Un juzgado archiva la causa de la muerte de Álvaro Prieto: falleció electrocutado accidentalmente

• Según el informe de la autopsia Álvaro Prieto falleció electrocutado por muerte accidental y el mismo día que desapareció

Foto de archivo de la investigación policial de la causa de muerte del joven cordobés Álvaro Prieto

El juzgado de Instrucción número 11 de Sevilla ha archivado la causa de muerte del joven cordobés, Álvaro Prieto, que murió electrocutado el 12 de octubre en las vías exteriores de tren de la estación de Santa Justa de Sevilla.

El Tribunal de Justicia de Andalucía ha comunicado que Álvaro falleció por tocar una catenaria ferroviaria cuando estaba entre dos vagones de un tren en la zona de talleres de la estación. Según ha confirmado TVE el juzgado sevillano publicó un auto el día 19 de diciembre, en el que explicaba que “no existían indicios de la comisión de ilícito penal alguno, y en el que intervinieran de forma intencionada o imprudente terceros en el fallecimiento”.

El 12 de octubre de 2023 el cordobés perdió su tren con destino a su ciudad natal, tras ello intentó subir a otro AVE pero el personal de la estación se lo impidió. Después, Álvaro Prieto acudió al punto de atención al cliente, donde el delegado del Gobierno, Pedro Fernández, asegura que se le ofreció recargar su teléfono pero este se negó.

Según la Policía Nacional el joven accedió al área de talleres de la estación y una vez allí se subió a la parte superior de un tren estacionado mediante la intersección entre dos vagones. La Policía Nacional afirma que Prieto podría haber caído "instantáneamente fulminado" en el hueco entre los dos coches.

En el mismo auto el juzgado hace referencia a las direfentes diligencias llevadas a cabo, como la inspección ocular, la toma de muestras y vestigios por la Policía Científica, el levantamiento judicial del cadáver, la práctica de la autopsia, la toma de declaraciones de testigos y la recogida de grabaciones de las cámaras de seguridad de la estación y de los establecimientos cercanos. Unido a esto, el juzgado recibió el informe de la autopsia realizada y, de acuerdo con los informes de los médicos forenses, concluyó que fue una muerte accidental por electrocución y que el joven falleció el mismo día de su desaparición.

Por todo ello, el juzgado de Instrucción ha decidido archivar su caso al “no existir indicios de la perpetración de hecho delictivo alguno".