La inflación se modera una décima en diciembre al 3,1% por la bajada del precio de los alimentos y la electricidad
- La tasa anual de la inflación subyacente se moderaron siete décimas hasta el 3,8 %
Los precios han subido en diciembre un 3,1%, una décima menos que en noviembre, según el dato adelantado del índice de precios de consumo (IPC) publicado este viernes por el Instituto Nacional de Estadística (INE).
El dato se atribuye tanto a la estabilidad de los precios de los alimentos y bebidas no alcohólicas, como a la evolución de la electricidad, cuyo coste aumenta menos que en diciembre de 2022. En cuanto a los carburantes, los precios disminuyen, pero con menor intensidad que el año anterior.
Otro dato positivo del informe es la tasa anual de la inflación subyacente -sin alimentos no elaborados ni productos energéticos-, que ha descendido en diciembre siete décimas hasta el 3,8%, lo que supone la menor tasa desde marzo del pasado año.
El IPC arrancó en enero en el 5,9%
La tasa de inflación arrancó el año en el 5,9% y escaló al 6% en febrero para moderarse en marzo al 3,3% y repuntar en abril al 4,1 %. En mayo volvió al 3,2 % y en los meses de verano se mantuvo por debajo del 3% con la tasa más moderada del año en junio (1,9 %).
En septiembre y octubre, se situó en 3,5%. Los precios, no obstante, terminan el año suavizando las subidas con el 3,2 % de noviembre y el 3,1% adelantado para diciembre. En esta cifra adelantada, el INE no ofrece más detalle de la evolución por componentes. El INE publicará los datos definitivos del IPC el próximo mes de enero.
La tasa anual del IPCA se sitúa en el 3,3%
En tasa mensual, los precios de consumo se mantienen respecto al mes de noviembre (0,0 %). En cuanto al Índice de Precios de Consumo Armonizado (IPCA), la tasa de variación anual se sitúa en el 3,3 %, la misma que la registrada el mes anterior, y en la mensual, los precios no varían (0,0 %).
Desde el Ministerio de Asuntos Económicos han señalado que, gracias a las medidas adoptadas por el Gobierno, "la inflación general y la subyacente mantienen su senda descendente, permitiendo que los salarios sigan ganando poder adquisitivo y las empresas españolas una mayor competitividad, incluso en el difícil contexto internacional".