech es una mujer llena de energía, habla con rapidez y se apoya con un expresivo movimiento de manos. Tiene tanto que contar que parece que le falte el aliento. Ríe cuando esta periodista le pregunta cuál de sus actividades prefiere que destaque en los rótulos de la entrevista que va a emitir en televisión. ¿Piloto militar? ¿Futbolista? ¿Entrenadora? ¿Comentarista? ¿Voluntaria en una ONG?

A nadie le extraña que en 2022 se le concediera la Real Orden al Mérito Deportivo. Esta mujer polifacética además es autora de dos libros. En “Por tierra, mar y aire” (RocaEditorial, 2016), repasa su biografía y reivindica la visibilidad de las personas con distintas orientaciones sexuales. En “Cambiemos las reglas” (Algar, 2023), escrito junto a Teresa Broseta, cuenta entre otras la historia de Olivia, que consigue plantar cara al acoso a través del rugby.

Retrato 100x100 feminista: Patricia Campos

‘Goals for Freedom’

Quizás estas facetas de concienciación frente a las discriminaciones y de cooperante son las que más satisfacciones le ha dado en los últimos años. Ya de pequeña acompañaba a su madre en tareas de voluntariado, que continuó en la universidad. Cuando tuvo la oportunidad, le pareció claro que debía ayudar, sobre todo, a las mujeres que no tienen acceso a la educación, ni las mismas oportunidades de las que ella había podido disfrutar.

Podía intentar ayudar a las mujeres a través del deporte

“¿Qué podía hacer yo? Sé volar y sé entrenar. No puedo sacar en un avión a todas las mujeres que se encuentran en situaciones difíciles, pero sí podía intentar ayudarlas a través del fútbol, que mueve pasiones”. Encontró su objetivo en Uganda, a través de la ONG 'Goals for Freedom'. unque los comienzos no fueron fáciles, explica, porque allí no se concibe que una mujer haga deporte. Una mujer lo que debe hacer es casarse y tener hijos. La práctica del fútbol las empodera y les permite mostrarse orgullosas ante su comunidad, incluso a las que están enfermas de SIDA y sufren un estigma social: “Ellas son muy tímidas y cuando marcan un gol se ponen muy contentas. Después, cuando van por la comunidad paseando las felicitan y les dicen ¡has marcado un gol!”.

El Levante Unión Deportiva también ayuda con equipaciones y balones. En la ONG crean equipos mixtos, para que además esta práctica conjunta del deporte sirva para prevenir la violencia sobre las mujeres, para que ellos aprendan a respetarlas y valorarlas.

También en Valencia, donde vive Campos, organizan “pachangas” de fútbol en el cauce del río Turia, dirigidas a mujeres migrantes, víctimas de violencia de género y todas aquellas que quieran disfrutar del deporte sin límite de edad.

En la brecha: Patricia Campos Domènech, entrenadora de fútbol y expilota

Dos pasiones: volar y jugar al fútbol

Esta mujer ha sido pionera muchas veces en su vida. La primera en 2005, cuando superó un duro proceso selectivo y aprobó las oposiciones para convertirse en piloto militar, la primera en hacerlo. Recuerda su llegada a la base de Rota, cómo veía pasar los aviones por encima de su cabeza: “Yo quiero estar ahí”, se decía. Y lo consiguió, pilotó helicópteros y más tarde reactores.

Las sensaciones de volar las notas más en una avioneta pequeña que en un reactor

Recuerda la sensación de intensa emoción a los mandos de un reactor, cuando todo está controlado, pero la velocidad es tal que cualquier error puede suponer una salida de dirección y un resultado fatal. Al dejar la Armada no quiso convertirse en piloto comercial, una salida habitual de sus compañeros. Ella prefiere otras sensaciones y ahora, para disfrutar de su pasión por volar, lo hace a los mandos de avionetas: “Volar avionetas es volar, porque cuando hace viento, el avión se mueve. Todas las sensaciones las notas más en una avioneta porque es más pequeña que un avión grande o un reactor”. En 2012 dejó la Armada como alférez de navío y decidió centrarse en su otra gran pasión, el fútbol.

Patricia Campos, medalla de oro de la Real Orden al Mérito Deportivo

Entrenadora en EE.UU. y comentarista

No había abandonado su actividad deportiva durante su estancia en Rota. Al contrario, se había abierto una nueva puerta. Patricia Campos lo recuerda así: “Cuando llegué a Rota, no había equipo de fútbol de mujeres español. Pero la base es compartida con Estados Unidos y ellos sí tenían equipo de mujeres Yo pregunté si me podía unir a ellas y me dijeron que no, porque no era americana. Pregunté si podía entrenar y me dijeron que sí”.

Esa experiencia como entrenadora y su relación con el fútbol estadounidense decidieron sus próximos pasos: “Tenía veintipico años y ya no estaba para jugar de forma profesional y menos en Estados Unidos”. Así que se convirtió en la primera europea en entrenar equipos profesionales de fútbol en ese país y lo hizo en San Diego y Hawai.

En Estados Unidos, las futbolistas podían vivir del fútbol y las marcas las patrocinaban

Allí, el deporte practicado por mujeres presentaba entonces un panorama muy diferente al que se vivía en España: “Hablamos de 2010. Ahí las futbolistas ya vivían del fútbol, las marcas las patrocinaban, las niñas querían ser como ellas”, recuerda. Campos mira con satisfacción la evolución del fútbol practicado por mujeres en estos últimos años: “Date cuenta que yo jugaba en campos de tierra, con cinco tallas más que yo. el entrenador no era profesional. Las porteras son mucho mejores porque hay un profesional o una profesional que las entrena. Las jugadoras tienen conceptos tácticos que antes no tenían. Es bonito de ver”.

Ahora, desde su puesto de comentarista, sigue con pasión el juego de las más jóvenes. Es la voz que nos ha narrado partidos como la final de la Copa de la Reina desde TVE. Disfruta con la creciente calidad de los equipos femeninos y espera que haya cada vez más entrenadoras: “Hay buena cantera, hay muchas futbolistas que se han ido retirando y pueden aportar mucho”.