Las medidas alternativas para corregir los incidentes de Rodalies saturan la red de metro y autobús en Barcelona

• Se han colapsado la estación de Badalona, metro y autobuses tras el robo de cobre de la red ferroviaria de este domingo
• El ministro de Transportes cree que se tardará dos meses en recuperar la normalidad y estima el daño económico en 15 millones

Continúa el caos en Rodalies tras el robo de cobre que marcó la jornada electoral

Las medidas alternativas acordadas anoche para paliar los incidentes en las líneas de Rodalies de Cataluña, que este lunes han pillado a muchos usuarios por sorpresa, han colapsado algunos puntos de la red del metro barcelonés, como la estación de Badalona o los autobuses y autocares que conectan Barcelona con el área metropolitana.

En algunas líneas, como la R1, en la tarde de este lunes se ha recuperado la normalidad hasta Hospitalet. Tanto las líneas R3 y R4 siguen afectadas, sobre todo la R4 sur. Se intentarán reforzar los refuerzos de autobuses. Los pasajeros de la R7 serán redirigidos a través de la R4 y otros medios. La R2 sí llega a Barcelona, que viene del Baix Llobregat y el Garraf.

Por su parte, los viajeros que buscan alternativas por carretera, como los autobuses entre Barcelona y Mataró Bus Express, han visto cómo los vehículos van llenos y ya no se detienen en algunas paradas.

Renfe ha reforzado el personal de información y atención al cliente en las estaciones para comunicar la reorganización del servicio durante este "operativo extraordinario". Las estaciones de Renfe de Plaza Cataluña y Arc de Triomf, en Barcelona, permanecen por ahora sin servicio ferroviario de Rodalies.

Estas son las incidencias vividas este lunes tras el robo de cobre producido este domingo, coincidiendo con los comicios en Cataluña, que ha provocado incidencias en todas las líneas de Rodalies en Cataluña. Como ha indicado el ministro de Transportes, Óscar Puente, se tardarán dos meses para que el servicio de viajes vuelva a la normalidad.

Servicio operativo este lunes

El plan de Renfe prevé que la línea R4 Nord tenga una circulación del 33% del servicio entre Manresa y Fabra i Puig en hora punta, y del 50% el resto del día. En Fabra i Puig, los viajeros se dirigen al metro, a Ferrocarrils de la Generalitat (FGC) o a la línea R2 de Rodalies.

En la R4 Sud, los trenes circulan hasta L'Hospitalet de Llobregat, con cuatro trenes por sentido, y enlazan con el metro, mientras que las líneas R2 Nord, R2 Sud, R8, R11 y Regionals Sud no tienen incidentes.

En la R3, hay servicio ferroviario entre Puigcerdà y Montcada Ripollet, con dos trenes por hora y sentido. Desde Montcada y Ripollet se establece un servicio alternativo por carretera hasta Sagrera Meridiana, donde los viajeros pueden continuar en metro.

Por último, en la R7 hay circulación hasta Cerdanyola, con un servicio alternativo de autobuses a partir de ese punto.

Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) ha reforzado el servicio de metro para facilitar la movilidad ante las incidencias en el servicio de Rodalies.

En un comunicado, TMB ha precisado que hasta 167 trenes circularán en hora punta en la mañana de este lunes, el máximo posible, y que la franja de servicio en hora punta se ha adelantado a las seis de la mañana. Este refuerzo del servicio implica que hay dos trenes más de los habituales en la hora punta de la mañana, y hasta 15 más durante el resto del día, por lo que en la hora punta de la tarde habrá hasta 152 trenes en servicio y hasta 140 en las horas valle del turno de mañana y del de tarde.

Por su parte, Ferrocarrils de la Generalitat de Catalunya (FGC) ha reforzado el servicio en las líneas metropolitanas (Barcelona-Valès y Llobregat-Anoia) desde este lunes, ante las afectaciones en Rodalies y el aumento de la demanda en las estaciones de Sabadell, Terrassa y Mortorell.

Transportes estima un daño económico de 15 millones de euros

El ministro de Transportes, Óscar Puente, ha dado detalles sobre el problema y ha dicho que los daños se deben al cortocircuito de un cable de alimentación sobre cables de instalaciones de seguridad y telecomunicaciones.

Ha destacado que "las consecuencias son muy graves y de un valor muy elevado", poniendo especial hincapié en las afectaciones para los viajeros. "Más de 3,2 millones de viajes van a estar afectados hasta que podamos volver a la normalidad", algo que ha estimado en un plazo aproximado de dos meses. Asimismo, Puente cree que las consecuencias económicas serán de unos 15 millones de euros, cuatro de ellos para reponer los elementos robados.

"Estos hecho son delictivos, dolosos, intencionados y han causado unos gravísimos daños al servicios y a la ciudadanía catalana. Estos hechos deben ser investigados para esclarecer quien se encuentra detrás de ellos", ha señalado el ministro. "¿Es sabotaje? No lo sabemos", ha indicado Puente, que ha dicho que "ni confirma ni desmiente" dicha teoría y, en todo caso, ha instado a ver qué dice la investigación.

De este modo, Puente ha indicado que van a presentar este martes una denuncia con los hechos, posiblemente en Barcelona, y se hará una narración de los mismos, sin apuntar posibles autorías.

Asimismo, ha defendido que este suceso se ha utilizado como "arma política" desde el Partido Popular. Puente ha indicado que el PP acusaba este lunes a Renfe y Adif de la incidencia durante los comicios en Cataluña, cuando en realidad se ha tratado de un acto delictivo de terceras personas.