Aumentan a 73 los muertos por el terremoto en Japón mientras continúan las labores de rescate
- En localidades como Wajima o Suzu los Ayuntamientos aún tratan de cuantificar edificios y estructuras derrumbadas
- El oeste de Japón ha sufrido una nueva réplica de magnitud 5,5
Japón ha notificado este miércoles al menos 73 muertos por el fuerte terremoto de magnitud 7,6que golpeó el lunes la costa occidental del centro del país. Mientras la cifra de fallecidos continúa aumentando, los equipos de rescate batallan para encontrar supervivientes.
El oeste de Japón, además, ha sufrido una nueva réplica de magnitud 5,5 sobre las 10.54 hora local (1.54 GMT) y a 10 km de profundidad con epicentro en la península de Noto, en la prefectura de Ishikawa, al igual que el temblor el lunes.
El terremoto se ha podido sentir con fuerza en la ciudad de Wajima, una de las más afectadas por el movimiento de hace dos días, pero también en Nanao, Nakanoto, Aanamizu y Noto, todas ellas localidades que han registrado fallecidos tras el fuerte seísmo de principios de semana.
En localidades como Wajima, Noto o Suzu, todas cerca del epicentro, los Ayuntamientos aún están tratando de cuantificar edificios y estructuras derrumbadas. En la última de ellas "en torno al 90% de las casas han quedado total o parcialmente destruidas", ha indicado el alcalde, Masuhiro Izumiya, en declaraciones a la agencia Kyodo.
Wajima y Suzu concentran 24 y 24 fallecidos, respectivamente, y el número total de heridos graves en toda la región suma ya 22. El terremoto provocó a su vez un gran incendio en la primera de estas localidades, pero los bomberos han logrado finalmente controlar las llamas, según el Gobierno de la prefectura de Ishikawa, la más afectada por el temblor.
Los ayuntamientos de Wajima, Noto y Suzu han incrementado sus estimaciones sobre el número de casas derrumbadas, por lo que han incrementado los dispositivos de rescate antes de alcanzar las 72 horas, límite tras el cual vuelve casi imposible rescatar a personas con vida.
La central nuclear registró una subida del nivel del mar de tres metros
La central nuclear de Shika, en el centro de Japón, registró una subida del nivel del mar de tres metros poco después del fuerte terremoto que golpeó esta región el lunes y detectó ligeros daños en uno de los muros que protegen uno de sus reactores de la llegada de tsunamis, según ha informado este miércoles la cadena NHK.
Pese a que a primera hora del martes la empresa operadora, Hokuriku Electric Power, anunció que no había detectado fluctuaciones importantes en el nivel del agua, una revisión realizada ese mismo día por la noche desveló que un medidor instalado cerca de la toma de agua marina que se usa para enfriar la central registró una subida del mar de tres metros ente las 17.45 y 18.00 del lunes.
Durante esa última revisión la empresa ha descubierto, además, que un muro de unos cuatro metros de altura instalado en 2011 para proteger el reactor 1 (uno de los dos que tiene esta central, que permanece apagada desde hace casi 13 años) se inclinó varios centímetros.
Las lluvias podrían provocar corrimientos de tierra
Dos días después del seísmo, todavía es difícil conocer el alcance total de los daños debido a la cantidad de escombros, zanjas o levantamientos de tierra que bloquean calles y carreteras. La Autoridad de Información Geoespacial japonesa ha detectado levantamientos de tierra en Wajima de hasta cuatro metros y de hasta uno en Suzu.
A su vez, el tiempo no acompaña en la región más afectada debido a las lluvias y la Agencia Meteorológica de Japón (JMA) ha advertido que incluso precipitaciones escasas pueden incrementar el riesgo de que se produzcan corrimientos de tierra.
Según los últimos datos publicados el martes al respecto, más de 57.000 personas continúan evacuadas en las prefecturas de Ishikawa y Niigata, mientras que un millar de efectivos de las Fuerzas de Auto Defensa (Ejército) participan en labores de rescate y asistencia.
El terremoto que golpeó la península de Noto el lunes tuvo su epicentro a 30 kilómetros al noreste de Wajima y alcanzó el nivel 7 en la escala cerrada de 7 japonesa, que se centra en el poder destructivo del temblor. Concretamente, el nivel 7 describe una vibración del suelo que hace imposible permanecer de pie.
Este terremoto, el más devastador en Japón desde el de 2016 en la prefectura de Kumamoto (que dejó más de 200 muertos), es el primero de nivel 7 en registrarse en el país desde 2018, cuando un seísmo alcanzó el nivel 7 en la isla de Hokkaido.
El terremoto del lunes obligó además a activar la alerta por tsunami en buena parte de las costas del archipiélago durante casi un día entero, aunque las subidas del nivel del mar registradas afortunadamente no produjeron daños importantes.