Personas migrantes solicitantes de asilo en Reino Unido huyen a Irlanda para esquivar las deportaciones a Ruanda
- En las calles de Dublín han comenzado a aparecer tiendas de campaña de migrantes procedentes de Inglaterra
- Irlanda anuncia que va a reforzar la frontera con Irlanda del Norte con un centenar de agentes de policía
La tensión migratoria entre Reino Unido e Irlanda se agudiza. El primer ministro británico, Rishi Sunak, ha invitado a la República de Irlanda a adherirse a su plan de deportaciones a Ruanda. A raíz de esta ley, algunas personas migrantes solicitantes de asilo que estaban en Reino Unido están huyendo a Irlanda para que no los deporten.
En las calles de Dublín han comenzado a aparecer tiendas de campaña de personas migrantes procedentes del Reino Unido. "Tenía miedo de que me pudieran enviar a Ruanda", señala una de las acampadas.
Según el Ejecutivo irlandés, al menos el 80% ha llegado a través de la frontera con Irlanda del Norte. "No entendemos qué método ha usado el Gobierno para llegar a esa conclusión", sostienen desde el Consejo para el Refugiado de Irlanda, "pero está claro que hay personas que están huyendo del Reino Unido."
"No somos infrahumanos" y "buscar asilo no es un crimen" son algunas de las proclamas de las personas solicitantes de asilo.
Irlanda rechaza unirse a la ley de deportaciones
Sin embargo, se han disparado las manifestaciones xenófobas en Irlanda, y también la tensión entre ambos países. "No vamos a aceptar devoluciones desde la Unión Europea a través de Irlanda, del mismo modo que la Unión no acepta devoluciones a Francia", advierte Sunak.
Por su parte, el Gobierno irlandés ha rechazado la oferta de Sunak de unirse a las deportaciones y ha anunciado que va a reforzar la frontera con Irlanda del Norte con un centenar de agentes de policía. Y desde Londres le han recordado su compromiso de no instalar controles con esa parte del Reino Unido.
Así que lo que se evitó a toda costa tras el Brexit, una frontera dura, aparece como probable tras esta crisis migratoria.
Mientras, los primeros resultados de las elecciones locales en Inglaterra y Gales muestran una fuerte caída de los conservadores. Para el líder laborista, Keir Starmer, es una prueba del deseo de cambio y ha reclamado que se celebren ya elecciones generales.
Por su parte, Sunak ha admitido que el porcentaje de votos de su partido es decepcionante. El recuento de papeletas durará al menos hasta el sábado.