La NASA ha cancelado el lanzamiento de la primera misión tripulada de Boeing en la nave Starliner al espacio

• Starliner retrasa su lanzamiento por un fallo de válvulas
• La NASA aplaza el lanzamiento hasta el viernes 10 de mayo

Imagen de la nave de Starliner de Boeing que ha aplazado su estreno. EFE

La NASA ha cancelado el lanzamiento de la primera misión tripulada de Boeing en la nave Starliner al espacio, cuando faltaban dos horas para el despegue,  previsto a las 02.34 UTC del 7 de mayo de 2024, porque el cohete lanzador Atlas V manifestó fallos en una de sus válvulas.

Suni Williams y Butch Wilmore, astronautas de la NASA, tenían como misión volar con Starliner hasta la Estación Espacial Internacional para acoplarse al puerto delantero del módulo Harmon. El objetivo era pasar una semana en espacio antes de volver a la Tierra. Sin embargo, debido al incidente, salieron de la nave y fueron trasladados a dependencias de la agencia en el complejo de Cabo Cañaveral, en Florida. 

Según informa la NASA, el despegue ha sido aplazado como mínimo hasta el viernes, "para  poder determinar si es necesario reemplazar la válvula". "La primera prioridad de la NASA es la seguridad. Iremos cuando estemos listos".

Un nuevo contratiempo para Starliner

Starliner es una nave espacial que surge como resultado del contrato que la NASA firmó con Boeing y con Space X para el transporte de sus astronautas a la Estación Espacial Internacional. La nave ha sufrido años de retrasos. Su cápsula tiene un diámetro de 4,56 metros y está diseñada para poder transportar hasta siete personas, permanecer en órbita hasta siete meses y ser reutilizada hasta en diez misiones. 

La última cancelación se suma una serie de contratiempos que ha registrado la Starliner, que logró volar hasta la EEI en una primera misión de prueba, sin tripulación en mayo de 2022, tras dos intentos fallidos en 2019 y 2021.

De cara a su primera misión tripulada no han escaseado los reveses para Boeing, que había programado para el 21 de julio de 2023 el lanzamiento de esta misión, pero el descubrimiento de unos fallos en el sistema de paracaídas y en unas cintas aislantes de fibra de vidrio obligaron a su aplazamiento cuando faltaba un mes y medio.

Un nuevo gasto para la NASA

La NASA lleva 4.200 millones de dólares invertidos en Boeing y en esta misión desde 2014, por lo que era de suma importancia este nuevo lanzamiento en Cabo Cañaveral. "Puedo decir con toda confianza que los equipos han hecho absolutamente su debida diligencia", aseguró la semana pasada James Free, administrador asociado de la NASA, antes del contratiempo.

Desde este incidente se ha comparado a Starliner con la Cápsula Dragon de SpaceX, que en el mismo periodo de tiempo y con 2.600 millones de dólares recibidos, lleva ya más de una decena de vuelos. El magnate Elon Musk, su presidente ejecutivo, se ha posicionado sobre el tema en un post de la red social X, horas antes del previsto despegue: "Demasiados gerentes no técnicos en Boeing".