China endurece las medidas de seguridad en la plaza de Tiananmen 35 años después de la masacre
- En Hong Kong han detenido a varios activistas y manifestantes que intentaban conmemorar la matanza
- Taiwán es el único espacio con habla china que organiza una celebración de la efeméride de forma oficial
Las autoridades chinas han restringido el acceso a la plaza de Tiananmen para extremar la vigilancia con el objetivo de impedir las conmemoraciones del 35 aniversario de la masacre de manifestantes prodemocracia. En Hong Kong, la policía ha detenido a varios activistas que aparentemente se manifestaban en memoria de los ataques de las fuerzas armadas que dejaron miles de muertos, un hecho que el Partido Comunista Chino, en el poder desde 1949, nunca ha admitido ni ha publicado una cifra de víctimas.
La avenida de Chang'an ha sido cerrada por la mañana y grupos de voluntarios con brazaletes rojos patrullan por los alrededores para "mantener la estabilidad". Además, la página oficial de la Torre de Tiananmen ha anunciado que no se podría visitar durante todo el día y también se han suspendido los turnos de visitas a la plaza en la aplicación oficial. Adicionalmente, la plataforma WeChat ha presentado problemas para los usuarios que han querido cambiar la imagen de sus perfiles, presumiblemente para evitar que publiquen imágenes simbólicas de los asesinatos.
En el centro de Hong Kong, las autoridades han reforzado los dispositivos de seguridad alrededor del Parque Victoria, donde históricamente se celebraban vigilias en el aniversario de la matanza de Tiananmen hasta el 2019, antes de su prohibición a partir de la aprobación de la nueva ley de seguridad nacional. Las zonas aledañas amanecieron con varios furgones acorazados
En la víspera de este martes han retenido al menos a ocho personas, entre ellos un hombre mayor que sostenía un cartel o la activista sexagenaria Alexandra Wong, que gritaba "el pueblo no olvidará" mientras se la llevaban, según testigos, y el artista de performance Sanmu Chen. Un video en redes sociales muestra la detención de Chen, que aparentemente hacía señales en el aire con los números 8964 (una referencia al 4 de junio de 1989). Según AFP, Chen ya ha sido liberado después de ser llevado a una estación policial por "causar un disturbio".
También han sido detenidas otras ocho personas a lo largo de la última semana, acusadas de "sedición" según la ley de seguridad nacional, entre ellos la activista Chow Hang-tung, por la supuesta publicación de contenido en redes sociales que hacía referencia a la masacre de Tiananmen. La vigilancia de las autoridades chinas se extiende a la jerga y los dobles sentidos, como la cifra 8964, el personaje de ficción Winnie Pooh, que en años recientes se ha censurado por usarse para hablar en código sobre el presidente chino, Xi Jinping, y, en unos pocos casos, la música de Taylor Swift, cuyo nombre comparte las iniciales en inglés de la histórica plaza (Tiananmen Square) y tiene un álbum titulado 1989 , el año de la matanza.
El líder del Gobierno de Hong Kong, John Lee Ka-chiu, ha asegurado que "todavía hay fuerzas que intentan minar la estabilidad y seguridad de Hong Kong" y ha advertido de la necesidad de estar "en guardia en todo momento en contra de intentos de causar problemas", si bien no ha mencionado en ningún momento la relación con el aniversario de los hechos en Tiananmen.
Taiwán conmemora la masacre
Por otro lado, el gobierno de Taiwán de William Lai (Lai Ching-te) ha organizado una vigilia en memoria de los asesinatos, cuyo recuerdo "no desaparecerá en el torrente de la historia", ha afirmado.
En el centro de Taipéi, las conmemoraciones han vuelto a concentrarse en la plaza situada frente al mausoleo de Chiang Kai-shek, y los manifestantes encenderán velas y portarán pancartas durante la vigilia, similar a las que se celebraban en Hong Kong antes de la aprobación de la ley de seguridad nacional más reciente, donde las reemplaza un "carnaval" dirigido por grupos oficialistas para opacar el aniversario de la matanza.
Además, dentro del mausoleo se exponen las obras de 18 artistas internacionales en una exposición dirigida a una reflexión sobre la democracia y la libertad, titulada "LifeDeathPreserveForgotten" ("VidaMuertePreservarOlvidado", en inglés).
Las ONG denuncian la censura de China
La organización Human Rights Watch (HRW) ha denunciado que China "se ha adelantado nuevamente a las conmemoraciones" para "tratar de borrar la memoria de la masacre". También ha reclamado que la casa de Zhan Xianling, una de las fundadoras del grupo denominado las Madres de Tiananmen, ha estado "bajo vigilancia con policías", igual que la del abogado de derechos humanos Pu Zhiqiang, que fue un representante estudiantil en 1989.
A su vez, las Madres de Tiananmen han publicado un mensaje que acusa a las autoridades de "permanecer en silencio" durante 35 años. "Todo lo que aparece en internet es 'Una breve historia del Partido Comunista de China', que dice que en 1989 ocurrió un trágico incidente causado por el movimiento estudiantil", ha lamentado el grupo de supervivientes y familiares de víctimas, que afirman que no pueden "aceptar ni tolerar las declaraciones que ignoran los hechos".
La Unión Europea ha pedido a China que reconozca la masacre de Tiananmen este martes y que "rinda cuentas" por "reprimir violentamente las protestas pacíficas a favor de la democracia". También se ha "solidarizado con las familias de las víctimas", según Nabila Massrali, portavoz del Servicio Europeo de Acción Exterior (SEAE), que dirige el alto representante de la Unión para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Josep Borrell.
"Recordar los acontecimientos y honrar a quienes fueron asesinados, detenidos o desaparecidos es crucial para las generaciones futuras y la memoria colectiva", ha afirmado la portavoz. Además, ha asegurado que las restricciones a las conmemoraciones son "preocupantes" y que "deben respetarse las salvaguardias jurídicas y los derechos al debido proceso de las personas detenidas en relación con los acontecimientos de 1989 o con actividades para conmemorarlos".
La ministra de Exteriores de Australia, Penny Wong, también ha manifestado su preocupación por la reducción de los derechos humanos en China y ha destacado la "fuerza brutal" usada contra los estudiantes que se manifestaban hace 35 años. "Llamamos a China a acabar con la supresión de las libertades de libre expresión, de reunión, de medios y de la sociedad civil, y a liberar a los detenidos por expresar pacíficamente sus opiniones políticas", ha expresado en un comunicado.