Las asociaciones de agricultores reclaman a la UE cláusulas espejo: "Hay que jugar con las mismas reglas"
- Piden equiparar las condiciones para los productos europeos y extranjeros para evitar "la competencia desleal"
- "Han hecho la agenda sin contar con los que sufrimos las decisiones. Sostenibilidad sí, rentabilidad también", dicen
En plena ola de protestas de los agricultores frente a la normativa europea y los requisitos a los que se enfrenta el sector, los representantes de dos de las principales organizaciones agrarias, Miguel Padilla (COAG) y Pedro Barato (Asaja), han instado a Bruselas a equiparar las condiciones técnicas y comerciales de los países de la UE y el resto para evitar "la competencia desleal" en los productos del campo.
En una entrevista en La noche en 24 horas, ambos han mostrado su preocupación por las diferencias en los requisitos entre los agricultores europeos y el resto de países, especialmente a la hora de regular los productos fitosanitarios para prevenir las plagas. "Pedimos cláusulas espejo, reciprocidad", ha indicado Padilla, que ha querido subrayar que no están en contra del comercio, sino de la desigualdad a la que se enfrentan. "Lo que pido es jugar con las mismas reglas, con las mismas condiciones que aquí", ha insistido.
El portavoz de COAG ha advertido, además, de que firmar acuerdos comerciales con "condiciones diferentes" –como ocurre con Mercosur, que posee una gran industria cárnica– puede desembocar en una situación difícil en el mercado local: "Puede arrasar con el vacuno en España".
En la misma línea se ha expresado Barato, que ha opinado que aunque "el paraguas de la UE es muy positivo", "no se puede hacer lo que algunos países quieren: que algunos jueguen en primera división". "No puede ser que aquí haya restricciones, pero luego este verano las sandías de Marruecos estaban producidas con pesticidas prohibidos", ha ejemplificado.
Piden alternativas frente a las plagas: "Lloras de impotencia"
"Nuestras reclamaciones son sencillas: justicia y la equiparación con los productos que vienen de fuera", ha reclamado también María Lozano, una de las miles de agricultoras que se ha manifestado este martes en las calles de todo el país.
Lozano, que se dedica al cultivo de olivo y almendro, ha contado cómo se encuentran día a día con la competencia de los productos extranjeros que no pasan los mismos controles fitosanitarios que los europeos, que no hacen sino encarecer la producción.
En ese sentido, ha dicho comprender que pongan límites a este tipo de componentes contra las plagas y la necesidad de cuidar el medio ambiente, pero ha pedido alternativas para poder resolver los problemas que afectan al campo. "Estoy a favor de que se sea más ecológico y se contamine menos. Pero si nosotros no producimos, la gente se muere de hambre. ¿Por qué no nos dan soluciones más ecológicas para las plagas?", ha cuestionado.
"Lloras de impotencia del dinero, el tiempo y el amor perdidos, porque es tu campo, pero ves que se muere y no te dan solución", ha remarcado.
"Sostenibilidad sí, pero rentabilidad también"
En este contexto, Asaja y COAG han criticado que esta situación haya llegado de la mano de una legislación "a espaldas de la realidad". "La agenda está cargada de la palabra sostenibilidad y le falta la rentabilidad. La han hecho sin contar con los que sufrimos estas decisiones. Sostenibilidad sí, pero rentabilidad también", ha criticado Barato.
Padilla ha corroborado sus palabras y ha denunciado la "falta de interlocución" de Bruselas con "los que va la normativa". "No tenemos amparo económico para hacerla cumplir", ha lamentado.
Asimismo, han opinado que la Política Agraria Comunitaria (PAC) actual ha nacido "coja". "Ha empezado en el 2023 con menos dinero y más exigencias que las anteriores", ha dicho Barato, quien ha cargado contra la UE por apostar por políticas verdes que pretenden ser "idílicas". "Con las cosas de comer no se puede jugar y están jugando", ha avisado.
No obstante, Padilla ha recordado que, pese a sus fallas, la PAC resulta "fundamental" en regiones donde sin ayudas sería imposible desarrollar las explotaciones agrarias. "Es imprescindible", ha insistido.