Las lluvias de Semana Santa alivian los embalses españoles y la sequía
- Las precipitaciones de los últimos días aportan el mayor aumento de los embalses en lo que va de año, al 63,1% de su capacidad
- La del Guadalquivir es la cuenca más beneficiada, y Andalucía suavizará restricciones al consumo, al campo y a la industria
Las precipitaciones durante la Semana Santa se han hecho notar en buena parte del país, lo que ha provocado cancelaciones en las reservas hoteleras, enfado y tristeza entre los más devotos de las procesiones. Pero, a cambio, la buena noticia es que las lluvias han traído consigo una mejora sustancial en la situación de los embalses, que han pasado de un 57,8% de su capacidad a un 63,1% en la última semana. Se trata de un aumento de 5,3 puntos en tan solo siete días, casi 3.000 hectómetros cúbicos más, según los últimos datos publicados por el Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (Miteco).
Así, esta última semana ha sido en la que más ha crecido la reserva disponible en los embalses de la península en lo que va de 2024, 2.968 hectómetros cúbicos, muy cerca de la semana del 26 enero, cuando el aumento fue de 2.932 hm³ (el 5,2% de la capacidad de los embalses).
Respecto al agua de uso consuntivo (la destinada al abastecimiento agrícola y al consumo humano), la reserva cuenta con 20.772 hm³, el 53,54% de su capacidad. Ha subido en 2.438 hm³, incrementándose en 6,28 puntos.
La Agencia Estatal de Meteorología (AEMET) asegura que en estos días se han recogido más de 100 litros por metro cuadrado en muchas zonas del sur de la península, así como en puntos del centro, Galicia y los Pirineos. Rubén del Campo, portavoz del organismo, sostiene que “son cantidades de lluvia abundantes que suponen más del triple de lo normal para ese periodo de tiempo”.
No obstante, la lluvia no llegó con la misma intensidad a todo el territorio nacional y fue bastante escasa en el extremo oriental peninsular, el Cantábrico y el sur de las Islas Canarias. De hecho, el volumen de agua en la Comunidad Valenciana, Murcia, parte de Andalucía y el sur del archipiélago canario quedó por debajo de la mitad de lo normal para lo esperado a finales de marzo, según los datos provisionales que maneja la AEMET.
A la espera de la información definitiva, sí se puede avanzar que marzo ha sido un mes muy húmedo, con unas precipitaciones en torno al doble de lo normal, y se sitúa entre los cuatro marzos más lluviosos del siglo XXI. Así, en los seis primeros meses del año hidrológico, que comenzó el 1 de octubre, se han acumulado 467 litros por metro cuadrado, 62 más que lo esperado, lo que supone un 15% más de lo normal.
Revisando las precipitaciones de los últimos 12 meses, Del Campo sostiene que sí ha habido un “alivio temporal de la sequía en el oeste de la península”, aunque no se ha abandonado del todo ese fenómeno de larga duración en muchas de las cuencas. Esta sequía se mantendría por el momento en las cuencas del sur de Andalucía, la del Segura, la del Júcar, la del Pirineo Oriental, que engloba buena parte de Cataluña, y también la del Ebro. Sin embargo, la situación de escasez de agua se está intensificando en vertiente mediterránea, ya que las precipitaciones han sido reducidas en los últimos meses.
Las lluvias han beneficiado sobre todo a los embalses de la cuenca del Guadalquivir, cuyo nivel aumentó 12,6 puntos porcentuales en la última semana, hasta llegar al 42,9%, más de 17 puntos y casi 1.400 hm³ más que en la misma semana del año pasado. Prácticamente la misma cantidad de agua que han recibido los pantanos de la cuenca del Guadiana, cuyas reservas embalsadas han crecido 8,3 puntos, hasta el 48,7%.
Gracias a estas lluvias sobrevenidas en Semana Santa, Andalucía prevé suavizar las restricciones actuales al consumo medio de agua por habitante, a los riegos en el campo y al uso en el sector industrial, y el Ejecutivo autonómico espera tener un verano "con más capacidad y más posibilidades".
Las propuestas para "flexibilizar" las restricciones se verán en los comités de sequía de las cuencas, que se van a celebrar en los próximos días, a la espera de que la escorrentía termine de aportar el caudal a los embalses, ha explicado la consejera de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural, Carmen Crespo, en rueda de prensa tras la celebración del Consejo de Gobierno de este martes.
Ahora, la Junta presidida por Juanma Moreno descarta tener que recurrir a la llegada de barcos con agua en verano. Sin embargo, el alivio presente no oculta el hecho de que los embalses de la cuenca del Guadalquivir siguen 12 puntos por debajo de la media de la última década. Del mismo modo, este episodio de lluvias extraordinarias a finales de marzo es el colofón al que ha sido el primer trimestre del año más cálido en el conjunto de la península desde que hay registros (1961), con una temperatura promedio de 9,5 ºC, lo que supone 1,9 grados de lo normal, según los datos de la Aemet.