Los presidentes autonómicos apelan a la Constitución y la "igualdad" en sus discursos de fin de año

• Los 'barones' del PP insisten en los "riesgos que amenazan el marco constitucional" y apelan a la "unidad"
• Urkullu se despide con un último mensaje navideño y advierte: "El autogobierno no está garantizado ni ha tocado techo"

Los presidentes autonómicos apelan a la Constitución en sus discursos de fin de año

Varios presidentes de comunidades autónomas han despedido 2023 con sus discursos de fin de año, en los que han prevalecido los mensajes en clave nacional, como la defensa de la Constitución y el llamamiento a la "unidad" y la "igualdad" de todos los españoles, especialmente en los líderes de aquellas regiones gobernadas por el PP, que son mayoría.

Entre los discursos, una despedida: la del lehendakari Iñigo Urkullu, que tras ocho años al frente del Gobierno vasco no optará a la reelección en los comicios que se celebrarán en 2024.

Sí será candidato, pero en Galicia y por el PP, Alfonso Rueda. El presidente de la Xunta se ha referido en su mensaje a los "riesgos que amenazan el marco constitucional" que, durante más de 40 años de autonomía, "amparó el progreso" de su comunidad. También ha advertido que la "igualdad entre ciudadanos" jamás debería estar " en negociación".

Rueda también se ha referido a los comicios autonómicos que se celebrarán el 18 de febrero, y ha asegurado que Galicia "escogerá, en libertad y con plena autonomía, su camino para los próximos cuatro años". "Confío en que el debate sea siempre constructivo y que no se añada ruido al día a día de los gallegos".

En defensa de la "unidad" y el "bien común"

El presidente de Murcia, Fernando López Miras (PP), también ha apelado a la "unidad" para construir "entre todos" una Región de Murcia "próspera, inclusiva y sostenible". Y ha advertido que la consolidación del Estado del Bienestar pasa por impedir "que se quiebre la igualdad entre territorios y ciudadanos, un principio esencial de la democracia”.

En este sentido se ha referido a la amnistía y ha dicho que estará "frente a cualquier decisión que discrimine al millón y medio de murcianos”.

La Constitución y su defensa ha sido también punto central en el discurso de algunos presidentes, como el de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco (PP), quien ha apelado a la Carta Magna como marco de convivencia y de garantía del "bien común frente al egoísmo excluyente" y ha afirmado que sin los principios de la norma básica "no hay garantías para seguir avanzando de manera pacífica y armónica".

Sin citarlos expresamente, Mañueco se ha referido a los acuerdos alcanzados por el PSOE y partidos como Junts, ERC y PNV, entre otros, que en su opinión suponen "una amenaza" de vaciamiento de los principios constitucionales. "Sin Constitución, queridos paisanos, no hay democracia, ni Estado de derecho, ni igualdad, ni libertad, ni solidaridad, no hay garantías para seguir avanzando de manera pacífica y armónica", ha argumentado.

En una línea similar, presidenta de Baleares, Marga Prohens (PP), ha advertido durante su primer mensaje de fin de año que el Govern defenderá "con todos los medios a su alcance" la igualdad de los españoles y la separación de poderes consagradas en la Constitución. Además, ha prometido que será reivindicativa ante el Gobierno central para exigir "una financiación justa" para las islas y autonomía fiscal "frente a los intentos de centralismo armonizador".

Page "alza la voz" por una España "más cohesionada"

A la Constitución también se ha referido el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, el más crítico entre los barones socialistas con los acuerdos de Pedro Sánchez con los partidos independentistas. El dirigente castellano-manchego ha "levantado la voz" en su discurso para "que no hablen solo aquellos que quieren torpedear o romper nuestra Constitución" y ha defendido su deseo por "una España más igual y más cohesionada".

Además, ha mostrado su deseo de que acaben los "momentos difíciles" que se viven en la política nacional, donde el exceso de "ruido" y de "frentismo" dificulta el entendimiento y ha deseado para el país "lo mismo que hemos conseguido en Castilla-La Mancha, una tierra que, ha afirmado, "hoy goza de estabilidad".

Por su parte, el presidente del Principado de Asturias, Adrián Barbón (PSOE), ha apostado por un Estado único y plural dentro de un sistema de financiación acorde con los valores constitucionales de solidaridad e igualdad entre comunidades autónomas.

"No caben la insolidaridad ni la desigualdad. La opción de aplicar una quita de la deuda autonómica o la reforma del sistema de financiación que ahora se plantean tienen, por fuerza, que ser coherentes con esos principios”, ha subrayado Barbón, quien ha apuntado que en cualquiera de esos debates que se establezcan en la negociación del sistema de financiación autonómica no cabe otra opción que “Asturias salga beneficiada”.

Por su parte, la presidenta del Gobierno de Navarra, María Chivite (PSOE), ha apelado a la "unidad" y el "diálogo" y ha pedido a quienes trabajan en las diferentes instituciones a que "estemos al servicio de la gente a la que nos debemos". "El ruido no soluciona los problemas de la gente", ha remarcado Chivite, quien ha destacado que "en tiempos complejos no hay mayor fuerza que la unidad. Hacer comunidad, crear alianzas y tejer redes nos mejora".

Urkullu advierte: "El autogobierno no está garantizado ni ha tocado techo"

El lehendakari, Íñigo Urkullu (PNV), ha hecho un discurso en clave territorial con la advertencia de que el "autogobierno" en el País Vasco, "ni está garantizado ni ha tocado techo".

Urkullu ha afirmado que el autogobierno vasco "no está garantizado ni ha tocado techo" y, tras apelar a "defenderlo, ampliarlo y reforzarlo", ha planteado que debe seguir siendo "un gran logro compartido". Asimismo, ha asegurado que "servir a la sociedad vasca ha sido el honor más grande que jamás habría podido imaginar" y ha defendido la gestión del Gobierno Vasco "basada en el rigor", sin "hipotecar el futuro" ni hacer "castillos en el aire".

El presidente vasco, que asumió la dirección del Gobierno autonómico en 2012, ha reconocido que el mensaje de este año "no es uno más" para él, al ser "el último", y ha subrayado que "servir a la sociedad vasca es el honor más grande" que, personalmente, "jamás habría podido imaginar".