Los autores del 11M, 20 años después: solo tres condenados siguen en prisión

• Se trata de Otman el Gnaoui, Jamal Zougam y Emilio Suárez Trashorras
• El resto, 15 personas, ya ha cumplido su condena, y nueve, incluso, han sido expulsados a Marruecos
•  11M, en directo: actos y homenajes por el 20 aniversario

El juicio del 11M, 20 años después: solo tres condenados siguen en prisión

Veinte años después de los atentados que sacudieron Madrid el 11 de marzo de 2004, que dejaron 192 víctimas mortales (193 si se tiene en cuenta al policía GEO que murió asesinado cuando se inmolaron los terroristas en un piso de Leganés), y cerca de 1.900 heridos, tan solo tres de las personas que fueron condenadas por los ataques permanecen hoy en día en prisión. 

Son José Emilio Suárez Trashorras, Jamal Zougam y Otman el Gnaoui, los condenados a los que se les impusieron las mayores penas y que seguirán entre rejas hasta 2044, año en el que cumplirán 40 años en prisión, el máximo período permitido según la legislación española.

El juicio contra los autores de la masacre se celebró tres años después de los atentados, entre el 15 de febrero y el 2 de julio de 2007. Se sentaron en el banquillo 29 acusados, de los que 21 fueron condenados inicialmente por la Audiencia Nacional. Sin embargo, el Tribunal Supremo ratificó un año después las penas de prisión para 17, absolvió a cuatro, y condenó a uno que había quedado libre, el asturiano Antonio Toro.

De los 18 condenados, 15 condenados han ido saliendo de prisión a lo largo de estos veinte años, y nueve de ellos incluso han sido deportados a su país de origen cuando cumplieron su castigo.

Los tres principales condenados

Jamal Zougam y Othman el Gnaoui, ambos de nacionalidad marroquí, fueron considerados autores materiales de la masacre, por lo que fueron condenados a 42.922 años y 42.924 años de cárcel, respectivamente, por 191 asesinatos terroristas (en el momento del juicio, era la cifra oficial de fallecidos el 11-M, diez años después fallecía la víctima 192) y otros 1.856 en grado de tentativa y cuatro delitos de estragos terroristas.

Zougam saldrá de la cárcel el 2 de marzo de 2044. Fue condenado por pertenencia a organización terrorista islámica, depósito y confección de sustancias y artefactos explosivos. Cumple su pena en primer grado, según fuentes de la Audiencia Nacional a Efe.

La sentencia consideró probado que Zougam "estaba integrado en una célula de tipo yihadista y que intervino, como autor, en los atentados del 11 de marzo de 2004". Señala que colocó "el último artilugio explosivo" en el cuarto vagón del tren que salía de Alcalá de Henares a las 7:14 horas y que explosionó a las 7:38 horas.

También quedó probado que las tarjetas de los móviles que "fueron usadas por los miembros del grupo" como temporizadores en las bombas salieron del locutorio que regentaba. 

En cuanto a El Ganaoui, saldrá de prisión el 19 de marzo de 2044. La sentencia indica que tuvo un "rol o papel concreto" dentro de la banda terrorista en la que estaba integrado.

Se considera que participó en el transporte de los explosivos desde Asturias hasta la casa de Morata de Tajuña, donde se prepararon las 13 bombas de los atentados. También facilitó documentación falsa a los demás terroristas. Cumple condena en primer grado.

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José Emilio Suárez Trashorras es el único español con una abultada pena. Saldrá de prisión el 3 de marzo de 2044. Fue condenado a 34.715 años de cárcel al ser considerado colaborador necesario en los atentados del 11M al haber suministrado los explosivos que usaron los yihadistas a pesar de ser "consciente del uso homicida" que se les daría.

Trashorras, que era un exminero, se encargó de conseguir los explosivos de la Mina Conchita y facilitárselos a los yihadistas. Además de las muertes causadas en los trenes, también se le condenó por la muerte del GEO en Leganés. 

Según ha informado la Audiencia Nacional a Efe, cumple condena en segundo grado, pero, aunque ha solicitado en numerosas ocasiones permisos carcelarios y otros beneficios, no se le ha concedido ninguno hasta ahora.

Por eso, ante esta perspectiva, según adelantó el diario El Comercio, el pasado 1 de marzo, solicitó acogerse a la ley de eutanasia por "la falta de tratamiento médico y psicológico" adecuado para su enfermedad de salud mental en el centro penitenciario de Asturias en el que cumple condena.

Además, según ha trasladado su abogado a Efe, Marco Suárez, Trashorras ha pedido "perdón a todas y cada una de las víctimas" y ha defendido que ahora es otra persona distinta a la de hace veinte años.

