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Sánchez respalda a Armengol y defiende la respuesta "ejemplar" del Gobierno ante la "gravedad" del 'caso Koldo'

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El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la del Congreso, Francina Armengol, en una imagen de archivo.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, y la del Congreso, Francina Armengol, en una imagen de archivo.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha respaldado este miércoles a la presidenta del Congreso, Francina Armengol, que tiene "todo su apoyo" ante las acusaciones que está realizando el PP contra la socialista por el 'caso Koldo'. Sánchez ha admitido que existe "un caso concreto de corrupción" en este caso y que es "grave", pero ha defendido que su Ejecutivo ha actuado con "contundencia" al respecto y ha dado una respuesta "ejemplar".

Sánchez se ha pronunciado así en una conversación informal con periodistas a su llegada a Brasil, donde se reunirá con su homólogo Lula da Silva. "Armengol cuenta con todo mi apoyo", ha expresado el jefe del Ejecutivo un día después de que la presidenta de la Cámara Baja compareciera para dar explicaciones sobre los contratos que firmó el gobierno balear del que fue presidenta con la empresa de la trama. Armengol defendió la legalidad del contrato y recordó que no está siendo investigada ni ella ni el gobierno que presidió. Todo, después de que el PP registrara en el Congreso un escrito pidiendo su dimisión al considerar que presuntamente es "cómplice necesaria" de la trama de 'mordidas' en la venta de material sanitario durante la pandemia vinculada al exasesor del exministro de Transportes José Luis Ábalos, Koldo García.

El presidente del Gobierno ha reconocido que no ha hablado con Armengol a raíz de este caso. Y, al igual que ella, no ha aclarado quién puso en contacto a Baleares con la empresa de la 'trama Koldo', Soluciones de Gestión, que es la que vendió las mascarillas en mayo de 2020, en plena pandemia. Con todo, ha subrayado que "lo importante" es que la administración balear que estaba en manos del PSOE reclamó el dinero de una partida de mascarillas defectuosa y esa reclamación "la hizo decaer" la administración posterior del PP.

Además, ha asegurado que "nadie pone en cuestión" los contratos de material sanitario firmados por los gobiernos de Baleares y Canarias, aunque "otra cosa es el comisionista". Baleares pagó en mayo 3,7 millones por mascarillas FFP2, si bien luego reclamó 2,6 millones de tras recibir mascarillas de inferior calidad. Canarias también firmó cuatro contratos con esta empresa para compra de material sanitario por valor, en total, de 12,3 millones entre el 22 de abril y el 4 de mayo.

Defiende la "contundencia" con la que ha actuado el Gobierno

Por otra parte, Sánchez ha defendido que su Ejecutivo está "actuando con contundencia" ante "un caso concreto de corrupción" pese a la "campaña de difamación" del PP. "La corrupción cero no existe", ha afirmado, pero ha insistido en que lo que hay que hacer es "responder con contundencia". Por ello, ha defendido la triple respuesta de su Gobierno, que pasa por la colaboración con la justicia, asunción de responsabilidades políticas y la creación de una comisión de investigación en el Congreso.

Con todo, ha querido dejar claro que "no hay corrupción institucionalizada" como, a su juicio, ocurría con el anterior gobierno del PP. "Los tiempos de M. Rajoy han pasado", ha sentenciado, y ha pedido al Partido Popular que "no dé lecciones".

A continuación, ha acusado al PP de estar "en una campaña de desinformación, de intoxicación y de bulos" y de basar su forma de hacer política "en insidias". "Están desesperados porque no ganaron las elecciones" generales, ha recriminado (el Partido Popular fue el partido más votado pero no logró gobernar). Por todo, ha defendido que, tras el 'caso Koldo', "lo que quedará será la respuesta ejemplar del Gobierno", mientras que "otros ampararon la corrupción".

Respecto al posible desgaste que pueda estar sufriendo su Ejecutivo y el PSOE, ha admitido que este "no es el mejor escenario" de cara a las próximas elecciones vascas. Ha admitido que es un caso "grave" que hay que "atajar", si bien ha subrayado que hay que "dimensionarlo" en un contexto de crisis, con una pandemia y después la guerra en Ucrania.

"Lo importante son las respuestas a las dificultades", ha sostenido. Y, "ante cualquier duda", si hay casos de corrupción "se actuará con contundencia" en lo político y en lo judicial. "Hay que cortar de raíz", ha zanjado.

Sobre la petición de dimisión a Ábalos: "Hicimos lo que teníamos que hacer"

Sánchez también se ha referido al exministro de Transportes y ex secretario de Organización del PSOE José Luis Ábalos, y ha defendido la actuación del Partido Socialista reclamándole la dimisión como diputado a raíz de conocerse el 'caso Koldo'. "Hemos hecho lo que teníamos que hacer", ha defendido, pese a que Ábalos no esté imputado en el caso, y ha subrayado que se trató de "una respuesta ejemplar". El PSOE reclamó la dimisión por "responsabilidad política" y Ábalos no entregó su escaño sino que pasó al Grupo Mixto, una decisión que Sánchez ha lamentado.

También ha negado que él mismo supiera nada relativo al 'caso Koldo' cuando cesó a Ábalos del Gobierno en 2021 junto con otros ministros del Ejecutivo. Para Sánchez, "la duda ofende" y el hecho de que fuera en las pasadas elecciones en la lista del PSOE por Valencia. Y ha negado que el hecho de que el exministro fuera en las listas al Congreso fuera para protegerle de ninguna cuestión, sino que fue para reconocer su trabajo.

Sánchez ha explicado que, tras haber tenido que hacer frente a una pandemia y después de los malos resultados del partido en las elecciones en la Comunidad de Madrid, consideraba necesario hacer una remodelación de su Gobierno porque reconocía que le faltaba pulso y por eso sustituyó a varios ministros, entre ellos Ábalos.

Además, ha asegurado que no ha hablado en ningún momento con Ábalos, que no se planteó llamarle porque correspondía el trámite a la Ejecutiva Federal socialista.

Por último, Sánchez también ha puesto de ejemplo de su "actuación contundente" en el Gobierno contra la corrupción el hecho de que el actual ministro de Transportes, Óscar Puente, haya destituido al secretario general de Puertos del Estado, Álvaro Sánchez, que tramitó la compra de mascarillas con la empresa investigada en el "caso Koldo", Soluciones de Gestión.