La RAE publicará una guía para luchar contra los "enemigos" del lenguaje claro
- Se trata de la Guía panhispánica de lenguaje claro y accesible, cuyo borrador se ha presentado este martes
- La versión definitiva será expuesta en la siguiente Cumbre Iberoamericana en noviembre
La Real Academia de la Lengua Española (RAE), en colaboración con la Asociación de Academias de la Lengua Española (ASALE), ha elaborado una propuesta de borrador de Guía panhispánica de lenguaje claro y accesible. El objetivo es que sirva como decálogo universal a todos los programas y guías de lenguaje claro del futuro.
Este documento, presentado durante la I Convención de la Red Panhispánica de Lenguaje Claro, toma como base la doctrina ya establecida en normas académicas como diccionarios, gramáticas y la ortografía de la RAE y ASALE. Al acto ha asistido el rey Felipe VI, entre otras personalidades.
Como avances generales "para el logro de la claridad", la guía propone una formación buena en lingüística y en expresión de los profesionales.
"Se configura como un mapa esquemático que recoge solo las informaciones esenciales que orientan al viajero [el ciudadano] a lo largo del itinerario comunicativo", según ha recalcado el director del departamento de 'Español al día' y académico, Salvador Gutiérrez Ordóñez, "fomentando el derecho a comprender".
La guía contará con contenido como advertencias, recomendaciones, consejos y recursos dirigidos para obtener textos diáfanos. "Un léxico comunicativo en todos los ámbitos, desde la conversación familiar hasta los tratados científicos o humanísticos", ha añadido el académico.
Contra el lenguaje oscuro e incomprensible
En el capítulo titulado "Nuevos horizontes en el lenguaje claro", la guía incluye propuestas en la mejora de los textos del ámbito jurídico, siendo aplicables, según subraya Gutiérrez, a otros ámbitos.
Una de las cuestiones que tiene en cuenta el borrador es la lucha contra lo que se considera como lenguaje oscuro e incomprensible, propio de los poderes públicos.
"La administración utiliza una jerga propia, impositiva como quien habla, interpreta y decide (...) es el caso del laberíntico recibo de la luz o la letra pequeña de los bancos", añade el académico. "Trampas" que vulneran el principio de claridad y con los que quiere acabar de una vez por todas la RAE.
La comunicación médica es otro de los ámbitos tratados por la guía. El número de tecnicismos que utiliza es inmenso, con más de medio millón de términos. El académico ha explicado cómo el paciente que acude a la consulta suele estar en una situación de bloqueo cognitivo que le puede llevar a no comprender "explicaciones, memorizar pautas y reproducir correctamente el nombre de su patología".
El objetivo de este capítulo es acabar con esos dialectos técnicos que generan este tipo de disciplinas y que pueden impedir al ciudadano ejercer correctamente sus derechos. Por otro lado, la guía apunta a una mayor educación en las disciplinas científicas a los ciudadanos, así como reclama el "papel mediador" de la prensa.
Los enemigos del lenguaje claro
En el apartado de gramática se efectúa una selección de los temas que "mayores dificultades plantean a la claridad". Entre ellos, se abordan ejemplos con el foco puesto en gerundios, el género, el uso de oraciones pasivas, coordinaciones o subordinaciones.
Asimismo, Gutiérrez Ordóñez también ha avanzado que cuenta con una sección de discursos en la que se explican problemas frecuentes, tales como el párrafo largo, los incisos o las enumeraciones. Y en semántica se abordan conceptos "que subyacen a la opacidad lingüística" como presuposiciones, la ambigüedad, contradicciones, paradojas, eufemismos o redundancias.
"El respeto de las normas ortográficas es esencial para la claridad de los escritos", ha destacado el académico, quien ha aludido a la "influencia en la claridad" de la acentuación, la puntuación o el uso de las mayúsculas, frente al "efecto de opacidad causado por las palabras no bien digeridas que llegan de fuera", como los "extranjerismos crudos".
El director de la RAE, Santiago Muñoz Machado, ha defendido la importancia de la celebración de esta convención, así como de la publicación de la guía, incidiendo en la necesidad de un mayor lenguaje claro en la administración. En especial, se ha referido también a la relación del habla con la igualdad de género.
Las "imposiciones" en el lenguaje inclusivo
El académico ha alertado que desde la institución "no se puede correr el riesgo de imponer formas lingüísticas que los ciudadanos no aceptan", ni diferenciar el lenguaje usual del lenguaje "políticamente correcto".
No obstante, ha recordado que la RAE ha modificado "intensamente" el diccionario para eliminar muchas definiciones hechas en tiempos históricos que no tenían la misma valoración social que hoy del sexo femenino. También ha advertido que muchas formas generalizadas en el lenguaje usual tienen alternativas de expresión que no alteran el sistema de la lengua y favorecen la visibilidad del sexo femenino en el lenguaje.
"Únicamente nos rebelamos contra las imposiciones o las transgresiones forzadas de reglas para proponer innecesariamente otras que no encajan en ese sistema de la lengua y que afean la expresión de un idioma tan bello como el español", ha concluido.
Una vez recogidos todos los aportes al texto, la versión será presentada a los jefes y jefas de los gobiernos en la siguiente Cumbre Iberoamericana celebrada en Cuenca, en Ecuador, durante el mes de noviembre.