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Ursula von der Leyen, una campaña con todos en contra y la incógnita de una alianza con la ultraderecha

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Ursula von der Leyen, una campaña con todos en contra
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, durante un acto de campaña en Bulgaria Dimitar KYOSEMARLIEV / AFP

Los posibles futuros pactos de la actual presidenta de la Comisión Europea y —en principio— candidata del Partido Popular Europeo (PPE) a repetir en ese puesto, Ursula von der Leyen, con el partido de la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, están centrando la campaña de sus rivales antes de las elecciones al Parlamento Europeo.

Para asegurar su segundo mandato en el Ejecutivo comunitario, es probable es que la política alemana necesite el respaldo del grupo de los Socialistas y Demócratas, que según las encuestas quedará en segunda posición en esas elecciones.

Desde 2019 el Parlamento ha sido dirigido por una coalición flexible del PPE de Von der Leyen junto a los socialistas y liberales, a los que en ocasiones se unen los Verdes.

Abrir el camino a un acuerdo con los Conservadores y Reformistas Europeos (ECR) —que incluye a Vox (España), Reconquête (Francia) y Fratelli d’Italia (Italia)— es una estrategia arriesgada y concentra las críticas de sus rivales en campaña.

"La política del Parlamento Europeo es una política claramente multipartidista en la que hay que buscar alianzas entre partidos incluso diferentes", comenta a RTVE.es el profesor de Relaciones Internacionales de la Universidad Pontificia Comillas, Andrea Betti. "Sin embargo, Von der Leyen está ahora mismo preocupada por la posibilidad de volver a ser nombrada y reelegida por el Parlamento Europeo como presidenta de la Comisión. No está claro si va a ser capaz de volver a proponer esa mayoría amplia entre populares, socialistas, verdes y liberales y, por lo tanto, está buscando otros posibles apoyos. Es una cuestión de asegurarse la reelección", recalca.

Una mayoría de escaños en el Parlamento de una alianza entre el ECR y el PPE supondría un importante giro hacia la derecha en las políticas de la Unión Europea, especialmente en asuntos que van desde la migración hasta las normas climáticas, los derechos de las mujeres y la defensa.

Un "error adelantar" el anuncio del posible acuerdo con la ultraderecha en campaña

Durante la campaña electoral, Von der Leyen se ha negado en dos ocasiones a descartar un acuerdo con el partido de Meloni en la próxima legislatura. En el debate entre los candidatos en Maastricht, la actual presidenta de la Comisión Europea aseguró que estaba abierta a un acuerdo con el ECR después de las elecciones europeas, aunque dejó claro que no trabajaría con el grupo de extrema derecha Identidad y Democracia.

Unas semanas después, durante el debate organizado por Eurovisión, aclaró que la primera ministra italiana cumple los tres criterios que Von der Leyen defiende para ser futuros socios: está a favor de la Unión Europea, en contra del presidente ruso, Vladímir Putin, y a favor del Estado de derecho.

Los expertos coinciden en que esta aproximación al partido de Meloni es una estrategia puramente política. Von der Leyen quizá podría atraer así suficiente respaldo en el caso de que la actual coalición con socialdemócratas y liberales no lograra los votos necesarios en las elecciones al Parlamento Europeo. Abriría la puerta a que la primera ministra italiana y su grupo de derecha europeo pasara a formar parte de los partidos que apoyan al Ejecutivo comunitario.

Von der Leyen expresa su opinión sobre la posibilidad de negociar con la ultraderecha

Según la profesora de Ciencias Políticas de la Universidad Complutense de Madrid (UCM), Ruth Ferrero, además de ser una estrategia política, "en el fondo también es ideológica". "Creo que Von der Leyen ha cometido un error, que ha sido adelantarse y no esperar al resultado final de las votaciones", opina. "Tenemos que ver cómo queda la distribución de escaños en el Parlamento Europeo y cómo están los equilibrios de fuerzas. Ha cometido el error de intentar amarrar los votos de unas fuerzas que todavía no sabemos en qué posición van a quedar", subraya.

Para Von der Leyen hay mucho en juego. El PPE es el mayor grupo del Parlamento Europeo, pero las encuestas señalan que alguno de los grupos a su derecha podría crecer e incluso quedar como tercera fuerza más votada tras los comicios. Como apuesta electoral tiene un alto riesgo, ya que podría romper la coalición entre el grupo de Von der Leyen y los socialistas, que tradicionalmente ha gobernado las instituciones de la Unión Europea.

