La Policía de Brasil abre una investigación contra Bolsonaro y militares de su círculo por intento de golpe Estado

• Entre los investigados también se encuentran exministros de su gabinete
• La justicia ha exigido que Bolsonaro entregue su pasaporte en las próximas 24 horas

El ex presidente brasileño, Jair Bolsonaro, habla con la prensa en el Aeropuerto Internacional Juscelino Kubitschek de Brasilia AFP/SERGIO LIMA

La Policía Federal de Brasil ha desplegado un operativo en una decena de estados del país contra el expresidente Jair Bolsonaro, además de varios exministros de su administración y militares de alto rango, por intento de golpe Estado ocurrido tras las elecciones presidenciales de octubre de 2022.

En una nota de prensa, las fuerzas de seguridad han señalado que buscan esclarecer si los investigados integraron una "organización criminal que actuó en tentativa de golpe de Estado" para evitar que el candidato electo y actual presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva, asumiera la presidencia del país. El juez de la Corte Suprema, Alexandre de Moraes, ha ordenado a Bolsonaro entregar su pasaporte en un plazo de 24 horas, además de prohibirle mantener contacto con los otros investigados.

Los agentes cumplieron este jueves 33 órdenes de registro y 4 de prisión preventiva, e impusieron 48 medidas cautelares a los sospechosos.

Detenidos tres militares y un asesor del expresidente

De acuerdo con el diario brasileño O Globo, las detenciones se han realizado contra tres militares y un asesor del anterior gabinete de Bolsonaro: Filipe Martins, quien asesoró al exmandatario durante su legislatura; los coroneles del Ejército Marcelo Câmara y Bernardo Romão Corrêa Netto; y Rafael Martins, mayor de las Fuerzas Especiales del Ejército. 

Los registros se hicieron contra otros exministros y generales del ejército como Walter Braga Netto, Augusto Heleno y Paulo Sérgio Nogueira, que integraron el gabinete de Bolsonaro, y el excomandante de la Marina, Almir Garnier Santos.

También fueron objeto de búsquedas el exministro de Justicia Anderson Torres, quien ya estaba siendo investigado por el asalto al Congreso de Brasil que perpetraron simpatizantes de Bolsonaro, y Valdemar Costa Neto, presidente del Partido Liberal (PL) del cual Bolsonaro lidera en la actualidad.

La investigación apunta que el grupo investigado "se dividió en núcleos de actuación para diseminar" sospechas de fraude en las elecciones de 2022 para alentar "una intervención militar". Los hechos culminaron en un asalto masivo al Congreso de Brasil del 8 de enero de 2023, cuando miles de seguidores de Bolsonaro invadieron y destrozaron las sedes del legislativo en un intento para derrocar al Gobierno de Lula, que había asumido el poder una semana antes.

En una entrevista al canal de radio brasileño Itatiaia, Lula da Silva ha señalado que el intento de golpe de Estado, "no hubiera ocurrido sin él [Bolsonaro]". El exmandatario ya estaba siendo investigado previamente por el episodio del asalto al Congreso.

Bolsonaro podría enfrentar una condena a prisión

Jair Bolsonaro ya había sido acusado de negligencia política y suspendido hasta 2030 por difundir falsedades electorales, y enfrenta varios cargos adicionales pendientes de investigación que podrían llevarlo a la cárcel. Bolsonaro ha negado cada una de las irregularidades y califica las investigaciones de "motivaciones políticas".

La semana pasada, en una acción que confirma el creciente cerco legal que se cierne sobre Bolsonaro, la policía registró propiedades vinculadas a su hijo y concejal de Río de Janeiro, Carlos Bolsonaro, sospechoso de utilizar datos recopilados ilegalmente por la agencia de espionaje Abin para atacar a los rivales de su padre. En su cuenta oficial de X, Carlos Bolsonaro señaló que las investigaciones eran "una cortina de humo que desvían la atención de lo que realmente le importa a la nación".