La Fiscalía recurre el archivo de la causa del muñeco de Sánchez apaleado en Ferraz

• Considera que hay indicios de un delito de amenazas graves al presidente del Gobierno
• Insta a que se identifiquen a los implicados en el suceso

Imagen de la manifestación en la que se apaleó un muñeco que imitaba a Pedro Sánchez AGENCIAS

La Fiscalía Provincial de Madrid ha recurrido el archivo de la causa abierta por el apaleamiento de un muñeco que representaba al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, la pasada Nochevieja en la sede del PSOE, al entender que los hechos sí podrían ser constitutivos de amenazas graves con la agravante de discriminación por ideología.

El Juzgado de Instrucción número 26 archivó la investigación relativa al apaleamiento del muñeco identificado con la figura de Pedro Sánchez, en los alrededores de la sede nacional del PSOE, ya que el magistrado rechazaba que hubiera delito, ya que "lo más violento fue golpear a una piñata" que "en ningún caso" se parecía al presidente del Gobierno. 

Sin embargo, según ha informado este jueves la Fiscalía, el Ministerio Público ha presentado un recurso de reforma contra el auto al considerar que los hechos suponen un ataque "personal" dirigido contra el líder socialista, "que han tenido como objeto menospreciar, amedrentar y vilipendiar a la persona de este último, no encontrándose amparados por el derecho a la libertad de expresión". 

Para la Fiscalía, los hechos denunciados, "sin perjuicio de su calificación jurídica definitiva", podrían ser constitutivos de unas amenazas graves, concurriendo la agravante de discriminación por razón de ideología. 

Pide identificar a los implicados

Por ello, pide al juez que dicte una nueva resolución donde acuerde una serie de diligencias, como la acumulación del atestado ampliatorio en el que se identifica a varias de las personas implicadas, o que se oficie a la Policía para que identifique a los responsables "y que se informe de su posible vinculación con grupos violentos o movimientos de ideologías extremistas".

En su escrito, la Fiscalía precisa que no se trata "únicamente” de unas meras amenazas, "porque además constituirían un claro y manifiesto ataque al principio de igualdad y no discriminación", al llevar a cabo la acción por no aceptar la ideología de la víctima y del colectivo al que representa.

Asimismo, considera que el lugar elegido para llevar a cabo el apaleamiento -frente a la sede del partido que preside- junto con expresiones como las de "hay que quemar Ferraz" no responden a una acción "espontánea". A su juicio, hubo una preparación, con el encargo y elaboración de un muñeco que representara a Sánchez y con una soga que tuviera el largo suficiente para poder ser colgado desde un semáforo.  

La Fiscalía rechaza que la acción pueda enmarcarse en el derecho a la libertad de expresión, en su vertiente de materia política o la libertad de crítica, y destaca tampoco se puede amparar en que la convocatoria estuviera autorizada por la Delegación del Gobierno, "ya que el objeto de la convocatoria nada tenía que ver con lo ocurrido" porque se solicitó como un acto pacífico, "lo que se aleja de lo recogido por las imágenes unidas a las actuaciones". 

Por ello, pide al juez que dicte una nueva resolución donde acuerde una serie de diligencias, como la acumulación del atestado ampliatorio en el que se identifica a varias de las personas implicadas, o que se oficie a la Policía para que identifique a los responsables "y que se informe de su posible vinculación con grupos violentos o movimientos de ideologías extremistas".