El fenómeno Taylor Swift, imparable y con capacidad para provocar un cambio en el mundo
- La artista domina la escena musical occidental con millones de seguidores que la idolatran
- Su capacidad de influencia es empleada por organizaciones internacionales para fomentar el cambio social
A sus 34 años, Taylor Swift es la artista que domina la escena musical en Occidente. La estrella del pop no solo es una de las cantantes más ricas del mundo, sino que sus canciones han influido notablemente en la industria hasta convertirse en un referente para todas las edades. Swift ha revolucionado la forma de comunicarse con su público, y ha creado un fenómeno de fans global (swifties) cuya capacidad de movilización tan solo es comparable con los del k-pop.
"Llevo una semana con una ansiedad, tengo el cortisol por las nubes", señala Mari Carmen, denominada swiftie y que espera ansiosa la llegada de su artista favorita a Madrid para el próximo concierto que dará en el Santiago Bernabéu a finales de mayo. Como ella, miles de seguidores cuentan las horas y los minutos para alguien cuya imagen idolatran hasta elevarla a un estado de cuasi-religión.
Peregrinan donde haga falta, y llevan la taylormanía marcada incluso en la piel en forma de tatuajes. Es tan cercana, que "casi la sientes como una amiga", declara Marcos Bueno, autor de Taylor Swift, un diario swiftie. No es para menos: todo aquello que no cuenta en sus redes lo hace a través de su música, con letras personales que son la comidilla de los fans, quienes tratan de averiguar las referencias, a quiénes van dirigidas y hasta su contexto a través del orden en que aparecen en sus álbumes.
Nombrada por la revista Time como "persona del año" en 2023, todos los ayuntamientos de las grandes ciudades europeas y americanas pelean para que la artista los visite. Esta obsesión por Taylor Swift, tanto por sus seguidores como por los lugares que acogen sus conciertos, tiene una causa: su actual gira, The Eras Tour, es la más rentable de la historia de la música.
A sus beneficios por la venta de entradas hay que sumarle su merchandising e, indirectamente, las ganancias por las reservas en hoteles y apartamentos de las ciudades en las que lleva a a cabo su gira, incluso si ello trae consigo multiplicar por 10 el precio de los alquileres; como ha ocurrido en Lisboa. Nada de eso parece detener la imparable obsesión de sus seguidores por la cantante.
Capacidad para cambiar el mundo
"Taylor Swift es producto de su tiempo, una estrella que ha tenido que rehacer su producción musical para ser dueña de la misma", señala la socióloga Miriam Jiménez Lastra. La cantante no solo triunfa en el sector musical, sino que su capacidad de congregar a las masas la han convertido en una poderosa portavoz para la concienciación y el cambio. Está a favor de los derechos de la mujer y ha compartido sus simpatías hacia la comunidad LGTBI, por lo que su mensaje genera un gran efecto entre sus seguidores más jóvenes.
Con el 3,5% de la población siguiéndola en redes sociales (unos 340 millones de personas), los estudios muestran que cuentan con capacidad suficiente para influir en las decisiones mundiales. Desde la Unión Europea, que ha pedido que, durante su gira por los países miembros, llame al voto joven europeo, hasta Amnistía Internacional, que emplea parte de las letras de sus canciones para concienciar sobre los Derechos Humanos, las organizaciones internacionales se han volcado con la imagen que transmite Swift a su público..
Su caso más sonado fue cuando hizo aparición en las últimas elecciones presidenciales en Estados Unidos en 2020 para pedir por el voto del entonces candidato demócrata, Joe Biden. Su última acción ocurrió en marzo de 2024 durante el conocido como Supermartes, cuando llamó a acudir a las urnas, lo que multiplicó por siete el número de afiliados. Hasta los candidatos republicanos hablan de una teoría de la conspiración que la señala como la promotora del voto a Biden. Una teoría que, más allá de su especulación, evidencia la capacidad de influencia de la artista.
Para muchos, Taylor Swift se ha convertido en algo más que una cantante reputada (nada menos que 14 premios Grammys en toda su carrera) para ser reconocida como una de las voces más importantes a nivel mundial. Su reputación la precede, y con ella la de millones de seguidores que apoyan sus palabras.