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El Gobierno y el PP se enzarzan por la amnistía en una descafeinada primera sesión de control sin Sánchez

  • La ley de amnistía ha protagonizado la primera sesión de control con duras críticas del PP y Vox
  • Bolaños defiende la medida de gracia como "el paso definitivo para la convivencia en Cataluña"

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Bolaños y Álvarez de Toledo se enzarzan por la amnistía

La ley de amnistía, piedra angular del debate político en España, ha calentado la primera sesión de control al Gobierno de la legislatura, una primera sesión descafeinada por la ausencia del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, que interviene este miércoles ante el pleno del Parlamento Europeo, y en la que no ha planteado pregunta alguna el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo. Hay que esperar, por tanto, hasta el miércoles 20 para asistir al plato fuerte: el primer cara a cara en una sesión de control en la Cámara Baja de los dos principales líderes, pendientes además de cerrar su primera reunión antes de que acabe este 2023.

Pero sí han tenido que enfrentarse a preguntas sobre la medida de gracia varios ministros: la vicepresidenta cuarta y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, el ministro de la Presidencia y Justicia, Félix Bolaños y el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska.

Tanto PP y Vox han vuelto a cargar con dureza contra la amnistía, que este martes echó a andar en el Congreso con la aprobación del primer trámite de lo que será una larga y complicada tramitación parlamentaria que se alargará durante meses hasta su entrada en vigor. Lo hizo con los votos a favor de una amplia mayoría absoluta de 178 diputados de PSOE, Sumar, ERC, Junts, Bildu, PNV y BNG, frente a los 172 votos en contra de PP, Vox, UPN y CC.

Gobierno y PP se enzarzan por la amnistía con duras críticas mutuas

El PP ha vuelto a recordar al PSOE que antes de las elecciones generales decía que la amnistía era inconstitucional, en palabras del diputado 'popular' Juan Bravo, que ha preguntado a Montero que cuál será la siguiente "mentira" del PSOE, para insistirle en que dijo que "no habría ni referéndum de autodeterminación ni amnistía".

La vicepresidenta Montero ha explicado que la amnistía que era inconstitucional era la que presentaron los independentistas en la pasada legislatura, pero ha vuelto a reiterar que la planteada por el PSOE es constitucional. "¿Tiene el PP proyecto para Cataluña?, ¿un 155 permanente o de la ilegalización de los partidos independentistas?", le ha espetado a Bravo, que ha insistido en las "mentiras" del Gobierno de Pedro Sánchez, para decir: "Hasta sus socios les piden verificadores ante sus mentiras".

Tras el rifirrafe de Montero y Bravo, ha llegado otro duelo en la sesión de control a cuenta del mismo tema y con el tono más elevado. Ha sido la diputada del PP y portavoz adjunta del PP, Cayetana Álvarez de Toledo, quien ha preguntado a Bolaños que "cuál es la aportación exacta de la ley de amnistía a la convivencia entre españoles".

Bienvenidas, reencuentros y tono bronco en la primera sesión de control de la legislatura en el Congreso

Bolaños ha contestado primero cargando contra Álvarez de Toledo, a la que ha llamado "ultra" con un tono "faltón y altivo" y después insistiendo en que este paso dado por Sánchez es "el paso definitivo para la convivencia en Cataluña" y acusando al PP de "comprar el discurso ultraderechista de Vox". Opinión diferente la de la diputada del PP, que ha hablado de "desgarro", "liquidación de la igualdad", "malversación", "fractura civil española", "demolición del estado de derecho" y "transacción corrupta".

Bolaños ha acusado a Alberto Núñez Feijóo de pertenecer a "la internacional ultra" junto a Jair Bolsonaro, expresidente de Brasil, o Viktor Orban, primer ministro de Hungría y Álvarez de Toledo le ha dicho que España se movilizará contra la amnistía: "La verdadera convivencia rima con resistencia".

Tras su cara a cara con el PP, Bolaños se ha enzarzado con la portavoz de Vox en la Cámara Baja, Pepa Millán, que ha acusado al Gobierno de "asaltar las instituciones" y de usar el Ejecutivo para “pasar por encima del Poder Judicial”, además de “mercadear” con las instituciones y “manosear” las leyes “a su antojo” para mantenerse en el poder, como con la amnistía

El ministro de la Presidencia, Justicia y Relaciones con las Cortes ha pedido a Vox que "no se preocupe por la democracia y la separación de poderes que ya están los demócratas para defenderla”, le ha dicho, para tachar de “muy irónico” que Vox pregunte por la separación de poderes y sienta “preocupación” por el Estado de derecho y la democracia cuando Santiago Abascal hizo declaraciones “para incitar al odio y a la violencia contra el PSOE y los socialistas, unas declaraciones inaceptables, probablemente delictivas, que les demuestran y muestran lo que son ustedes”. Se refería a las palabras de Abascal en Argentina: "Habrá un momento en que los españoles querrán colgar a Sánchez de los pies". El PSOE ha llevado estas declaraciones a la Fiscalía.

El Congreso escenifica cada día y en cada pleno la distancia insalvable entre los dos bloques representados en el Congreso de los Diputados, por un lado los que defienden la amnistía y, por otro, los que se oponen frontalmente a ella.

El pacto de PSE y EH Bildu en Pamplona se cuela en la sesión

Además, el pacto entre el PSN y EH Bildu para dar la alcaldía de Pamplona a EH Bildu con una moción de censura a UPN también ha ocupado la atención en esta primera sesión de control y a ello se ha referido Feijóo a la entrada al hemiciclo para calificarlo de "indignante" y decir que es el "precio" que Sánchez ha pagado para ser presidente mediante un "pacto encapuchado".

En este sentido, el portavoz del Grupo Socialista en el Congreso, Patxi López, ha negado que su partido hubiera pactado con EH Bildu presentar una moción de censura en Pamplona antes de la investidura de Pedro Sánchez, que salió adelante con lo votos de la formación abertzale. Incluso en una pregunta sobre la llegada del AVE a Euskadi, el ministro de Transportes y Movilidad, Óscar Puente, ha sido increpado por el PP por este asunto y el ministro ha contestado calificando a EH Bildu como "partido progresista democrático".

También se ha colado en esta primera sesión de control las protestas en la sede del PSOE en Ferraz por la ley de amnistía y el ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha defendido la actuación de la Policía para lamentar que entre las personas allí concentradas haya habido "fascistas": "No quiero para mi país fascistas".

Marlaska responde a Rufián que actúa contra los ultras en Ferraz

Ha dicho esto tras ser preguntado sobre estas protestas por el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, que les ha acusado de ser "cobardes" frente a unas manifestaciones "de fascistas brazo en alto" y de que hayan quedado "impunes". "No hay impunidad", le ha rebatido Marlaska, que ha asegurado que en el momento en el que estas protestas han "invadido" la legalidad las fuerzas de seguridad, en este caso la Policía Nacional, ha actuado "garantizando siempre la seguridad del conjunto de la sociedad, el ejercicio de los derechos por todos los ciudadanos y siempre bajo criterios de legalidad y proporcionalidad".

El diputado del PP Esteban González Pons ha preguntado a Marlaska si cree que el Tribunal Supremo prevaricó cuando dictó la sentencia que condenó a los líderes independentistas por el proceso de independencia de Cataluña. "El Gobierno de España en ningún momento ha dicho que los jueces en España prevarican", le ha contestado el ministro, que ha asegurado que el Ejecutivo "defiende la independencia del poder judicial".