El Gobierno israelí decide por unanimidad cerrar el canal Al Jazeera en el país
- El ministro de Comunicación israelí, Shlomo Karhi, acusa a Al Jazeera de ser el "canal de propaganda" de Hamás
- La cadena catarí, que tiene periodistas en la Franja pese al rechazo israelí a dejar entrar a la prensa, lo califica de "acto criminal"
El Gobierno israelí ha decidido por unanimidad cerrar el canal catarí Al Jazeera en Israel, después de que el Parlamento aprobase el mes pasado una ley que permite clausurar medios extranjeros. "El Gobierno que encabezo decidió de forma unánime: el canal de incitación Al Jazeera se cerrará en Israel", ha escrito en su cuenta de X el primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu.
En un comunicado, el Gobierno israelí ha asegurado que la orden será implementada "de forma inmediata", y así ha sido, ya que el canal ha dejado de emitir en el país. El texto añade que "los periodistas de Al Jazeera han dañado la seguridad de Israel y han incitado contra los soldados del Ejército". "Es hora de eliminar el altavoz de Hamás de nuestro país", ha dicho el mandatario, sobre la cadena catarí que mantiene una amplio despliegue de periodistas en la Franja.
Las autoridades han detallado que la decisión contempla cerrar las oficinas en Israel de Al Jazeera, confiscar sus equipos de emisión, impedir las retransmisiones, eliminar el canal de los servicios por cable y satélite del país y bloquear su página web, entre otras medidas.
En su mensaje, Netanyahu ha dado las gracias al ministro de Comunicación israelí, Shlomo Karhi, porque ha impulsado la conocida como 'Ley Al Jazeera', que fue aprobada el pasado 1 de abril. Ahora, la orden deberá presentarse a revisión judicial en un tribunal de distrito, que debe decidir en 72 horas si desea modificar o acortar el período de implantación que, según la norma puede ser de hasta 45 días renovables.
Karhi acusa a Al Jazeera de "propaganda" y la Policía entra en sus instalaciones
Desde el Gobierno de Netanyahu, Karhi ha justificado la decisión acusando a Al Jazeera de ser el canal "de propaganda de Hamás", así como de "incitar la violencia contra Israel". "Aquellos que dañan la seguridad de Israel y a los soldados del Ejército ya no transmitirán desde Israel y sus equipos serán confiscados", ha dicho el ministro de comunicaciones en un vídeo publicado en su cuenta de X.
El cese de la emisión se ha producido poco después del anuncio. "De acuerdo la decisión del Gobierno, las retransmisiones del canal Al Yazeera se han detenido en Israel", se puede leer en un mensaje en hebreo al intentar sintonizar el canal.
Según un vídeo compartido en redes sociales por Karhi, inspectores del Ministerio de Comunicaciones, junto a policías, ha entrado en las oficinas de Al Yazeera en el Hotel Ambassador, en el territorio ocupado de Jerusalén Este, y han confiscado sus equipos.
El grupo islamista Hamás, por su parte, ha lamentado la decisión israelí y lo ha considerado la "culminación" de una "guerra declarada contra los periodistas". "Es una violación flagrante de la libertad de prensa y una acción represiva y de represalia contra el papel profesional de Al Jazeera al exponer los crímenes de la ocupación", ha dicho Hamás en un comunicado oficial, en el que ha pedido a las instituciones internacionales de derechos humanos y de prensa que "tomen medidas punitivas" contra Israel.
La emisión nacional de la cadena catarí es una de las principales fuentes de información sobre la guerra en Gaza por la gran cantidad de periodistas que mantiene en el enclave, en un momento en el que Israel impide la entrada de la prensa internacional a Gaza, donde ya han muerto más de 33.000 personas.
Al Jazeera califica el cierre como "acto criminal"
Al Jazeera ha calificado de "acto criminal" la medida aprobada por el Gobierno de Israel y dice que "viola los derechos humanos de acceso a la información". Asimismo, ve "irónico" que esta medida fuera aprobada tan solo dos días después del Día Mundial de la Libertad de Prensa "sin tener en cuenta los fundamentos universalmente reconocidos de la libertad de expresión". "Condenamos y denunciamos este acto criminal israelí, que viola los derechos humanos de acceso a la información" ha expresado la cadena en un comunicado, que denuncian que se han retirado las acreditaciones al personas y bloqueado su contenido en internet.
Al Jazeera, no obstante, ha dicho que continuará brindando sus servicios en todo el mundo por lo que emprenderá toda acción legal disponible a través de instituciones internacionales para proteger tanto los derechos de la empresa como de sus periodistas "así como el derecho a la información de la audiencia".
Desde octubre, la cadena ha informado sobre bombardeos de hospitales, ataques contra edificios residenciales y la muerte de gazatíes no armados. Además, varios de sus periodistas, como Hamza Wael Dahdouh o Mustafa Thuria, han perdido la vida en bombardeos israelíes. Otros corresponsales estrella como Wael Dahdouh han visto morir a la mayoría de sus familiares, incluido su hijo primogénito y también reportero, Hamza. En este sentido, ha recordado que "más de 140 periodistas palestinos" han muerto mientras realizaban su trabajo en Gaza desde el pasado 7 de octubre.
Gaza se ha convertido en el lugar más peligroso del mundo para ejercer el periodismo, según la clasificación mundial de la libertad de prensa que presenta Reporteros sin Fronteras (RSF) publicada este viernes. En ese informe, Israel ocupa la posición 101, con cuatro puntos menos con respecto a 2023, y califica la situación como "difícil". Cuando se aprobó la norma, la Asociación de Prensa Extranjera (FPA) de Israel, que representa a los periodistas que cubren el país y los territorios palestinos para medios extranjeros, la calificó como un "intento descarado de silenciar a los medios", y alertó de que establece un precedente peligroso que podría llevar al cierre de más medios extranjeros.
Protestas en Israel piden la vuelta de los secuestrados por Hamás
La decisión se ha hecho pública momentos antes de que Netayahu haya alejado la posibilidad de llegar a una tregua con Hamás, mientras continúan las negociaciones en El Cairo, Egipto. El mandatario israelí ha rechazado acabar con la guerra, tal y como pedía como condición Hamás para un intercambio de presos y rehenes. Ante ello, Hamás ha dicho que sigue interesado en negociar, pero que no cambiará esta petición, lo que vuelve a enquistar las posiciones.
Todo ello con nuevas protestas en las calles de Israel para pedir el regreso de los rehenes secuestrados por Hamás en el ataque del pasado 7 de octubre, así como el adelanto de las elecciones. Decenas de miles de personas se han concentrado en diferentes ciudades, entre ellas Tel Aviv, en una manifestación organizada por el Foro de Rehenes y Familias Desaparecidas, que ha pedido a Netanyahu que tome la decisión "correcta y valiente" y traiga a los secuestrados a casa. También en Estados Unidos, donde continúan las manifestaciones en las universidades de todo el país, que ya dejan numerosos detenidos.