"El problema es que si Von der Leyen busca el acuerdo típico de los últimos años con populares, socialistas y liberales, es muy probable que pierda cualquier posibilidad de llegar a acuerdos con la derecha más radical", asegura Betti. "Al mismo tiempo, si busca apoyos de la derecha más radical, va a perder casi seguramente el apoyo de los socialistas y de una parte de los liberales", indica.

Críticas por el Pacto Verde, demasiada burocracia y por ser "demasiado progre"

Los socialistas y liberales, que forman parte de la actual coalición liderada por Von der Leyen en Bruselas, han realizado durante la campaña electoral continuos ataques a la gestión de la presidenta de la Comisión Europea ante su posible cooperación en el futuro con el partido de Meloni.  Los socios de esa coalición amenazan con impedirle un segundo mandato en el Ejecutivo comunitario si llega a un acuerdo con la dirigente italiana.

Los candidatos están centrando sus críticas a Von der Leyen en su relación con la ultraderecha, pero hay más cuestiones. También han reprochado su viaje a Tel Aviv en octubre para ofrecer el apoyo de la Unión Europea a Israel o sus políticas del Pacto Verde.

"Von der Leyen ha sido una presidenta de la Comisión que ha tomado riesgos, que ha tomado decisiones. Mucho más que otros presidentes de la Comisión Europea", indica el profesor de la Universidad Pontificia Comillas. "Los socialistas y los Verdes la critican por no haberse comprometido más con la legislación verde, en materia medioambiental. (...) Los liberales la critican porque dicen que no ha hecho lo suficiente por los negocios, que Europa está demasiado burocratizada y esto impide el libre desarrollo de los negocios", detalla.

Además, según Betti, los dos grupos radicales de derecha europeos reprochan a Von der Leyen que sea "demasiado progre en términos de igualdad de género, política medioambiental y en términos de migración".

Dentro de su partido, los populares "mayoritariamente la apoyan, pero tenemos casos como en Francia, que no están muy satisfechos con Von der Leyen y no la apoyan", añade.

En este sentido, ya se han empezado a escuchar otros nombres que podrían sustituir a la actual presidenta de la Comisión Europea, como Mario Draghi, a quien apoya el presidente francés, Emmanuel Macron. "Habrá que ver a quién van a apoyar los grupos que están a la derecha del Partido Popular Europeo, ver qué decisión toma el grupo socialista, y los liberales y los Verdes con qué fuerza llegan a esa Cámara", señala Ferrero.

Una candidata experimentada con un mandato lleno de luces y sombras

Hija de Ernst Albrecht, quien llegó a ser jefe de gabinete en la Comisión de la Comunidad Económica Europea, Ursula von der Leyen nació en Bruselas en 1958. Estudió Economía —aunque nunca se graduó— y Medicina, pero no fue hasta 2003 cuando se lanzó a la política.

Comenzó ocupando varios cargos en el estado federal de Baja Sajonia y a finales de 2010 fue elegida vicepresidenta de la Unión Demócrata Cristiana (CDU). Unos años después se convirtió en la primera mujer en ocupar la cartera de Defensa en Alemania y en julio de 2019 fue elegida la primera mujer presidenta de la Comisión Europea.

En este cargo, Von der Leyen ha tenido que estar al frente del Ejecutivo comunitario gestionando el desenlace del Brexit, la respuesta a la pandemia del coronavirus y la guerra en Ucrania.

Entre sus principales logros, Betti destaca que ha "inaugurado una Comisión Europea que, desde el punto de vista de los objetivos, quiere ser más geopolítica". "Se ha comprometido mucho más a nivel internacional, ha intentado hacer mucho más para lograr que la UE hablara con una sola voz y para que se implicara en algunas de las cuestiones internacionales más delicadas", afirma el profesor, quien incluye entre estos logros "la gestión de la crisis del coronavirus y la compra conjunta de vacunas".

"En cambio, veo más sombras en los últimos meses o en el último año de su Presidencia, cuando probablemente las preocupaciones por ser reelegida le han quitado algo de fuerza, algo de coraje y ha tenido que mantener posiciones más ambiguas", opina.

Para Ferrero, uno de los aspectos más positivos de la legislatura de Von der Leyen es "dar impulso al Pacto Verde". "Por pragmatismo o por ideología, ha sido una férrea defensora de la puesta en marcha de las políticas de transición verde", comenta esta profesora, quien señala como las sombras de su Presidencia "las negociaciones del pacto migratorio o la autonomía con la que ha operado en el área de política exterior". "Tanto en la guerra de Ucrania, tomando la iniciativa de forma unilateral, sin consultar a los Estados miembros, o el más flagrante caso de la visita a Israel después de los atentados del 7 de octubre, algo que diplomáticamente no fue muy bien recibido por muchas capitales", subraya.