Muere un fugitivo tras una persecución entre una narcolancha y las fuerzas aduaneras en Barbate
- Uno de los tripulantes de la lancha rápida ha sufrido una parada cardiorrespiratoria
- El incidente se ha producido frente a la costa de Caños de Meca, en Barbate (Cádiz)
Un presunto narcotraficante ha fallecido después de una persecución entre el Servicio de Vigilancia Aduanera (SVA) y una narcolancha frente a la costa de Caños de Meca, en Barbate (Cádiz). Durante la operación en el mar, el sábado por la noche, la patrullera y la lancha rápida donde viajaban los dos fugitivos chocaron. Al parecer, la embarcación de los narcotraficantes se encaró con la otra nave y, además, se cruzaba constantemente. Tras reducir bruscamente la velocidad, se produjo la colisión entre los dos barcos, según han detallado las fuentes del SVA.
Durante estos hechos, uno de los fugitivos se lanzó al agua para tratar de huir, aunque luego pidió ser auxiliado por los agentes. En el traslado posterior a tierra, el presunto criminal ha sufrido una parada cardiorrespiratoria y los servicios médicos no han podido reanimarle, como ha detallado el SVA.
El delegado del Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, ha confirmado que el fallecido es marroquí. El otro tripulante, un vecino de Barbate con antecedentes por tráfico de drogas, está herido y ha sido detenido.
Los hechos ocurrieron hacia las 21.40 h y, a partir de ahora, la Guardia Civil instruirá las diligencias por el accidente y, Aduanas, la causa por el tráfico de drogas. El SVA han recuperado la embarcación utilizada para el transporte de la droga y, cuatro sacos de hachís, de 115 kg. La agencia EFE ha apuntado que la nave tiene entre cuatro y cinco metros de eslora, un motor fueraborda, y se la conoce como Mi abuelo.
La lucha contra el narco en Barbate
El 9 de febrero, dos guardias civiles fueron asesinados durante una operación en el mar por un grupo de narcotraficantes. Los criminales embistieron con su lancha rápida contra la embarcación del Instituto armado.
Los fallecidos eran Miguel Ángel, de 39 años y natural de San Fernando (Cádiz), con pareja y una hija, pertenecía a un equipo del Grupo de Especialistas de Actividades Subacuáticas (GEAS). El otro guardia civil era David, agente del Grupo de Acción Rápida (GAR). Nacido en Barcelona hace 43 años, estaba casado con una mujer y tenía dos hijos. Además, otros dos guardias civiles resultaron heridos, uno de ellos grave.