General Aroldo Lázaro: "La solución a lo que está ocurriendo en Oriente Próximo es política, no militar"

• El general alerta del riesgo de una escalada hacia un conflicto regional
• DIRECTO: sigue la última hora de la guerra en Gaza

Los intercambios de fuego entre Hizbulá e Israel son diarios en Líbano

El general Aroldo Lázaro Sáenz, Jefe de la Misión y de la Fuerza de Naciones Unidas en el Líbano (FINUL), recibe a un equipo de RTVE en la base de la ONU en el sur del Líbano. El militar español está al frente de una fuerza compuesta por más de 10.000 militares de 48 países desplegada a los largo de los 120 kilómetros de la llamada Línea Azul, la frontera entre el Líbano e Israel.

El territorio es objeto de frecuentes choques pero, desde los atentados de Hamás del 7 de octubre, lo es aún más. La milicia de Hizbulá, aliada de Hamás, hostiga sin cesar a las tropas israelíes, que responden y atacan con bombardeos cada vez más alejados de la línea divisoria. El general Lázaro alerta del riesgo de una escalada hacia un conflicto regional.

PREGUNTA: ¿Qué valoración hace de la situación actual en torno a la línea azul en el Líbano?

RESPUESTA: Actualmente la situación aquí en el sur del Líbano podemos definirla como tensa, volátil y al mismo tiempo peligrosa. Existe a diario un intercambio de fuegos entre las partes contendientes, un intercambio de fuegos que está limitado o restringido a una zona definida, al norte y al sur de la línea de separación que llamamos la línea azul, de unos cinco o siete kilómetros y que se mantiene mantienen en esa zona.

No obstante, en ocasiones se han producido acciones más en profundidad tanto al norte como al sur, y los objetivos principalmente son militares, aunque los civiles se han visto afectados con heridos y en ocasiones con fallecidos. El sistema se está manteniendo en statu quo, de equilibrio. Pero cualquier error de cálculo o cualquier interpretación de lo que está ocurriendo puede dar lugar a una escalada. Y ese es el temor que se tiene, que este conflicto pudiera escalar.

Es ahí donde se vuelcan esfuerzos para que no ocurra. Nuestras unidades continúan con sus actividades y las han adaptado a la situación con medidas de seguridad. Hemos mantenido el empeño en nuestra resolución y buscar ese balance entre el cumplimiento de la misión y la seguridad de nuestras tropas es nuestro objetivo.

P: ¿Puede precisar cómo son las condiciones de trabajo en estos momentos de las tropas de FINUL?

R: Nuestras fuerzas de paz continúan empeñando su esfuerzo en la misión que tienen encomendada por la ONU y en toda la zona de operaciones. Nosotros hemos adaptado nuestras actuaciones operativas, nuestras actividades, a la situación en la que estamos.

Hemos focalizado principalmente la acción en lo que se refiere a patrullas y al control y monitoreo de la Línea Azul para evitar esa escalada lo máximo posible. También mantenemos el enlace con las dos partes. Ese sistema de coordinación es importante tanto a nivel táctico como, digamos, un poco más a nivel más estratégico, con un enlace continuo con los líderes a ambos lados; con los puntos de contacto a ambos lados.

Yo tengo contactos aquí en Líbano y en Israel para intentar evitar esa escalada. Como he dicho inicialmente, hemos adaptado las medidas de seguridad buscando que no escale esta situación, algo que nadie quiere.

P: ¿Me podría dar detalles de los últimos incidentes más destacados y recientes?

R: Con este intercambio de fuegos diario hay incidentes a lo largo del día. Y nosotros intentamos evitarlo con esas medidas de seguridad. Como he dicho anteriormente, nuestras posiciones se han visto afectadas en ocasiones por los intercambios de fuegos. Han caído cerca de las posiciones y en algunas ocasiones dentro de ellas. Y con esas medidas nuestras fuerzas de paz han estado protegidas. Hemos tenido tres heridos que se han recuperado y están ya en condiciones óptimas.

A veces hemos observado también que las acciones se producen cerca de nuestras posiciones y las contra reacciones también, con lo cual eso pone en cierto peligro a nuestras infraestructuras y materiales. Pero por ahora, con las medidas adoptadas, estamos manteniendo la seguridad.

P: ¿Cuál es su relación actual con la población y con el gobierno de Líbano?

R: La relación de FINUL con la población y con el gobierno del Líbano y las autoridades locales ha sido siempre magnífica. Y mantenemos ese estatus de de confianza mutua entre ambas partes. FINUL trabaja no solo acciones operativas, también acciones relacionadas con el apoyo a la población civil, con proyectos a nivel de UNICEF y a nivel de los países contribuyentes para intentar paliar las necesidades de acceso a los servicios básicos que tiene ahora mismo la población.

Hay que tener en cuenta que la población ha sufrido una crisis financiera previa a lo que está ocurriendo y ahora se ha incrementado en esas necesidades y es donde focalizamos nuestra actuación. Hay que decir que durante 17 años FINUL ha estado presente en esta zona en contacto directo con la población civil y eso se mantiene. Una de nuestras misiones es la protección de civiles y en este sentido quisiera señalar que en ocasiones nuestras bases han acogido a personal civil, por la seguridad que podíamos proporcionarles ante el intercambio de fuegos. Y es nuestro nuestro objetivo seguir manteniendo esa buena relación con la población y las autoridades locales.

Dentro en un campo de refugiados en el Líbano

P: Por último, ¿cómo ve la posibilidad de que el conflicto actual escale a una guerra regional?

R: Es cierto que lo que está ocurriendo tiene relación y consonancia con lo que lo que está ocurriendo en Gaza. Aquí existe ese estado de conflicto entre ambas partes y está inmerso en el ambiente regional. La comunidad regional y la comunidad internacional están intentando por los medios diplomáticos, por los medios políticos, que esto no escale más y que se llegue finalmente a una posible solución.

Quisiera señalar que la Resolución de Naciones Unidas 1701, en la cual se enmarca el trabajo de FINUL es el marco adecuado para poder alcanzar esos acuerdos que eviten una escalada aquí o fuera en la región, si llegara a ser el caso. La importancia de la 1701 viene dada por el empeño de las partes en conflicto, en implementarla en su totalidad y es una herramienta para que eso pudiera llegarse a efecto. La solución a lo que está ocurriendo no es militar. Va por la vía política, por la vía diplomática, y FINUL empeñará todo su esfuerzo en seguir esa línea y apoyar a la posible solución final: una paz duradera en esta zona.