David Verdaguer: "'La casa' no es una película, es un espejo en el que nos reflejamos todos"
- Es una adaptación de la novela gráfica de Paco Roca, que consiguió varios premios en Málaga y se estrena el 1 de mayo
- Álex Montoya dirige a David Verdaguer, Óscar De la Fuente, Luis Callejo, Olivia Molina o María Romanillos
La casa, la adaptación de la premiada novela gráfica de Paco Roca que ha dirigido Álex Montoya (Lucas) va a ser una de las grandes películas españolas de 2024. Ya fue una de las triunfadoras en el pasado Festival de Málaga, donde consiguió seis galardones: las Biznagas de Plata a Mejor Guión, Mejor Música y la del premio del público, junto al Premio Feroz Cámara Oscura, el Premio Jurado Joven y una Mención Especial del Premio Signis. Destacar también su maravilloso reparto: David Verdaguer, Óscar De la Fuente, Luis Callejo, Olivia Molina, María Romanillos, Lorena López, Marta Belenguer, Jordi Aguilar, Miguel Rellán y Tosca Montoya. Una esperadísima película que cuenta con la participación de RTVE y llegará a los cines este 1 de mayo.
“Es una película muy especial –asegura Álex Montoya—, porque conmueve mucho y habla de temas muy profundos de una manera aparentemente como muy sencilla. Yo no recordaba ninguna película que hablara de estos temas de manera tan clara y tan potente”.
Algo con lo que está de acuerdo David Verdaguer que, tras ganar el Goya a mejor actor por su papel de Eugenio en Saben Aquell, encabeza el reparto de esta película, es es muy coral. “La película es la leche. Es muy bonita. Este último año solo hice dos proyectos, pero son los dos muy bonitos. Porque La casa no es una película, es un espejo en el que nos vemos todos. Tú como espectador te ves, te ves a ti mismo. Y si alguien ve la peli y no le remueve nada, que vaya al médico porque no es una persona, es un ficus”.
Tres hermanos que se reúnen tras la muerte del padre
La película es una fiel adaptación de la novela gráfica autobiográfica de Paco Roca sobre tres hermanos (y sus familias) que, tras la muerte de su padre, se reúnen en la casa familiar en la que pasaron los veranos de su infancia. Les toca decidir que hacer con la casa y entonces aforarán los recuerdos, los secretos y alguna rencilla, por lo que esa decisión resultará más difícil de lo es esperado. Tres hermanos que están interpretados por David Verdaguer, Óscar de la Fuente y Lorena López.
“No me he basado en Paco Roca para interpretar al personaje –afirma Verdaguer—. De hecho, creo que el dibujo del cómic se parece bastante a mí, más que a Paco Roca. Además, el guion tiene cosas de Paco, pero también del propio director: Álex Montoya. Permitir eso me ha parecido una cosa muy generosa de parte de Paco Roca, porque, al final, esa casa de la película es un contenedor donde caben los recuerdos de todo el mundo, de todas nuestras familias y espero que las de los espectadores”.
Algo con lo que está de acuerdo el director, Álex Montoya: "El personaje protagonista tiene mucho de Paco, pero también de David e incluso mío. En la novela gráfica, es una persona mucho más sensata, mucho más responsable que la que aparece en la película. En el film se parece más a mí, que soy un desastre: me cuesta escribir, tengo bloqueos, empiezo las cosas y me cuesta acabarlas... Y creo que la familia de Paco es más "para adentro"· que la mía, no discuten tan abiertamente. Por eso creo que el personaje es una mezcla de los dos, ya que le he añadido mis manías y mis defectos. Efectivamente soy yo".
Lorena López (Amor en polvo), que interpreta a Carla, la hermana, asegura que: “La película nos toca a todos por lo universal que tiene, que es la familia, la perdida…. Todos somos hermanos, hijos… Por eso nos vemos reflejados en todas esas cosas y en el duelo. Tengo la suerte de que mis papás están vivos, pero soy consciente de que en algún momento nos va a pasar a todos”.
Óscar de la Fuente (El buen patrón) interpreta a Antonio, el hermano mayor, que guarda rencor al protagonista, un novelista de éxito que no se ocupó de su padre en esos últimos momentos de vida. “La película me encanta por varias razones –asegura—. Una de ellas es personal. Porque la familia protagonista la siento muy parecida a la mía, con unos sentimientos muy parecidos. Yo no pensé que me iba a tocar tan de cerca. Parece que uno vive su vida y que a nadie más le importa, pero, en el fondo, todos pasamos por las mismas cosas”.
