Enlaces accesibilidad

Macron advierte sobre los peligros de una Europa débil y fragmentada: "Existe el riesgo de que muera"

  • El presidente de Francia ha señalado que Europa "no está equipada para afrontar los riesgos" de las amenazas externas
  • Macron ha exigido un impulso en ciberseguridad, mejorar los lazos con Reino Unido y comprar equipo militar europeo

Por
Macron advierte sobre los peligros de una Europa débil y fragmentada: "Existe el riesgo de que muera"
El presidente francés, Emmanuel Macron, pronuncia un discurso sobre Europa en el anfiteatro de la Universidad de la Sorbona (25 abril, 2024) CHRISTOPHE PETIT TESSON

El presidente francés, Emmanuel Macron, ha pedido mayor fortaleza e integración en los sectores de defensa de los países europeos al mismo tiempo que ha esbozado su visión de una Unión Europea más asertiva en el escenario mundial.

En un discurso en la Universidad de la Sorbona de París, Macron ha señalado que el continente no debe convertirse en vasallo de los Estados Unidos y ha advertido que, de no reforzarse la seguridad, "existe el riesgo de que nuestra Europa muera" y que "no estamos equipados para afrontar los riesgos".

A tres años de su segundo y último mandato, Macron trata de mantenerse como guía de la defensa europea en un momento en que la amenaza de la invasión rusa de Ucrania ha puesto sobre aviso a los países de la Unión Europea. En el discurso, que ha durado casi dos horas, ha afirmado que presiones militares, económicas y de otro tipo podrían debilitar y fragmentar la organización de 27 naciones. 

"No se debe permitir que Rusia gane en Ucrania", ha reiterado, además de pedir un impulso de la capacidad de ciberseguridad, vínculos más cercanos en defensa con Reino Unido y la creación de una academia militar europea para formar a oficiales de alto rango. Asimismo, ha pedido a los países europeos dar preferencia a la compra de equipamiento militar europeo.

"Debemos producir más y más rápido, y debemos producir como europeos", ha sentenciado Macron.

Apoyo de Alemania

El discurso de Macron ha obtenido una respuesta positiva de su principal socio europeo, el canciller alemán Olaf Scholz. "Francia y Alemania quieren que Europa sea fuerte", ha afirmado Scholz en una publicación en su cuenta oficial de X. "Su discurso contiene buenas ideas sobre cómo podemos lograr esto", ha añadido.

El movimiento de Macron coincide con el respaldo el pasado martes por los presidentes de los parlamentos de la UE para crear una fuerza conjunta de 5.000 efectivos procedentes de todos los Estados miembros.

El 23 de abril, representantes de la UE aprobaron por unanimidad un documento en el que figuran varios puntos sobre la seguridad de los Estados miembros y la inversión en defensa, en línea con las palabras del mandatario francés en su discurso de este jueves.

Desde el inicio de la ofensiva rusa, Macron ha pedido mayor "autonomía estratégica" europea con respecto a Estados Unidos, una postura que ha ganado peso ante la posibilidad de que Donald Trump regrese a la Casa Blanca tras las elecciones de noviembre. Europa "debe demostrar que nunca es vasallo de Estados Unidos y que también sabe hablar con todas las demás regiones del mundo", ha reiterado Macron.

Sin embargo, muchos funcionarios de la UE creen que, al menos a corto-medio plazo, no existe ninguna alternativa al paraguas militar estadounidense.

La economía europea como reto

Macron también ha advertido que Europa corre el riesgo de quedarse atrás económicamente. "Las normas globales de libre comercio están siendo cuestionadas por importantes competidores; el Banco Central Europeo ya no debería limitarse a la inflación, sino también el crecimiento y el clima", ha indicado.

Entre sus propuestas, ha pedido acordar exenciones a sus propias normas de competencia para que pueda apoyar a empresas en sectores como la inteligencia artificial y la energía verde, esenciales para mejorar su competitividad contra otros países como China, pero también Estados Unidos. 

El líder francés espera que su discurso tenga el mismo impacto al que pronunció hace siete años en la Sorbona y, más recientemente, aunque con un recibimiento mucho más escéptico, el que realizó sobre la posibilidad de enviar soldados a Ucrania en febrero.