'Yo me bajo en Atocha': Leiva y Travis Birds homenajean a las víctimas del 11M con una versión de Sabina
Son cerca de las diez de la noche, lejos del ajetreo de la hora punta de primera hora de la mañana y de la vuelta a casa después de trabajar, la estación de Atocha baja el ritmo y se prepara para un nuevo día.
Las luces de los trenes se apagan, los andenes repletos de viajeros han dado paso al personal de limpieza para preparar todo para el siguiente día y las salas de control se quedan vacías este lunes 11 de marzo de 2024. Aunque la jornada de hoy no es un día más en el día a día de la estación. Se cumplen 20 años del peor atentado de la historia de España. 20 años del 11M.
Antes de que se cierre por completo la estación de trenes, una voz se escucha en el interior de uno de sus trenes. "Con su boina calada, con sus guantes de seda; Su sirena varada, sus fiestas de guardar; Su vuelva usted mañana, su sálvese quien pueda; Su partidita de mus, su fulanita de tal; Con su todo es ahora, con su nada es eterno; Con su rap y su chotis, con su okupa y su skin; Aunque muera el verano y tenga prisa el invierno; La primavera sabe que la espero en Madrid", canta acompañada del sonido de fondo de una guitarra española Travis Birds sentada en el interior de un tren de cercanías.
Una canción que se convirtió en un himno contra la barbarie
"Con su otoño Velázquez, con su Torre Picasso; Su santo y su torero, mi Atleti y su Borbón; Sus gordas de Botero, sus hoteles de paso; Su taleguito de hash, sus lunes al sol; Con su hoguera de nieve, su verbena y su duelo; Su dieciocho de julio, su catorce de abril; A mitad de camino entre el infierno y el cielo. Yo me bajo en Atocha, yo me quedo en Madrid", interrumpe andando acompañado de su guitarra por el andén de la estación el cantante madrileño Leiva.
Justo ahí, en un cruce de caminos, en el punto donde cerca de 2.000 personas vieron como se rompían todos sus sueños, las voces de Leiva y Travis Birds se funden para seguir homenajeando a las víctimas del 11M de 2004 versionando Yo me bajo en Atocha, la canción de Joaquín Sabina que hace 20 años se convirtió en una especie de himno contra la barbarie después del atentado terrorista.
Ambos han cerrado así el especial Telediario 2 realizado desde la estación madrileña con motivo del vigésimo aniversario de la tragedia terrorista que marcó un antes y un después en la historia de España.
La dirección de este final musical a modo de homenaje a los que ese día vieron truncadas sus vidas ha corrido a cargo del director Fernando León de Aranoa, ganador de ocho premios Goya. León de Aranoa ha capitaneado así un equipo técnico de RTVE y ha realizado la pieza musical protagonizada por Leiva y Travis Birds.
Y como la canción afirma y ambos han recordado, "siempre hay un tren que desemboca en Madrid". Aunque en el atentado 193 personas fueron asesinadas y casi 1.900 personas resultaron heridas, igual que el 11 de marzo de 2004, siempre hay día después, y mañana volverá a ser 12 de marzo. Pero no sin olvidar y tener en el recuerdo a las víctimas del 11M.