Los que están ya fuera de la cárcel

A lo largo de estos 20 años, 15 condenados han salido de prisión, y la mayoría lo ha hecho en la última década. De esos quince, ocho fueron expulsados a su país y un noveno, fue extraditado a Marruecos al estar reclamado allí para cumplir otra pena. Hace diez años, solo eran seis condenados los que habían quedado en libertad.

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Los primeros en salir fueron los que tenían las penas más bajas: Mahmoud Sleim Aoun y Nasreddine Bousbaa, que fueron condenados a dos años por falsedad documental.

En 2010 quedó en libertad Gabriel Montoya, el Gitanillo, que era menor de edad cuando los atentados, por lo que fue juzgado en otro juicio. Fue condenado a seis años de internamiento y a cinco de libertad vigilada por transportar los explosivos. 

Antonio Iván Reis y Sergio Álvarez, condenados ambos a tres años de prisión por transportar parte de los explosivos de Asturias a Madrid para dárselos a Jamal Ahmidan, terminaron de cumplir sus condenas en 2011. También ya quedó en libertad Antonio Toro, que se le impuso una pena de cuatro años por suministrar los explosivos. 

Mohamed Larbi Ben Sellam fue condenado a 12 años de prisión por la Audiencia Nacional, pero el Supremo le rebajó la condena a nueve años. Según la sentencia, era "miembro de una célula terrorista" y además se encargaba de "adoctrinar, reclutar y auxiliar individuos para hacer la yihad". Salió en prisión en 2014 y fue expulsado a Marruecos.

Rafa Zouhier, que era un confidente de la Guardia Civil, fue condenado a 10 años por tráfico de explosivos, al ser considerado el enlace entre los yihadistas y Trashorras. Fue expulsado a Marruecos en 2014 tras salir de prisión.

Fouad El Morabit fue condenado a 12 años de cárcel por pertenencia a grupo terrorista. Según la sentencia tenía "fuertes vínculos" con los suicidas de Leganés y realizaba "labores de captación y adoctrinamiento de futuros terroristas". Quedó en libertad en marzo de 2016 y fue expulsado a Marruecos.

Youssef Belhadj fue considerado uno de los autores intelectuales de los atentados. Fue condenado a 12 años de cárcel por ser miembro de los "grupos que forman la red de Al Qaeda", según la sentencia. Salió de la cárcel en 2017 y fue expulsado a Marruecos.

Sael El Harrak fue condenado también a 12 años por pertenencia a banda terrorista. Salieron de prisión en 2017. Según la sentencia, era "miembro de la célula que se suicidó en Leganés" y "había mantenido contacto personal y telefónico con otros integrantes del grupo". Terminó de cumplir su condena en octubre de 2017 y fue expulsado a Marruecos.

A Hamid Ahmidan la Audiencia Nacional le condenó a 23 años de cárcel, pero el Supremo redujo la condena a 12 años. Tenía las llaves de la casa de Morata de Tajuña, donde se fabricaron las bombas. Quedó en libertad en marzo de 2017 y fue expulsado a Marruecos.

Rachid Aglif, alias 'el Conejo', también fue condenado a 18 años por pertenencia a banda armada y tenencia de explosivos. Se reunió con Trashorras y otros miembros de la célula en un McDonald’s de Carabanchel, donde "propuso a los asturianos que le suministraran 60 kilos de dinamita". Quedó en libertad en abril de 2022 y fue entregado a Marruecos.

Mohamed Bouharrat fue condenado a 12 años por pertenencia a organización terrorista y salió de la cárcel en octubre de 2022 y fue expulsado a su país. Según la sentencia, "realizaba labores de captación y recopilación de información sobre posibles objetivos para los ataques violentos".

Abdelmajid Bouchar, alias 'el Gamo', es el terrorista que huyó del piso de Leganés el día que se inmoló parte de la célula yihadista cuando tras bajar a "tirar la basura" se dio cuenta de la "presencia policial". Inicialmente se le consideró uno de los autores materiales de los atentados, pero no se pudo demostrar. Fue condenado a 19 años de cárcel y abandonó la prisión en septiembre de 2023 y expulsado del país.

Los suicidas

Además, a todos los condenados habría que sumar a los siete terroristas que se suicidaron el 3 de abril de 2004 en un piso de Leganés, al verse cercados por la policía. Al inmolarse, mataron al GEO de la Policía Nacional Francisco Javier Torronteras. 

Así, no pudieron ser juzgados Serhane Ben Abdelmajid, El Tunecino, Jamal Ahmidad, El Chino, Mohamed Oulad Akcha, Rachid Oulad Akcha, Asrih Rifaat Anouar, Allekema Lamari y Abdennabi Kounjaa Abdallah.