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Detenidos en Yuncos, Toledo, dos fugitivos relacionados con el crimen de Borja Villacís

  • La Policía cree que la víctima y los autores quedaron para discutir diferencias
  • Begoña Villacís agradece las muestras de "cariño" y asegura que su familia "está rota"

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Detenidos en Toledo dos hombres presuntamente relacionados con el asesinato de Borja Villacís

La Policía Nacional y la Guardia Civil ha detenido en una casa de Yuncos, Toledo, a los dos supuestos fugitivos (uno sería el autor material) del asesinato a tiros este martes de Borja Villacís, hermano de la ex vicealcaldesa de Madrid, Begoña Villacís. En la denominada 'Operación Jaula', agentes de diferentes unidades han encontrado en una casa que los vecinos pensaban que estaba deshabitada, situada en un pinar junto al cementerio de esta localidad, a estas dos personas, familiares de la mujer de 52 años detenida dos horas después del crimen en un lavadero de coches de la plaza Elíptica de Madrid. Ella sería la conductora del BMW utilizado en el crimen. 

Uno de los detenidos ha sido identificado como Kevin, hijo de la mujer de 52 años. La investigación de la policía nacional es secreta, pero ha trascendido que ella vivía en Bargas, Toledo.

A su vez, la Policía sitúa un tercer coche en el tiroteo en el distrito madrileño de Fuencarral-El Pardo. Según las investigaciones, el fallecido y su amigo habrían quedado con los autores del homicidio en el lugar de los hechos.

Fuentes policiales han informado que es posible que quedaran en las inmediaciones del restaurante Lar de Domingo —muy próximo al lugar del crimen— para encontrarse con viejos conocidos, pertenecientes a miembros de una familia de Bargas, un pueblo de Toledo, para discutir diferencias y que la reunión acabase en un tiroteo. También se baraja la opción de que el crimen sea un ajuste de cuentas.

Esa hipótesis apunta a la posibilidad de que Villacís y su acompañante fueron emboscados y tiroteados mientras circulaban por la citada carretera en un vehículo alquilado, un Citröen de color blanco.

Borja Villacís, que estaba siendo investigado por narcotráfico y blanqueo de capitales, iba de copiloto cuando recibió varios disparos en el pecho y la cabeza, mientras que su acompañante iba al volante. Este también resultó herido, pero logró acudir por sus propios medios hasta el Hospital Fundación Jiménez Díaz, donde fue ingresado en estado grave.

Un tercer coche en la escena del crimen

Los supuestos culpables, una mujer de 52 años y dos hombres que podrían ser familiares suyos, llegaron al lugar de los hechos en un BMW X2 de color gris plateado, que también había sido alquilado horas antes en la estación de Atocha. Un tercer coche azul acudió al lugar, cuyo papel en el crimen y sus ocupantes están siendo analizados por la Policía.

Al inicio de la carretera de Fuencarral al Pardo, el Citröen y el BMW chocaron intencionadamente, como reflejan los abollones de ambos vehículos. Del coche BMW, conducido por la mujer, salieron las otras dos personas con un subfusil de asalto y una escopeta de caza y se emprendieron a tiros contra la víctima, que quedó en la cuneta prácticamente muerto. 

Los autores también dispararon al amigo de Villacís. Aunque ingresó en estado grave por herida de bala, su vida no corre peligro y tendrá que declarar ante los agentes cuando se recupere.

Los sanitarios del Samur-Protección Civil acudieron al lugar del homicidio para atender a Borja. Sin embargo, tras practicarle maniobras de reanimación cardiopulmonar finalmente confirmaron su muerte por heridas de arma de fuego en cabeza y tórax.

Los culpables cambiaron las matrículas del coche

Tras los disparos, el BMW salió precipitadamente del lugar y paró en una rotonda situada en la carretera de Fuencarral a Alcobendas, muy cerca de la empresa Mediaset y al lado de un descampado.

El coche estaba abollado en su parte delantera izquierda y los airbags habían explotado, muy posiblemente como consecuencia del choque con el Citröen. Este hecho y las extrañas maniobras que realizaron tras bajarse de él dos de sus ocupantes alertaron a los empleados de una oficina cercana y a residentes en un hotel situado también enfrente de la carretera, que avisaron al 091.

Un vídeo muestra a los presuntos asesinos de Borja Villacís cambiando la matrícula y ocultando las armas

Los testigos contaron a los agentes que una mujer y un hombre estaban cambiando las placas de matrícula del coche en el que iban por otras. Uno de ellos saltó un murete y escondió las placas viejas junto a un árbol. Luego sacó una bolsa —al parecer donde llevaban las armas— y las depositó en ese descampado, en el que posteriormente se ve a un tercer hombre vestido de negro.

La sospechosa, al oír ruidos de sirenas policiales, se marchó del lugar conduciendo el vehículo, mientras que los otros dos individuos huyeron a la carrera por ese descampado que conecta con la M-40.

Encontraron un fusil de asalto y una escopeta de caza

Los agentes policiales se trasladaron al lugar de los hechos y lo examinaron minuciosamente. En él hallaron las matrículas cambiadas del BMW y las armas de fuego utilizadas en un cajón de madera tras unos montículos de escombros. Entre ellas había un fusil de asalto del calibre 7,62 milímetros y una escopeta de caza de calibre 12.

Tras las descripciones facilitadas por los testigos tanto del lugar del crimen como del cambio de placas, la mujer conductora del BMW fue detenida en un lavadero de coche de la Plaza Elíptica de Madrid. En un primer momento, la presunta culpable intentó convencer a la Policía, sin éxito, que la habían secuestrado. Se trata de una mujer española con muchos antecedentes policiales y un arresto reciente por parte de la Guardia Civil.

Por el momento se sabe que la Policía podría tener ya identificados a los dos hombres que le acompañaban, dado que el lugar del homicidio cuenta con muchas cámaras de seguridad. Además, uno de ellos podría ser hijo de la detenida.

La investigación sigue en marcha

La Policía Nacional cree que este suceso estaba muy planificado. Los presuntos asesinos emboscaron a las dos víctimas y por ello llevaron armas de fuego, así como placas de matrícula para evitar ser localizados.

Borja Villacís fue detenido en 2004 como miembro del grupo radical Ultrasur por apalear a un joven en Moncloa. En la actualidad, estaba imputado en una causa por narcotráfico y blanqueo de capitales a gran escala en el Juzgado Central de Instrucción número 5 de la Audiencia Nacional. Todo apunta a que su crimen está relacionado con un ajuste de cuentas relacionado con drogas, en el que también podría estar implicado su amigo.

Begoña Villacís asegura que su familia "está rota"

La ex vicealcaldesa de Madrid y exdirigente de Ciudadanos, Begoña Villacís, ha agradecido este miércoles las muestras de “cariño” tras el asesinato de su hermano Borja Villacís, y ha asegurado que la familia "está rota" y ha decidido “vivir estos momentos” en la intimidad.

"Gracias de corazón por tanto cariño. Mi familia está rota, hemos decidido vivir estos momentos en recogimiento e intimidad", ha escrito Villacís en su cuenta de la red social X, un día después del asesinato de su hermano.

El alcalde de Madrid, José Luis Martínez-Almeida, ha transmitido este miércoles todo el "cariño y aliento" del Ayuntamiento de Madrid a Begoña Villacís, con quien formó el primer gobierno de coalición de la historia del Consistorio de la capital entre 2019 y 2023.