Los transportistas españoles denuncian la "complicidad" de la gendarmería ante los bloqueos de los agricultores franceses

• Este martes una mujer ha muerto tras ser atropellada durante una protesta de agricultores en Pamiers, al sur de Francia
• La federación del transporte insta a Exteriores a que actúe para garantizar el derecho a la libre circulación

Primera víctima mortal durante una protesta de agricultores en el sur de Francia

Las movilizaciones de los agricultores franceses iniciadas la semana pasada en protesta contra las nuevas políticas medioambientales y tributarias del Gobierno francés han estado ocasionando importantes trastornos a la movilidad de los transportistas españoles por el país vecino, en el contexto de las protestas de agricultores en varios países europeos por el encarecimiento de costes y la regulación ambiental, entre otros motivos. Así lo ha denunciado la Federación Nacional de Asociaciones de Transporte de España (FENADISMER), que ha subrayado que los bloqueos podrían agravarse en los próximos días y ocasionar el colapso de las exportaciones españolas.

"La ira del mundo agrícola está manifestándose cada día de forma más dura, ganando escala y visibilidad, con bloqueos  en decenas de autopsitas y carreteras principales, a pesar de la reunión mantenida entre el primer ministro y representantes de los agricultores", ha declarado el organismo en un comunicado. "Se han anunciando nuevas acciones en el territorio nacional en los próximos días con notables consecuencias en el sector del transporte, donde el bloqueo de carreteras constituye la principal amenaza", añade.

Otra de las cuestiones que reprochan los transportistas es la escasa actuación por parte de las autoridades francesas para garantizar el derecho fundamental a la libre circulación añadiendo que esto "denotaría una cierta complicidad con los manifestantes". Si bien la Federación ha querido recalcar que respetan el derecho a manifestarse, consideran que no puede ser a costa de "utilizar una vez más como 'rehenes' al colectivo de transportistas, que no tienen responsabilidad alguna sobre los motivos de la protesta".

Por todo ello, la Federación ha instado al Ministerio de Asuntos Exteriores e España a que actúe con carácter urgente ante las autoridades francesas y la Unión Europea, para que las nuevas movilizaciones previstas en los próximos días no afecten a la libre circulación por la red de carreteras francesas de alta capacidad, ya que en el caso de no hacerlo, "ocasionarían perjuicios irreparables a la economía española", han apuntado.

En el comunicado también han hecho referencia a la muerte este martes de una agricultora tras ser atropellada por un vehículo durante una protesta en la ciudad de Pamiers, al sur de Francia. La víctima, que se encontraba junto a su hija y su marido en una barricada, era una criadora de vacas de 35 años del pueblo Saint-Felix-de-Tournegat, a pocos kilómetros de la ciudad donde se ha producido el accidente. "Previsiblemente va a acentuar estas acciones de protestas [...] agravando la situación de tránsito entre España y Francia y afectando a los más de 20.000 transportistas españoles que diariamente cruzan la frontera", ha añadido FENADISMER.

Francia se suma a la protesta de otros países europeos

El sector del campo francés se ha sumado en los últimos días a las protestas puestas en marcha por los agricultores en otros países europeos como Alemania, Países Bajos, Polonia o Rumanía, contra las medidas ambientales que la Unión Europea prevé establecer, y que afectarán a sus economías.

Pulso del campo al Gobierno alemán: agricultores bloquean ciudades por el recorte de ayudas

Desde la tarde del pasado jueves, grupos de agricultores galos bloquean la autopista A64 entre Toulouse y Trabes, así como las carreteras RN124 y RN20 ambas en el sur del país. Por su parte, el principal sindicato agrícola, GNSEA, ya estudia la convocatoria de una gran protesta a nivel nacional durante las próximas semanas.

El retraso en la entrega de ayudas publicas ante catástrofes, la implantación de nuevas normas medioambientales y la subida de precios por parte las industrias agroalimentarias, son algunas de las principales quejas que mantienen en pie de guerra a este colectivo.