La Unión Europea condena el uso "inaceptable" de violencia contra los manifestantes en Georgia

• Los manifestantes protestan contra la "ley de agentes extranjeros", que temen que se use para acallar a la disidencia
• Durante la jornada de este martes, la policía georgiana detuvo a al menos 63 personas

Un manifestante se enfrenta a la policía antidisturbios durante la protesta contra el proyecto de ley sobre "agentes extranjeros" cerca del parlamento georgiano EFE/EPA/DAVID MDZINARISHVILI

El alto representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, ha condenado "enérgicamente" el "inaceptable" uso de la fuerza por parte de las fuerzas de seguridad de Georgia contra los manifestantes pacíficos que protestaron contra "ley de agentes extranjeros". Los opositores denuncia que la ley promovida por el Gobierno y aprobada por el parlamento del país es una copia de la normativa que se emplea en Rusia para acallar a la disidencia.

"Georgia es un país candidato a la UE, pido a sus autoridades que garanticen el derecho de reunión pacífica. El uso de la fuerza para reprimirlo es inaceptable", subrayó en un mensaje compartido en la red social X en el que también expresa su condena.

La Unión Europea, que concedió a Georgia el estatus de candidato en diciembre, ha dicho que la ley podría hacer descarrilar las esperanzas de Tiflis de integrarse en Europa. Por su parte, los opositores georgianos denuncian que la medida promovida por el Gobierno es una copia de la normativa que se emplea en Rusia para acallar a la disidencia. Sin embargo, nada de ello ha impedido que finalmente sea aprobada por 83 votos a favor y solo 23 en contra.

En cambio, los partidarios del proyecto de ley, entre ellos Bidzina Ivanishvili, multimillonario fundador del partido gobernante 'Sueño Georgiano' y ex primer ministro, afirman que la ley sobre agentes extranjeros reforzaría la soberanía nacional en medio de lo que él considera intentos occidentales de llevar a Georgia a un enfrentamiento con Rusia. 

Violencia en las manifestaciones

Las protestas en Georgia contra la "ley de agentes extranjeros" comenzaron hace más de dos semanas y la policía ha intensificado la represión durante las últimas jornadas. Este martes, las fuerzas antidisturbios recurrieron al empleo de cañones de agua, gases lacrimógenos y granadas de aturdimiento para dispersar a los opositores, que intentaban bloquear la sede del legislativo.

Como resultado, fueron detenidas al menos 63 personas en Tiflis, la capital del país. Otros fueron heridos durante la manifestación, como uno de los líderes de la oposición georgiana, Leván Khabeishvili, que tuvo que ser hospitalizado. El opositor ha aparecido este miércoles en el Parlamento con la cara muy vendada. Según su partido, la policía le propinó una tremenda paliza en la protesta, que le causó conmoción cerebral, fractura de huesos faciales y la pérdida de cuatro dientes. Por su parte, la policía le acusa de intentar burlar un cordón policial en plena manifestación y oponer resistencia a los agentes

En la manifestación también fueron heridos seis policías. El ministro de Interior georgiano, Alexandr Darajvelidze, ha asegurado que los manifestantes "arrojaban a los agentes distintos objetos pesados, incluidas botellas y piedras".

La violencia de las calles también se ha trasladado a un Parlamento a menudo agitado. Los parlamentarios, que ya aprobaron la norma en primera lectura, han reanudado la segunda lectura este miércoles. Algunos legisladores georgianos se han enzarzado y se ha llegado a ver a un diputado progubernamental lanzar un libro a los legisladores de la oposición, mientras otros gritaban y se enfrentaban físicamente a los opositores.