Cataluña prevé decretar en enero la emergencia por sequía con un tope de 200 litros habitante/día

• El Govern advierte que la situación es grave, con los embalses de las cuencas internas actualmente por debajo del 18%
• La medida conllevará también nuevas limitaciones hídricas para determinadas actividades económicas y otros usos

El río Muga a su paso por Peralada, Girona, en agosto de 2023.

El Govern catalán prevé decretar la emergencia por sequía en Cataluña en el mes de enero, lo que conllevará nuevas restricciones para hacer frente a la caída de los embalses por debajo del 16 %. Así lo ha señalado el conseller de Acción Climática, David Mascort, que ha concretado un tope de 200 litros por habitante/día.

"Si no cambia nada, pues las previsiones no son buenas", ha afirmado Mascort en una rueda de prensa tras en Consell Executiu en la que ha apuntado que la entrada en emergencia se producirá previsiblemente "durante el mes de enero". Actualmente, la reserva hídrica de la cuencas internas catalanas se encuentra por debajo del 18%, de acuerdo con el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco).

Limitar actividades y reducir la dotación ante una situación "grave"

La medida conllevará nuevas limitaciones hídricas de actividades económicas y otros usos, así como restringir el agua a 200 litros habitantes/día en una primera fase. Si la escasez se agrava, dicho tope bajaría a 180 litros en un segundo nivel y 160 en un tercero.

"Sabemos que estas decisiones no gusta que se tomen, pues acaban repercutiendo en la vida de las personas y en la actividad económica del país, pero es una situación grave: cada vez queda menos agua y debemos alargar al máximo la que tenemos", ha afirmado Mascort.

El conseller ha destacado que hace ya más de dos años que se prepara este momento de entrada en emergencia, que para ello se aprobó el plan nacional para la sequía, y por ello "nada será improvisado".