Enlaces accesibilidad

Giorgia Meloni consolida su fuerza en la UE con su victoria en las elecciones europeas en Italia

Por
Elecciones europeas 2024: La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, vota en las elecciones al Parlamento Europeo en una mesa electoral, en Roma
La primera ministra italiana, Giorgia Meloni, vota en las elecciones al Parlamento Europeo en una mesa electoral, en Roma EPA/GIUSEPPE LAMI

El partido ultraconservador de la primera ministra italiana, Giorgia Meloni, ha ganado las elecciones europeas en Italia, según los sondeos, lo que reafirma su estatus como partido más popular de Italia. La formación Hermanos de Italia ha obtenido entre el 26% y el 30% de los votos, lo que supone un vuelco con respecto a sus anteriores resultados de 2019, cuando apenas alcanzaron el 6,4% de los votos y 10 de los 76 europarlamentarios que posee Italia.

Desde entonces, y tras su victoria en las elecciones legislativas de 2022 cuando alcanzaron el 26% de los votos, Meloni se ha erigido entre los italianos como una gobernante popular y capaz de dirigir un país ante una izquierda fragmentada. El partido que lidera tiene sus raíces en un grupo neofascista que ha sido capaz de aprovechar el declive gradual de su actual socio de coalición, la formación ultraconservadora Liga. El triunfo de Meloni hace dos años ha marcado el rumbo en el avance de la extrema derecha en toda Europa.

Meloni había planteado su candidatura a las elecciones europeas como un plebiscito sobre su gestión tras un año y medio en el poder. Una semana antes de los comicios, la lideresa italiana afirmó que esta cita electoral sería "un referéndum entre dos visiones opuestas" y que se conseguiría lo que se hizo en Italia: "Construir el centroderecha" y "enviar a la izquierda a la oposición".

Los partidos del Gobierno salen reforzados

Además de la victoria de Meloni, los partidos liderados por los dos vicepresidentes del Gobierno italiano se situarían respectivamente en tercera y quinta posición, con el conservador Forza Italia, de Antonio Tajani, que suma entre un 8,5% y un 10,5%. El partido del desaparecido Silvio Berlusconi habría logrado imponerse a la Liga del vicepresidente Matteo Salvini, formación de extrema derecha que ha obtenido e un 8% y un 10%.

Por su parte, el partido opositor de centroizquierda, Partido Democrático (PD), ha ocupado el segundo lugar con el 23,7% de los votos. De confirmarse, el resultado del PD representaría una buena puntuación para su líder, Elly Schlein, que se hizo cargo del partido en 2023 y ha luchado por imponer su voluntad reformista frente a la vieja guardia. En los anteriores comicios, la formación obtuvo el respaldo del 19% del electorado.

El otro principal partido de oposición, el Movimiento 5 Estrellas, queda tercero con el 10,5% de los votos, su peor resultado desde su creación en 2009. Por último, Alianza Verde-Izquierda obtendría un 6,8 % del electorado, lo que implica que su líder, Ilaria Salis, una activista detenida en Hungría durante más de un año por supuestamente agredir a militantes de extrema derecha, es ahora europarlamentaria.

La decepción generalizada ha sido con el dato de participación, que ha sido menor del 50%, un mínimo histórico en un país que por lo general ha contado con una fuerte participación de los votantes.

La Europa de Meloni

Desde su llegada al poder, el Gobierno de Meloni ha seguido en la UE una línea europeísta a pesar de sus políticas ultraconservadoras a nivel nacional, con un declarado atlantismo y alineamiento a favor de Ucrania. Al mismo tiempo, esta visión no le ha impedido erigirse como una líder proactiva al criticar la "débil gestión" de la UE ante escenarios de crisis.

Su perfil multifacético ha conseguido acercamientos a representantes de la UE como no ha logrado hasta el momento ningún otro líder de la ultraderecha europea. Tal es así, que la actual presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, llegó a lanzar un órdago sobre la posibilidad de cooperar con los Conservadores y Reformistas Europeos, bloque del que Meloni es su actual presidenta.

Durante la campaña, Meloni ha abogado por emplear su grupo político en Europa para provocar un "cambio de rumbo decisivo" en las políticas europeas. Así, defiende un acercamiento de los partidos de la derecha y conservadores europeos, lo que emula la coalición con la que gobierna Italia. Todo ello con el fin de evitar que la izquierda pueda llevar la voz cantante en el Parlamento Europeo.

"Defenderemos en la Unión Europea nuestras excelencias, nuestras fronteras y nuestra identidad. También esta vez dirán que estamos locos, que es un reto imposible de lograr. Nos han dado por derrotados muchas veces, decían que estábamos destinados a desaparecer. Dejad que hablen", retaba a sus seguidores tras anunciar su candidatura como europarlamentaria.

Con su avance y el de otros grupos de ultraderecha, la aprobación de las futuras legislaciones en el Parlamento pueden resultar más complejas, lo que pone en riesgo las respuestas de la Unión Europea ante desafíos como los de la seguridad, el impacto del cambio climático o la competencia industrial de China y Estados Unidos.