"Paco Roca me ha dado total libertad para la película"
Preguntamos a Álex hasta qué punto ha participado Paco Roca en la película: "Tengo que agradecer a Paco que haya confiado más en mí que yo mismo. El no tuvo una buena experiencia cuando intentó dirigir Memorias de un hombre en pijama y por eso me ha dado total libertad, aparte de dejarnos usar la casa. En cuanto al guion, intentamos dar a la película una estructura un poquito más cinematográfica. Y para ello creamos una escena nueva, que no está en el cómic y es fundamental en la película, que es la del restaurante donde los hermanos, un poco liberados del peso de la casa, se atreven a discutir de esos temas que les que reconcomen por dentro. Esa escena crea unas ramificaciones, un poco de tensión y de conflicto que viene muy bien para la película"
“En esta historia –continúa Óscar—, somos testigos de esa rivalidad de los hermanos. Cada uno tiene envidia al otro por una cosa, uno por el libro que ha escrito y el otro por la familia que él no tiene. Y luego está la hermana que hace de aglutinante. Es un aglutinante fundamental en una familia, porque si no, se perdonarían las cosas que llegan a reprocharse. Al final ella es la que consigue mantener a la familia unida”.
“Por eso mi escena favorita –asegura Lorena—, es en la que la hermana les hace fundirse a los tres en un abrazo de siete segundos. Es algo que creo que voy a aplicar a partir de ahora en mi vida”.
“Por suerte –añade Verdaguer—, somos una generación que nos decimos te quiero todo el rato. Yo se lo digo siempre a mi padre y a mi madre. Pero mi abuelo se murió sin decírselo a mi padre. Por eso es una película llena de melancolía, pero las lágrimas que provoca en el espectador son lágrimas sanadoras y curativas. Y cuando acaba la proyección tienes ganas de estar con los tuyos. Y lo mismo pasa cuando acabas de leer el cómic”.
“En el Festival de Málaga me paró una mujer mexicana que había visto la película y me pidió por favor que la llevásemos a México. Por eso creo que una historia tan local se ha convertido en algo universal” –concluye Verdaguer—.
La despedida y el duelo
Álex Montoya nos comenta que: "Otro de los temas de la película es la despedida y lo que significa. La historia empieza con el padre saliendo de la casa a la que ya no volverá. Y luego son sus hijos los que regresan y la vuelven a llenar de vida, con los niños y tal (por cierto, que la niña más pequeña es Tosca Montoya, la hija del director).
“Por eso –continúa Álex—, para nosotros ha sido tan importante poder rodar en la casa real de la familia de Paco Roca, que él se quedó tras la muerte de su padre”.
En el cómic destacaba la maestría de Paco para dibujar el paso del tiempo. “En las viñetas es más fácil –asegura Álex—, porque Paco dibujaba una viñeta y, simplemente, la misma viñeta, en el mismo sitio, 20 años antes. Ayudándose de un tinte de color claro. En el cine es más complicado y se nos ocurrió reflejar esos recuerdos de una manera mucho menos detallada: más que imágenes buscábamos esas sensaciones que nos provocan una cara, un gesto, una frase… que recordamos y a los que luego nuestra cabeza intenta dar sentido. Por eso presentamos esos recuerdos como a través de un marquito pequeño y dándole una textura visual que sería la de nuestra memoria”.
"Los actores han creado una familia de verdad"
El director destaca que el equipo ha sido una piña donde ningún actor ha intentado brillar por encima de los demás: “Eso me encanta, porque en este rodaje no había divas, no había gente intentando robar escenas. Simplemente, han hecho algo tan sencillo, y tan complicado a la vez, como crear una familia de verdad”.
"Es una película sin egos -añade Verdaguer-, simplemente somos unos actores y actrices contando una historia. Y eso ha sido fantástico porque es como tenía que ser siempre. Lo importante es contar la historia entre todos y que conecte con el público y creo que lo hemos conseguido. Y eso es genial".
"Es una película que creo que nos da esperanza -añade Lorena-. Recuerdo que una de las cosas más emocionantes, cunado presentamos la película en Málaga, fue cuando la señora que nos hizo la primera pregunta se puso a llorar muchísimo. Y es muy emocionante ver que algo que has hecho toca tanto a la gente. Hacemos cine para provocar cosas en los espectadores. Y cuando logramos conmoverlos, ilusionarlos... como en este caso, sentimos que hemos hecho bien nuestro trabajo".
"Yo destacaría que Paco Roca no solo nos dejó la casa sino que siempre estaba sonriendo, que es algo muy bonito -concluye Óscar-. Y creo que eso está también en la película, que es melancólica pero no te deja hecho mierda, sino con una sonrisa. Terminas la película y te dan ganas de llamar a tu padre o a tu madre para hablar con ellos".
Por cierto, que, si os fijáis, descubriréis a Paco Roca en un pequeño cameo.
Una fantástica película de la que hablaremos mucho durante este 2024 y que llega a los cines este 1 de mayo.