Zonas de Bajas Emisiones en 2024: ¿cuáles son las novedades y a qué ciudades afecta?
- Hay ciudades, como Madrid, que endurecen las restricciones que ya estaban en vigor
- Afecta a municipios con más de 50.000 habitantes y a los de más de 20.000 habitantes que superen niveles de contaminación
Con la llegada de 2024, hay ciudades que intensifican las restricciones de las Zonas de Bajas Emisiones (ZBE) que fueron establecidas como obligatorias en 2023 para algunos municipios y que restringen la circulación de los vehículos sin etiqueta medioambiental en los núcleos urbanos.
La novedad es, principalmente, que se endurecen en algunas ciudades donde ya estaba en funcionamiento y, al mismo tiempo, hay municipios que hasta ahora no las tenían y las irán activando a lo largo del año. Las ZBE afectan a quienes tengan vehículos que no tienen distintivo ambiental, de modo que los conductores deberán prestar atención a cuál es su etiqueta antes de entrar a algunos de estos núcleos urbanos. Todo ello, para evitar sanciones.
¿Qué son las ZBE?
Son áreas delimitadas dentro de las ciudades en las que se restringe la entrada, circulación y estacionamiento a vehículos considerados como contaminantes. Estos son los más antiguos, los que no tienen distintivo ambiental de la Dirección General de Tráfico (DGT).
Tienen su base en la Ley del Cambio Climático y Transición Energética aprobada por el Gobierno en 2021, que busca reducir las emisiones de gases de efecto invernadero y mejorar la calidad del aire en los núcleos urbanos. Además, siguen la estela del Acuerdo de París de 2015, cuando se fijaron objetivos de descarbonización a nivel internacional. Su objetivo final es implementar, de forma progresiva, un transporte limpio y sostenible en las ciudades de cara a 2030 y a 2050.
¿A qué ciudades afecta?
Tal y como se puso en marcha en 2023, esta normativa obliga a algunas ciudades a tener una ZBE en su entorno urbano. Se trata de los municipios de más de 50.000 habitantes, lo que engloba a 149 municipios del país. Además, también incluye a aquellos con más de 20.000 habitantes que superen los niveles máximos de contaminación especificados en el Real Decreto de calidad del aire.
Los dos modelos más conocidos son los de Madrid y Barcelona, que ya tenían implantadas estas áreas antes de que fueran impuestas de forma obligada, al igual que Pontevedra. Hay otras ciudades que actualmente tienen vigente su propia ZBE, cada una con sus indicaciones, como Sevilla, Córdoba, A Coruña, Badalona, Pamplona, Zaragoza, Estepona, La Línea de la Concepción. A la lista se unen los municipios madrileños de Rivas-Vaciamadrid y Torrejón de Ardoz.
Por otro lado, hay ciudades que todavía están tramitando estas áreas, como Lugo, Valladolid, Bilbao, Girona, Cáceres, Málaga, Melilla, Palma de Mallorca y Santa Cruz de Tenerife, entre otras. Pueden consultarse qué municipios las tienen o no en la web del Ministerio para la Transición Ecológica y Reto Demográfico, así como aquellos que están en proceso de instaurarla.
El 1 de enero de 2023, el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico dio un plazo de 18 meses a los municipios para que puedan poner en marcha sus áreas, como consta en el Real Decreto para regular las ZBE. Para ello, publicó unas directrices a modo de guía para los lugares afectados. Esto fue motivo de críticas por parte de algunos gobiernos locales, que decían que no era plazo suficiente para implementarlas.
Por este motivo se han podido apreciar diferentes velocidades en la puesta en marcha y aún es apreciable el elevado número de municipios que todavía tiene pendiente activar su ZBE. De hecho, el Defensor del Pueblo ha iniciado actuaciones de oficio con 33 ciudades por el retraso que se está produciendo en la implantación de estas áreas, como ha indicado al equipo de Datos de RTVE.es. Así, pone el foco en municipios que han suspendido o dado marcha atrás en la normativa llevada a cabo hasta el momento, como Lorca, Valencia, Gijón y Castellón de la Plana, entre otros.
¿Cuáles son las novedades en 2024?
Con la llegada de 2024, lo que ocurre es que las restricciones que ya entraron en vigor en 2023 se intensificarán en algunos municipios. Además, debido a que el ritmo de implementación está en manos de los gobiernos locales, es posible que haya ciudades que hasta ahora no tuvieran restricciones y que en 2024 empiecen a ponerlas en marcha.
En Madrid, por ejemplo, los vehículos sin etiqueta ambiental no podrán acceder ni circular por las vías públicas y urbanas del municipio, algo que hasta ahora podían hacer mientras que no circularan por la M-30 y el interior de la misma, como indica la página web del ayuntamiento. No obstante, hay algunas excepciones: camiones, furgonetas, motocicletas y ciclomotores; vehículos dados de alta y domiciliados en Madrid de cara a la DGT; los de personas con movilidad reducida; o los calificados como históricos en la DGT. Esta nueva medida entrará de forma paulatina en la capital, con una primera fase informativa sin sanciones que, posteriormente, sí conllevará multas.
