Laboristas y conservadores se atacan sobre economía e inmigración en un debate por las elecciones de Reino Unido
- El nuevo dirigente del antiinmigración Reform UK, Nigel Farage, ha señalado que el país atraviesa "una crisis de población"
- La presidenta de la Cámara de los Comunes ha opinado que Sunak se equivocó al abandonar las celebraciones de Normandía
La número dos del laborismo, Angela Rayner, ha presentado al partido como la opción "del cambio" en el Reino Unido en temas como la economía o la inmigración frente al "futuro seguro" que prometen los 'tories' en un debate televisado entre representantes de siete formaciones políticas de cara a las elecciones del 4 de julio.
El resto de participantes en el programa de 90 minutos emitido este viernes por la BBC han sido el nuevo dirigente del antiinmigración Reform UK, Nigel Farage; la número dos de los Liberaldemócratas, Daisy Cooper; la codirigente de los Verdes para Inglaterra y Gales, Carla Denyer; el candidato del partido nacionalista galés Plaid Cymru, Rhun ap Iorwerth, y el líder en la Cámara de los Comunes del Partido Nacionalista Escocés (SNP), Stephen Flynn.
Rayner ha insistido en la idea del cambio "tras 14 años de caos" y ha asegurado que su formación rebajará, si sale elegida en las urnas, las listas de espera del sistema sanitario público del país (NHS), mejorará el estado de la economía y retomará el control de las fronteras del país.
Según ella, mientras que los 'tories' han "destrozado" y "colapsado" la economía, el Laborismo "ha sido honesto y claro" y no prometerá nada que el país no pueda conseguir.
Por su parte, la presidenta de la Cámara de los Comunes y presidenta del Consejo, Penny Mordaunt, ha advertido a los votantes que elegir en las urnas a Angela Rayner y Keir Starmer implicaría "que les suban los impuestos, las facturas y les saqueen sus pensiones", mientras que si deciden seguir con los 'tories', se les "recortarán los impuestos, se protegerán las pensiones y defenderán la nación".
El líder de Reform UK, el siempre polémico Nigel Farage, ha considerado, en líneas generales, que "no hay mucha diferencia" entre las dos grandes formaciones nacionales, cuyos argumentos tildó de "patéticos" al tiempo que acusó a sus respectivos líderes de "sosos".
Según él, todo apunta a que los laboristas ganarán las generales y que el verdadero debate versa ahora, por lo tanto, sobre quién liderará la oposición.
En ese sentido, Farage ha indicado que Reform UK se convertirá en un "fenómeno político" y liderará una "revuelta".
Crítica por la falta de Sunak en el acto Normandía
En el arranque del debate, Mordaunt fue cuestionada por la criticada marcha del primer ministro británico, Rishi Sunak, de Normandía (Francia) en la ceremonia internacional que tuvo lugar el jueves para recordar el 80 aniversario del Día D, el desembarco aliado en la Segunda Guerra Mundial (1939-45) antes de que terminara el evento.
Sobre ese asunto, por el que Sunak pidió perdón públicamente, Mordaunt ha opinado que fue "completamente equivocado" que el primer ministro abandonara las celebraciones antes de que estas concluyeran, pero ha recordado que "se ha disculpado y ha pedido perdón a los veteranos y a todos nosotros, ya que nos estaba representando a cada uno de nosotros".
Otro de los asuntos que ha generado más agitación ha sido la inmigración, Farage - nuevo dirigente de Reform UK-, ha lamentado que "la mayoría de personas que vienen (al Reino Unido) no son productivos, son dependientes" y ha señalado que el país atraviesa "una crisis de población".
A juicio del político eurófobo, a fin de que servicios como la sanidad o la vivienda puedan "remontar", la migración neta debe rebajarse.
En este sentido, Denyer, de los Verdes, ha abogado por lograr que el sistema de migración "sea más justo y más humano" y ha opinado que la inmigración "es algo bueno". Esta representante también ha enfatizado en varios momentos del debate que la "principal amenaza" que afronta el país es la del cambio climático.
En una de sus intervenciones, Farage ha opinado que esta está siendo una de las "peores campañas electorales" entre los dos partidos principales y ha tildado a ambos líderes -el 'tory', Rishi Sunak, y el laborista, Keir Starmer- de "sosos".