El insólito tiroteo en una escuela de Finlandia abre el debate sobre las armas y la salud mental de los niños
- Finlandia tiene alrededor de 1,5 millones de armas de fuego autorizadas en circulación y más de 400.000 titulares de licencias
- Un menor de 12 años murió y otros dos resultaron heridos en el tiroteo a las afueras de Helsinki
Un niño de 12 años ha matado esta semana a un compañero de clase y herido a otros dos en una escuela de Finlandia en un poco habitual acto de violencia en el país nórdico, que hace más de una década cambió sus leyes sobre armas tras otros dos tiroteos en centros escolares, pero donde su posesión continúa siendo generalizada.
La caza y la tenencia de armas tiene una larga tradición en Finlandia, un país con una escasa población en el norte de Europa en el que la responsabilidad de otorgar permisos para armas de fuego comunes recae en los departamentos de policía locales.
“Un millón y medio de personas, de una población total de 5,5 millones, posee armas de fuego o está registrado para poseer armas en Finlandia. Se calcula que hay un número significativo de armas en el país, pero la mayoría son armas para la caza”, explica a RTVE.es el director ejecutivo de la organización británica Action on Armed, Iain Overton.
A pesar de la alta cifra de personas que son propietarias de armas, el número de homicidios con armas de fuego es especialmente bajo. “En Finlandia sabemos que mueren alrededor de 150 personas al año por disparos de armas de fuego, pero unos 140 de esos casos son hombres que se suicidan. Solo hay unos 10 homicidios al año en el país, un número muy bajo”, añade.
El reciente tiroteo en la escuela de Helsinki es el tercero de este tipo en Finlandia desde 2007, cuando un estudiante de 18 años abrió fuego en las instalaciones de un instituto matando a nueve personas. Un año después, un estudiante de 22 años mató a tiros a 10 personas en una escuela de formación profesional. Dos casos que llevaron a endurecer las leyes de posesión de armas en el país nórdico.
Según la profesora de Relaciones Internacionales de la Universidad Europea, Beatriz Gutiérrez, la proliferación de armas en Finlandia y en Europa en general “no está yendo a más, pero sí hay una mayor conciencia en cuanto a la posesión de armas”.
“En Europa hay muchísimas armas y lo que hay es una cultura de responsabilidad acerca de ellas. Lo que está cambiando en determinados entornos es precisamente esa responsabilidad. En lo que se debería trabajar es en las políticas de prevención en el sentido de concienciación de los ciudadanos”, opina.
Acceso a armas de fuego desde los 15 años
Los tiroteos en diferentes centros educativos de Finlandia en 2007 y 2008 dieron inicio a un acalorado debate sobre la legislación sobre armas de fuego en este país de cazadores y amantes de las armas.
Una ley aprobada tres años después para endurecer las normas sobre la posesión de armas elevó de 18 a 20 años la edad mínima para adquirir armas de fuego y obligó a los médicos a informar de cualquier persona que consideraran no apta para ser propietaria de un arma.
“Finlandia, al ser un país de la Unión Europea, es bastante restrictivo en cuestión de armas. Están limitadas principalmente a la caza y, evidentemente, a fuerzas armadas y cuerpos de seguridad, que son profesiones facultadas para el uso de armas de fuego”, destaca Gutiérrez. “Dentro del ámbito civil ocurre lo mismo que puede pasar en Francia o en España, están limitadas a la caza y a tiro deportivo”, añade.
Aunque los tiroteos llevaron a un endurecimiento de la legislación sobre armas de fuego en Finlandia, cualquier ciudadano a partir de los 15 años puede solicitar un permiso para emplear el arma de otra persona si cuenta con la autorización de su tutor.
“No pueden poseer un arma con 15 años, pero si tu padre tiene un arma, a partir de esa edad pueden emplearla”, comenta Overton, quien detalla sobre el reciente caso en Helsinki que “nadie estaba permitiendo que el niño de 12 años utilizara el arma de forma voluntaria, pero claramente la cogió de un lugar que no era seguro y disparó a sus compañeros con ella”.
Según las normas finlandesas, los permisos para portar armas de fuego solo se conceden a personas que puedan demostrar “un propósito de uso aceptable” y que cumplan ciertos criterios. El arma debe descargarse y guardarse en un estuche o bolsa cuando se transporte y el propietario es responsable de asegurarse de que las armas y las municiones no acaben en manos de personas no autorizadas.
“En Finlandia no está permitido poseer un arma de fuego para defenderse, lo que plantea la cuestión de por qué son legales las pistolas, al igual que las armas semiautomáticas, cuando la mayoría de las armas en el país son de caza”, comenta el director ejecutivo de la organización Action Armed. “¿Tiene Finlandia un problema con las armas de fuego? Es un debate abierto. Hay un problema con las pistolas, porque hemos visto su uso en dos ocasiones en colegios en Finlandia y no es necesario utilizarlas para deportes o para cazar”, añade.
Una de las tasas más altas de posesión de armas en Europa
Con alrededor de 1,5 millones de armas de fuego autorizadas en circulación y más de 400.000 titulares de licencias, Finlandia tiene una de las tasas más altas de posesión de armas de fuego en Europa.
