Milei presenta su programa económico al papa en un encuentro en el Vaticano tras meses de tensión
- Entre los obsequios, el presidente argentino le ha regalado alfajores de dulce de leche y galletas de limón
- El encuentro se produce tras varios meses de tensión desde las elecciones argentinas
El presidente de Argentina, Javier Milei, se ha reunido por primera vez con el papa Francisco en un encuentro en el Vaticano que ha durado una hora. Tras el encuentro, el presidente argentino ha regalado al pontífice galletas de limón y alfajores de dulce de leche.
La reunión se produce tras meses de tensión entre Milei y el pontífice, ya que el presidente calificó al papa de "representante maligno en la Tierra" y simpatizante de las "dictaduras sangrientas" durante la campaña electoral argentina.
Antes esas declaraciones, Milei, en una entrevista televisiva, en el programa italiano Quarta Repubblica, ha reconocido que se ha replanteado su posición con respecto al papa, dado que ha entendido que es "el líder de los católicos en el mundo" y que es "la persona argentina más importante de toda Argentina". Por lo que ha afirmado que quiere empezar a crear un vínculo positivo con él.
"Filosóficamente, soy anarcocapitalista y, por lo tanto, siento un profundo desprecio por el Estado. Creo que el Estado es el enemigo, creo que el Estado es una asociación criminal", ha declarado Milei durante la entrevista. Además, ha añadido que define el comunismo como "una enfermedad del alma" y que, aunque es católico, practica un poco el judaísmo.
Por su parte, el pontífice entiende que las descalificaciones formaban parte de la campaña electoral y aunque no esté de acuerdo con "algunas tendencias políticas e ideológicas" en Argentina, él siempre se preocupará por los que sufren.
El nuevo programa económico de Milei
Milei y el papa Francisco se han reunido cuando en su país natal la inflación ha subido más del 200%. Por lo que el mandatario argentino ha compartido con él su nuevo programa económico para solucionar la crítica situación en la que se encuentra su país. Para ello, durante su visita al Vaticano se ha reunido con el secretario de Estado vaticano, Pietro Parolin, y con el secretario para las Relaciones con los Estados, Richard Gallagher. Asimismo, durante el encuentro han conversado de otros temas internacionales, sobre todo de los conflictos actuales, como la guerra de Israel y Hamás en Gaza y la guerra en Ucrania, y el compromiso por la paz que deben tener todos los países del mundo.
Desde que llegó al poder en diciembre, Milei ha presentado la ley óminbus que declara una situación de emergencia en Argentina hasta el 31 de diciembre de 2025. La ley se centra en llevar a cabo reformas en el ámbito económico, financiero, fiscal, previsional, seguridad, defensa, tarifaria, energético, sanitario, administrativo y social.
Entre otros puntos, este decreto incluye un cambio en la normativa electoral y una reforma en el Código Penal para controlar las manifestaciones callejeras y el poder del Gobierno para privatizar las empresas públicas.
Intercambio de regalos entre ambos representantes
Milei ha llegado al patio de San Damaso, que da acceso al palacio apostólico, cerca de las 9:00 de la mañana. Según ha comunicado en su cuenta de X su portavoz, Manuel Adorni, el presidente ha dado al papa Francisco la copia de la carta manuscrita del canciller José María Gutiérrez a Juan Bautista Alberdi, datada en mayo de 1854, y la cual le acreditaba como representante en Europa. También le ha obsequiado con un cuadro de una imagen de la postal conmemorativa de la primera santa argentina, Mamá Antula, quien fue canonizada el domingo y el Correo Argentino distribuyó por su beatificación.
Mientras, el papa Francisco ha entregado al presidente argentino, como suele hacer con sus visitas, su mensaje de la Paz para este año, varios de sus escritos y un medallón de bronce con las figuras de una cruz y una paloma. Este medallón representa el baldaquino de la basílica de San Pedro, hecho por Gian Lorenzo Bernini, y que simboliza "la armonía entre lo sagrado y lo divino, uniendo el cielo y la tierra".
Además, durante su encuentro, Javier Milei ha invitado al pontífice a Argentina, ya que este no ha vuelto a su país natal desde 2013, cuando se convirtió en papa. Con esta posible visita, Milei podría conseguir la simpatía de los partidos católicos conservadores. No obstante, el papa Francisco en ocasiones anteriores ha expresado que no quiere ser "explotado" por políticos argentinos y considera que el "individualismo radical" contagia a la sociedad como un virus.
La llegada de Javier Milei al Vaticano
Milei, en su llegada al palacio apostólico, ha sido recibido por Leonardo Sapienza, el jefe de la Prefectura de la Casa Pontifica y los asistentes laicos del papa, quienes le acompañaron en un recorrido por los pasillos del palacio hasta acceder a la Segunda Logia, donde se realizan las audiencias.
El mandatario ha llegado con su hermana y secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, su ministra de Exteriores, Diana Mondino, el titular de Interior, Guillermo Francos, y la titular de Capital Humano, Sandra Pettovello. El secretario de Culto, Francisco Sánchez, y el embajador en Israel, Axel Wahnish se han unido a la reunión al final.
El presidente de Argentina llegó el domingo al Vaticano y asistió a la misa de canonización de la primera santa argentina, Mamá Antula. En ella tuvo la oportunidad de saludar por primera vez al papa Francisco y ambos protagonizaron un encuentro amistoso.
Reunión con el presidente de Italia y la primera ministra italiana
Tras su visita al Vaticano, Javier Milei se ha reunido con el presidente de Italia, Sergio Mattarella, y con el ministro de Exteriores, Antonio Tajani, en el Palacio del Quirinale, sede de la presidencia italiana.
Milei también ha tenido un encuentro con la primera ministra, Giorgia Meloni con la que se le ha visto varios gestos de complicidad en su recibimiento en el Palacio Chigi. Según el Gobierno italiano, durante su reunión ambos políticos han analizado maneras de "profundizar la relación bilateral entre ambos países y desarrollar una agenda de trabajo conjunta".