El exeditor de un tabloide de EE.UU. testifica que censuró noticias que podrían haber perjudicado a Trump en 2016
- El directivo de medios ha reconocido que publicó noticias para lastrar a Hillary Clinton y a los rivales conservadores de Trump
- El expresidente está acusado penalmente de falsificación de registros contables
El primer testigo en el juicio penal de Donald Trump, el exeditor de National Enquirer, David Pecker, ha declarado este martes que utilizó su tabloide para suprimir historias que podrían haber perjudicado la candidatura presidencial de Trump en 2016.
El expresidente estadounidense, presente en la sala, está acusado penalmente de falsificación de registros contables para comprar el silencio de la actriz porno Stormy Daniels y que no saliera a la luz una supuesta aventura amorosa entre ambos que habría puesto en jaque su ascenso a la Casa Blanca hace ahora ocho años.
La trama, de acuerdo con la Fiscalía de Manhattan, fue complementada por la labor de Pecker, de 72 años, comprando los derechos de publicación de otras dos historias extramaritales, un presunto affair con la modelo Karen McDougal y un falso hijo ilegítimo de Trump, para proteger su candidatura.
"Lo que yo debía hacer era publicar historias positivas sobre el señor Trump y publicar historias negativas sobre sus oponentes", ha confirmado con actitud calmada Pecker.
Historias favorables al candidato republicano
El otrora editor ha afirmado que la decisión siguió a una reunión de 2015 en la que le dijo a Trump que el Enquirer publicaría historias favorables sobre el multimillonario candidato y estaría atento a la gente que vendiera historias que pudieran perjudicarle.
"Cuando alguien se presenta a un cargo público como este, es muy común que estas mujeres llamen a una revista como National Enquirer para intentar vender sus historias", ha testificado Pecker, que ha confirmado que dijo a un editor que mantuviera el acuerdo en secreto.
Los fiscales han asegurado que las acciones de Pecker ayudaron a Trump a engañar a los votantes en las elecciones de 2016 al enterrar las historias de supuestas relaciones extramatrimoniales en un momento en que ya se enfrentaba a múltiples acusaciones de mala conducta sexual.
Noticias "amarillistas" en contra de los rivales de Trump
El directivo de medios ha reconocido que, además, sacó noticias amarillistas para lastrar las aspiraciones de dos rivales conservadores de Trump: Marco Rubio y Ted Cruz.
Asimismo, ha dicho que usó la influencia de The National Enquirer para denigrar la imagen de la entonces candidata demócrata, Hillary Clinton. "Yo sacaba a Hillary como facilitadora de casos en los que Bill Clinton quedaba como un mujeriego", ha concretado.
La Fiscalía ha procedido entonces a preguntarle por titulares concretos de The National Enquirer acerca de estos perfiles políticos, lo que ha provocado que, casi por primera vez en toda la mañana, Trump cambiara su postura impasible y se acercara a la pantalla donde eran proyectados.
Finalmente, Pecker también ha desvelado que el exmandatario le presentó en 2016 a su exasesor Steve Bannon —condenado en 2022 por desacato al Congreso cuando se juzgaba su vinculación con el asalto al Capitolio— porque consideraba que podían "trabajar muy bien juntos".
Acusado de supuesta falsificación de registros comerciales
Además, la Fiscalía ha acusado a Trump de falsificar criminalmente registros comerciales para encubrir un pago de 130.000 dólares para comprar el silencio de la estrella porno Stormy Daniels, que dice que tuvieron un encuentro sexual 10 años antes.
Trump se ha declarado inocente y niega haber tenido un encuentro con Daniels. Sus abogados argumentan que Trump no cometió ningún delito y que solo actuó para proteger su reputación.
El caso puede ser el único de los cuatro procesos penales de Trump que haya llegado a juicio antes de la revancha electoral del 5 de noviembre entre el republicano y el presidente demócrata Joe Biden.
Un veredicto de culpabilidad no impediría a Trump asumir el cargo, pero podría perjudicar su candidatura.