El país nórdico ocupa el séptimo lugar en número de armas de fuego del mundo -por detrás de Estados Unidos, Yemen, Montenegro, Serbia, Canadá y Uruguay- y el mayor de la Unión Europea en relación con su población, según el Small Arms Survey, del Instituto Universitario de Estudios Internacionales de Desarrollo.
“Finlandia es uno de los países en Europa que tiene más tasa de armas por habitante. Esto se debe a que la caza es una actividad recreativa, pero también sigue siendo una de las principales actividades para consumo de carne, de alimentación, de autoabastecimiento en ciertas poblaciones”, señala el director del Departamento de Seguridad y Defensa de la Universidad Nebrija, Nicolás Marchal.
Pero además de la caza, otro de los factores por los que tantas personas poseen armas de fuego en Finlandia es porque “tener una en propiedad ha sido una manera de defenderse contra una posible agresión rusa”, según afirma Overton. “La guerra finlandesa, con el temor a Rusia, y la Segunda Guerra Mundial han seguido estando presentes en la conciencia nacional de los finlandeses”, recalca.
El arma empleada por el niño de 12 años era una pistola registrada para la que tenía licencia un familiar del sospechoso. Overton comenta que, aunque “las armas son un elemento increíblemente poderoso en la cultura finlandesa, hay muchas personas que utilizan esas armas para el objetivo legítimo de cazar”. “No creo que ningún cazador con sentido común defendiera que necesitan una pistola. Si se da algún paso en el control de armas, será en lo que se refiere a las pistolas y las armas semiautomáticas”, subraya.
Leyes más estrictas que en Estados Unidos
Aunque Estados Unidos lidera la lista de países del mundo con mayor número de armas de fuego, no es la única nación en la que la tasa de propiedad de armas es alta. Sin embargo, en la mayoría del resto de países, los tiroteos masivos son poco frecuentes, especialmente debido a que las leyes para la regulación de la posesión de armas son significativamente más estrictas. Entre 2009 y 2015 hubo tan solo 19 tiroteos masivos en toda Europa, según un estudio del Instituto Flamenco para la Paz. En el último siglo, se han registrado menos de una docena de tiroteos masivos en Finlandia.
Estados Unidos es el único país del mundo en el que hay más armas de fuego que habitantes: 120 por cada 100 estadounidenses. Además, es el país con la tasa de homicidios con armas de fuego más alta del mundo desarrollado y el que tiene más tiroteos masivos. Esta nación cerró el año 2023 con una media de casi dos tiroteos al día, su peor cifra desde 2014.
“El control de la venta de armas es mucho mayor en Europa que en Estados Unidos, pero la realidad es que las masacres realizadas con armas de fuego pueden suceder en cualquier lugar donde haya acceso no solo a las armas de fuego, sino también a munición”, opina el director de Action on Armed.
Por su parte, Marchal ve “muy complicado que se reproduzca la situación de Estados Unidos en algunos de los países de Europa”. “El hecho de que haya una facilidad en el acceso a las armas de fuego hace que cuando se vaya a cometer un hecho delictivo sea mucho más habitual que esté presente un arma”, indica.
Además, Marchal explica que en Estados Unidos “están tipificadas como legales la gran mayoría de armas comerciales que en España o en Finlandia solo están a disposición de las fuerzas y cuerpos de seguridad, fuerzas armadas y personal de seguridad privada habilitado para ello”.
¿Un problema de salud mental?
La Policía de Finlandia ha confirmado que el motivo detrás del mortal tiroteo en la escuela en las afueras de Helsinki ha sido el acoso escolar, abriendo un debate sobre el ‘bullying’ y la salud mental en un país que fue reconocido como el más feliz del mundo por Naciones Unidas y que se considera que tiene uno de los mejores sistemas educativos del planeta.
“Este tipo de hechos tan traumáticos y de esta magnitud es un hecho terrible que hace que nos tengamos que plantear cuáles han sido las señales que no hemos sido capaces de ver”, afirma Marchal. “El primer ministro finlandés ya ha dicho que en Finlandia algunos jóvenes padecían algún tipo de situación mental complicada. Esto suele ser una de las primeras líneas que se suele tomar”, añade.
El primer ministro, Petteri Orpo, describió el tiroteo como algo profundamente perturbador y señaló que “está claro que demasiados jóvenes, hasta uno de cada tres, han experimentado dificultades con la salud mental en algún momento de sus vidas”. “Hay que intervenir en estos problemas antes”, subrayó.
“La clase política ha hablado de la necesidad de dar una respuesta a los problemas de salud mental en los colegios. En Estados Unidos tienes a gente diciendo que no es un problema con las armas de fuego, sino que el problema es de salud mental”, comenta Overton. “Un niño de 12 años que respondiera al acoso escolar en cualquier país, probablemente lo haría utilizando sus puños o sufriendo una crisis de salud mental. Sería muy raro que pusiera sus manos sobre una pistola en España u otro país de Europa”, recalca.