Adiós al frío: el puente estará marcado por las lluvias, pero terminará con un aumento de las temperaturas
- Galicia se lleva la peor parte del nuevo frente atlántico con fuertes lluvias y vientos de hasta 140 km/h
- El ascenso será más pronunciado en la mitad norte, aunque será generalizado en toda la península
La llegada de un nuevo frente atlántico provocará un episodio de lluvia y nieve en todo el territorio español hasta el próximo 9 de diciembre. Sin embargo, las temperaturas acompañarán a partir del fin de semana, con un ascenso térmico que beneficiará a aquellos turistas que quieran disfrutar del puente de diciembre.
Durante la jornada del jueves, un frente ha avanzado de oeste a este desde Galicia y, aunque en las últimas horas ha dejado precipitaciones en buena parte de la península, ha llegado bastante debilitado al Mediterráneo. Con motivo del periodo de inestabilidad, la AEMET ha emitido un comunicado en sus redes sociales alertando a la ciudadanía. Esta inestabilidad irá perdiendo fuerza en los próximos días salvo en la zona norte, donde se ha activado la alerta naranja por vientos de casi 140 km/h y fuertes lluvias con acumulaciones de hasta 81,3 litros por metro cuadrado.
Las temperaturas se han mantenido ligeramente superiores al día anterior, dejando, en pleno mes de diciembre, 21º en ciudades como Valencia.
Salvo en el noroeste, las lluvias irán remitiendo el viernes
Esta "autopista" de frentes y borrascas se mantendrá durante el viernes, pero con más fuerza en el noreste. "Mañana habrá chubascos en Baleares, Cataluña y en el extremo norte, que podrían ir acompañadas de alguna tomenta oscasional. Sin embargo, aunque el día amanezca con muchas nubes, se abrirán claros", explica Núria Seró, meteoróloga en RTVE.
Las precipitaciones irán cesando a lo largo del día, salvo en el noroeste, Cantábrico y Pirineos donde se espera que persistan la nubosidad y los chubascos, así como posible granizo en Galicia, la meseta sur y el interior de Andalucía oriental. La cota de nieve bajará hasta los 1.200 metros en los Pirineos y por encima de los 2.000 en la cordillera Cantábrica, de manera que ambas zonas tendrán importantes acumulaciones.
Las temperaturas descenderán ligeramente en la mayor parte del país, excepto en áreas mediterráneas y en el valle del Ebro. Se prevé que zonas de interior como Ávila, Soria, Cuenca o Burgos registren las temperaturas más bajas cercanas a los 2 grados. En Canarias las temperaturas se mantendrán sin muchos cambios.
Las temperaturas se dispararán el domingo y el lunes
A partir del fin de semana y durante los primeros días de la siguiente, las temperaturas irán en aumento. "El domingo las temperaturas estarán entre unos 4 y 8 grados por encima de lo normal", explica Seró. El ascenso será más pronunciado en la mitad norte, aunque será generalizado en toda la península. La meteoróloga destaca que las temperaturas serán más altas de lo habitual para esta época del año, lo que permitirán estar en manga corta en zonas del Mediterráneo, donde podrán alcanzarse los 23 grados de máxima en zonas como Valencia o Málaga.
Por otro lado, el sábado y el domingo amanecerá con multitud de bancos de niebla, que se irán disipando con el paso de las horas. La nubosidad más compacta la encontraremos en el norte donde podrán caer precipitaciones, en especial en Galicia, y en menor medida, en el Cantábrico, Pirineos y norte de Castilla y León.
No será hasta el martes, según explica Seró, cuando comenzarán a bajar las temperaturas, ya que se prevé que haya un descenso de 8 grados, aproximadamente.
Un año sin récords de frío y con pocas heladas
Todavía quedan unos días para finalizar diciembre, pero ya está claro que 2023 será el año más caluroso por el ser humano en la tierra, según los datos aportados por Copernicus. En lo que va de año, la temperatura media a nivel mundial ha sido la más alta desde que hay registros: 1,46 grados por encima del promedio de la era preindustrial y 0,13 grados superior al periodo de 11 meses equivalente de 2016, el año más cálido registrado hasta la fecha.
En el caso español, octubre fue el segundo más cálido de la serie histórica y el tercero más lluvioso del siglo, según los datos de la AEMET. "Durante un año, si no hubiera calentamiento global fruto del hombre, debería haber 5 días fríos con récords de temperaturas máximas y mínimas. Por el momento, no llevamos ninguno de días fríos y de cálidos llevamos unos 20", recalca la meteoróloga.
El calentamiento global está provocando más fenómenos extremos como la escasez de heladas. "Se esperan pocas heladas cuando deberíamos de tenerlas. Algo negativo para el campo, ya que los frutales tienen que acumular horas de frío para poder crecer. Al no poder acumular esas heladas, les costará más madurar", añade Seró.