En Barcelona, por su parte, no pueden circular los vehículos sin distintivo ambiental en su ZBE los días laborables, de lunes a viernes, de 7:00 a 20:00 horas, como indica su ayuntamiento.
¿Cómo sé si afecta a mi vehículo?
La normativa se basa en los distintivos ambientales de la DGT, que buscan "clasificar los vehículos en función de su eficiencia energética, teniendo en cuenta el impacto medioambiental de los mismos".
Los más restringidos son los que no tienen etiqueta (también denominados de distintivo A), que son los más antiguos y aquellos considerados como los más contaminantes. Se trata de vehículos de gasolina anteriores a 2001 y los de diésel anteriores a 2006.
Por lo demás, hay cuatro etiquetas que, de forma gradual, indican si son más o menos contaminantes:
- Etiqueta B, de color amarillo: turismos y furgonetas ligeras de gasolina matriculadas desde el 1 de enero de 2001 y diésel a partir de 2006. También se refiere a vehículos de más de ocho plazas y pesados, tanto de gasolina como diésel, matriculados desde 2006. También incluye a motos matriculadas a partir de 2003.
- Etiqueta C, de color verde: turismos y furgonetas ligeras de gasolina matriculadas a partir de enero de 2006, y diésel a partir de septiembre de 2015. También vehículos de más de ocho plazas, excluido el conductor, y pesados tanto de gasolina como diésel, matriculados desde 2014. También pertenece a motos matriculadas a partir de 2007.
- Etiqueta ECO: en su mayoría son vehículos híbridos, de gas o ambos. Son los eléctricos enchufables con autonomía inferior a 40 km, híbridos no enchufables y vehículos propulsados por gas natural y gas o gas licuado del petróleo.
- Etiqueta 0 emisiones, de color azul: son los más eficientes, los vehículos eléctricos de batería, eléctricos de autonomía extendida, eléctricos híbridos enchufables con una autonomía de 40 km o vehículos de pila de combustible.
Para saber qué distintivo le corresponde a un vehículo se puede acceder a la web de la DGT. Como indica la normativa, esta pegatina debe colocarse en el parabrisas de tu vehículo o en un lugar visible si se trata de una motocicleta. Para conseguirlas, hay que pedirlas a Correos.
¿Cómo identificar las ZBE?
De forma general, las ZBE están indicadas con señales verticales antes de la entrada en el área en sí, donde también figuran las etiquetas ambientales admitidas. Además, en algunos casos puede ir acompañadas de líneas y señales marcadas en el asfalto de un color llamativo que advierta del comienzo de la ZBE, como es el caso de las Zonas de Bajas Emisiones de Especial Protección (ZBEDEP).
En las ciudades también suele haber mensajes informativos en carteles luminosos a medida que los conductores se aproximan a la ZBE.
Por ello, antes de ir a una ciudad es recomendable consultar la web de su ayuntamiento y ver la normativa vigente con respecto a la movilidad y qué restricciones están en vigor.
¿Solo afectan a vehículos sin etiqueta?
No. Aunque las restricciones de acceso y circulación se enfocan más en ellos, también se dirigen a vehículos con distintivo B y C, mientras que los de ECO y O son los que menos se ven afectados, al considerarlos menos contaminantes.
De hecho, con la normativa de las ZBE se busca ir reduciendo de forma progresiva la circulación de vehículos más contaminantes en los núcleos urbanos, de forma que los siguientes en el horizonte restrictivo serán los de distintivo B y, luego, C, hasta conseguir que el parque móvil de las ciudades sea más limpio.
Actualmente hay otras restricciones para la pegatina B, como no poder acceder a zonas de especial protección, algo que sucede en las zonas de especial protección de Madrid.
¿Hay excepciones?
Sí, y pueden consultarse en las páginas web de los ayuntamientos de cada ciudad. Cada una tiene su propio modelo, pero algunas excepciones comunes suelen ser entrar para estacionar en un parking, las ambulancias y vehículos de servicios públicos, los que tengan permiso de movilidad reducida, vehículos extranjeros o permisos de entrada para acudir a talleres, entre otras.
¿Qué ocurre si accedo en una ZBE con un vehículo sin etiqueta?
En caso de haber accedido a una ZBE con un vehículo que incumple la normativa, conlleva una sanción económica. Aunque depende de cada ayuntamiento, las multas pueden partir de los 200 euros, una cantidad que se puede reducir por pronto pago.
Más información sobre ZBE
- Mapa de la contaminación al volante: un tercio de los vehículos españoles aún contamina demasiado
- Cambios en la movilidad en Madrid: estos son los vehículos que no podrán circular por la ciudad en 2024
- Zona de Bajas Emisiones de Barcelona: ¿cómo funciona y a qué vehículos afecta?
- De Murcia a Bilbao: los puntos negros de la contaminación en las grandes áreas metropolitanas
- Canarias y Baleares: contradicciones y pocos avances para reducir las emisiones del tráfico
- Entre la obligación y la necesidad: cómo el nivel de renta influye a la hora de cambiar de coche
- “Paraísos” del impuesto de circulación: 25 municipios con ventajas fiscales captan la mitad de los coches de empresa