Tus datos son tu amenaza
- Los gigantes tecnológicos y los estados saben de ti mucho más de lo que imaginas
- Cada vez más personas optan por aplicaciones, plataformas y redes sociales alternativas para controlar sus datos
En una sociedad hiperconectada y donde los estados nos vigilan online con regularidad, nuestra privacidad está en peligro. Cedemos la huella digital gratuitamente a las propietarias de las plataformas en internet y con nuestros datos negocian con el mejor postor.
Todos estamos expuestos a diferentes riesgos, desde el ciberacoso o la ciberdelincuencia, a ser un objetivo potencial para gobiernos autoritarios en el caso de los periodistas de investigación o disidentes políticos. Por eso, se hace necesario explorar alternativas para mantener la confidencialidad y desaparecer en internet sin dejar de estar en la red. Eso sí, en otra red.
Oro parecen, datos son
En la actualidad, rara es la persona que no se comunica y relaciona a través de internet. No hay día que no dejemos nuestra huella digital, cuando interactuamos en la red, cuando compramos o viajamos. Es habitual subir fotos, las de los familiares y amigos, decir dónde se está, con quien, lo que somos y lo que queremos ser.
Y en todas estas acciones estamos regalando suculentos datos a las GAFAM (Google, Amazon, Facebook, Apple y Microsoft), que nos ofrecen sus servicios, a simple vista, a cambio de nada. "No olvidemos que su modelo de negocio se basa en recoger la mayor cantidad posible de información para luego venderla a quienes buscan dirigirse a nosotros", advierte Joseph de Veaugh-Geiss, defensor del software libre. Ciudadanos de a pie, jóvenes, periodistas y disidentes, muchos tenemos nuestros datos fuera de nuestro control y nos enfrentamos a amenazas diferentes.
“Deberíamos ser capaces de controlar los algoritmos y nuestros datos, saber qué es lo que compartimos y saber cómo se tratan nuestros datos“
El investigador en Protección de Datos, Claudio Agosti, insiste en que "deberíamos ser capaces de controlar los algoritmos y nuestros datos, saber qué es lo que compartimos y saber cómo se tratan nuestros datos". Porque, en la actualidad, una de las prácticas maliciosas más extendidas en la red es la de espiar a los usuarios. "Cualquier programa no libre que se utilice, envía datos sobre ti y sobre tu actividad online a las empresas y quizá a algún estado", declara Richard Stallman, promotor de la Fundación Software Libre.
"Cuando oigo a la gente decir que la privacidad es historia, me parece un disparate", declara el periodista de investigación del The Intercept, entre 2014 y 2019, Ryan Gallagher. Si queremos ser dueños de nuestra propia privacidad, tenemos la obligación de protegernos en la red.
¿Cómo podemos librarnos de Google?
Max Thommes es un actor y músico alemán. Hasta hace poco utilizaba las redes sociales y los distintos servicios ofrecidos por las gigantes tecnológicas. Como cualquier artista, Max necesita de estas plataformas para dar a conocer y promocionar sus trabajos.
Sin embargo, últimamente ha tomado conciencia del rastro que dejan sus datos en internet y quiere limitar riesgos en la medida de lo posible. "Ha habido muchos escándalos sobre el espionaje y el seguimiento de datos", asegura Rosa Rave, otra de esos artistas que desean un internet más abierto. "A nuestra sociedad le cuesta entender a qué tipo de derechos y libertades está renunciando cuando utiliza Facebook", avisa Agosti.
Junto a otros compañeros de profesión está buscando alternativas a las redes sociales y organizarse independientemente. Han optado por el software libre y el servicio de gestión de eventos Mobilizon, la alternativa a Facebook Events. Forma parte del fediverso, "un protocolo abierto que permite la comunicación entre servicios", revela De Veaugh-Geiss, donde también hay otras plataformas alternativas a las de las GAFAM.
Sin olvidar, tampoco, una de las estrategias digitales como es la compartimentación de datos para poder librarnos, por ejemplo, de Google o de Apple. "Si utilizas una de sus aplicaciones porque no te queda otra, intenta al menos no usarlas todas para no revelarle toda tu vida", aconseja Agosti a Max.
“Hay muchos motores de búsqueda que respetan nuestra vida privada“
Safa Ghnaim, formadora en Protección de Datos, va más allá. "En lugar de utilizar Google Chrome como navegador, podrías usar Firefox, Chromium o Tor. Hay muchas alternativas", asegura. Y, en cuanto a los buscadores, indica que "hay gente que usa Searx o Qwant, hay muchos motores de búsqueda que respetan nuestra vida privada", sostiene.
Julian Assange como telón de fondo
Desde 2014 a 2019, Ryan Gallagher trabajó como periodista de investigación en The Intercept. Como tantos otros, Gallagher ha visto cómo la vigilancia en internet se ha convertido en un serio problema para su profesión en relación a la primera toma de contacto con un denunciante que tiene algo importante que comunicar. "Si me escribe desde una dirección de correo de Gmail que lleva años utilizando o me llama desde su teléfono, ese intercambio dejará una huella digital permanente entre nosotros dos". Y estos rastros digitales pueden ser utilizados para que los adversarios puedan identificar y denunciar a las fuentes.
Para contrarrestar este problema, en 2006, Julian Assange cofundó Wilileaks, una plataforma que permite a los informantes transmitir documentos confidenciales preservando su anonimato. Desde 2011, Assange está amenazado con ser extraditado a Estados Unidos y sobre él pesan penas de hasta 175 años de cárcel.
El periodista de investigación, John Goetz, afirma que "Wikileaks puso en marcha un riguroso proceso para eliminar de todos los documentos los nombres de las fuentes antes de su publicación". Y la persecución fue feroz.
Plataformas de comunicación seguras, mensajería cifrada, son solo algunas de las herramientas que aseguran a los periodistas el anonimato de sus informantes, porque, "cuando trabajas con documentos de la NSA o la CIA, ellos son los mejores del mundo interceptando comunicaciones", confiesa Jean Marc Manach, periodista de investigación de Next Impact.
“La humanidad no será libre mientras impere Facebook“
Algunos ya están haciendo el esfuerzo de salir de la comodidad que ofrecen las GAFAM y optan por soluciones prácticas, plataformas independientes, nuevas estrategias digitales, software libre y de código abierto. El objetivo es protegernos ante quienes ya saben de nosotros mucho más de lo que quisiéramos. Por ello, los expertos insisten en que todo es poco cuando se trata de preservar nuestra intimidad, porque, según afirma Max, "la humanidad no será libre mientras impere Facebook".