Hamás libera a 24 rehenes e Israel a 39 prisioneros en el primer día de tregua
- La primera tregua entre Israel y Hamás ha entrado en vigor este viernes a las 7:00 hora local
- Israel ha excarcelado a los primeros 39 presos palestinos
- Sigue en directo la actualidad del conflicto entre Israel y Hamás
Hamás ha entregado este viernes a 13 rehenes israelíes, 10 tailandeses y un filipino en el primero de los cuatro días de tregua pactada con Israel. Entre los israelíes hay seis ancianas, cuatro niños y tres mujeres.
Por su parte, Israel ha puesto en libertad a 39 presos palestinos, 24 mujeres y 15 adolescentes varones, incluyendo un niño de 14 años, todos acusados de terrorismo, pero no por delitos de sangre.
Hamás ha entregado a los rehenes a la Cruz Roja Internacional en el paso de Ráfah, en Egipto, desde donde han sido trasladados a Israel.
Se trata de la primera tanda de un total de 50 rehenes que serán liberados en los próximos cuatro días como parte del acuerdo alcanzado entre Israel y Hamás. Israel deberá liberar al menos a 150 presos palestinos.
Como parte del acuerdo, que prevé la entrada de 200 camiones diarios de ayuda humanitaria, este viernes han entrado en la Franja 137 camiones con alimentos, agua, medicinas y combustible, y también con gas para las cocinas.
La primera tregua entre Israel y Hamás se mantiene
La primera tregua entre Israel y Hamás ha entrado en vigor a las 7:00 hora local de este viernes, tras más de mes y medio de guerra-
Tras una noche en la que Israel ha continuado sus incesantes ataques contra la Franja de Gaza y Hamás ha lanzado misiles contra dos de los kibutz evacuados cercanos al enclave palestino, se cumplió la hora en la que las dos partes han acordado detener temporalmente sus ataques.
Distintos medios de comunicación presentes sobre el terreno informan de que la tregua se ha mantenido pese a algún incidente aislado. Ha habido disparos en el interior de Gaza y las sirenas han sonado en dos comunidades israelíes cercanas al enclave, pero en ningún caso se ha informado de daños materiales o personales.
La UNRWA ha confirmado que los soldados israelíes han disparado contra palestinos que intentaban volver a sus casas en el norte. La organización ha pedido poder acceder a esas zonas, donde no llega ayuda humanitaria desde hace días, escasean los alimentos, no hay agua potable y solo funcionan parcialmente dos hospitales.
El alto el fuego, que durará cuatro días y se podrá extender hasta diez si Hamás entrega a más secuestrados, incluye la entrada diaria de 200 camiones con ayuda humanitaria al enclave, incluyendo combustible, vital para el suministro eléctrico. Los primeros camiones ya han comenzado a llegar desde Egipto.
Una pausa solo temporal
La tregua no significa el final de la guerra ni la retirada de las tropas israelíes de Gaza. El Ejército ha advertido que los civiles palestinos que huyeron del norte de la Franja por los incesantes bombardeos no pueden volver a esta zona, y el ministro de Defensa, Yoav Gallant, ha asegurado que tras la tregua Israel reiniciará sus operaciones militares "con gran fuerza".
En el sur de la Franja, la tregua sí supone un alivio de la situación. En Jan Yunis, la gente ha salido a la calle. "Estamos llenos de esperanza, de optimismo y de orgullo por nuestra resistencia - ha declarado a Reuters Jaled Abu Anzah - Estamos orgullosos de lo que hemos conseguido, a pesar del dolor que esto ha causado".
También hay palestinos a los que el inicio de la guerra cogió fuera de la Franja y que aprovechan la tregua para regresar son su familia. "La gente se va, y nosotros regresamos, a pesar de la guerra y a pesar de todo, porque este es nuestro país, es lógico, uno solo tiene un país", ha declarado a Reuters Yamal Youssef Atiya, que se encontraba en Argelia y este viernes ha cruzado a Gaza.
Ismail Haniyeh, considerado líder de Hamás, que vive en Catar, ha asegurado que su organización estará comprometida con la tregua y la liberación de rehenes mientras Israel esté comprometido a su vez. Por su parte, el presidente egipcio, Abdel Fatah al Sisi, ha asegurado que el paso de Ráfah permanecerá abierto para la entrada de ayuda y la salida de los secuestrados.
El cese el fuego es un respiro para el devastado enclave, sumido en la peor catástrofe humanitaria de su historia, donde ya suman más de 14.500 muertos -más del 70% mayoría niños y mujeres-, y más de 6.800 están desaparecidos bajo los escombros o sus cadáveres tirados en calles y carreteras, por lo que la cifra de víctimas mortales podría ser mayor, según el Ministerio de Sanidad de Gaza.