Qué es la financiación "singular" para Cataluña que ERC exige al Gobierno para investir a Illa
- La medida busca recaudar el 100% de los impuestos que se pagan en Cataluña y, después, transferir una parte al Estado
- El Gobierno no cierra la puerta a esta vía, conscientes de la ajustada mayoría con la que cuentan en el Congreso
ERC ha situado la financiación "singular" de Cataluña como elemento central para una hipotética investidura del socialista Salvador Illa, ganador de las elecciones del pasado 12 de mayo. Se trata de una medida que el Govern catalán, entonces pilotado por Pere Aragonès, puso sobre la mesa en el mes de marzo y que vuelve al debate político en plenas negociaciones para formar un nuevo Ejecutivo.
Desde el Gobierno central no cierran la puerta a esta vía, conscientes de la ajustada mayoría con la que cuentan en el Congreso de los Diputados. Y es que una repetición electoral en Cataluña podría desestabilizar la legislatura y retrasar, de nuevo, la aprobación de los Presupuestos Generales del Estado (PGE), tal como sucedió con el adelanto electoral anunciado en el mes de marzo. Entonces, el Ejecutivo asumió que las negociaciones para aprobar las cuentas públicas podrían retrasarse de forma notable por la campaña electoral y decidió centrarse en las de 2025.
Sin embargo, aunque la medida se ponga en marcha y los socialistas consigan el apoyo de los republicanos, seguirá pendiente el apoyo de otro actor fundamental: Junts, el partido del expresidente Carles Puigdemont, quien también pugna con Illa por el liderazgo de la Generalitat y que ya ha advertido del “chantaje” que a su juicio supone ligar una financiación "singular" para Cataluña a la investidura del candidato socialista.
Pero, ¿qué es la financiación “singular” que exige ERC?
Es una medida inspirada en el llamado "cupo vasco" que tiene como objetivo que la Generalitat recaude el 100% los impuestos que se pagan en Cataluña —en vez del actual 9%— y que, después, se transfiera al Estado una parte a determinar por los servicios que presta en la comunidad, más otra partida para "contribuir a la equidad entre territorios". Esto implicaría que de los poco más de 25.600 millones recaudados en 2021 —sin contar los casi 4.900 millones de tributos propios—, la Generalitat podría ingresar hasta casi 52.000 millones, según sus cálculos. Esto es, más del doble.
Tal como explicó ERC en el mes de marzo, las partidas se acordarían y revisarían periódicamente, en el marco de "un mecanismo bilateral" entre la Generalitat y la Administración Central. Además, su implantación sería escalonada, por la complejidad de que la Hacienda catalana asumiera toda la gestión.
No se trata, por tanto, de una propuesta nueva, pero el momento es diferente: los partidos independentistas sostienen al Gobierno central y, una vez aprobada la ley de amnistía, ahora avisan de que la estabilidad del Gobierno peligra si no se pone en marcha la financiación. “Es el mínimo exigible”, señaló este fin de semana la secretaria general de ERC, Marta Rovira, en una intervención telemática ante el Consell Nacional.
"El PSC debe saber que si Pedro Sánchez no es capaz de mover ficha en la financiación singular (para Cataluña) será muy difícil que ERC le pueda dar apoyo. Salvador Illa debe tener bien presente esto, porque nosotros tenemos que estar al lado de las necesidades del país", sentenció.
Este mismo lunes, la portavoz de ERC, Raquel Sans, ha ido más allá y ha advertido de que la financiación “singular” para Cataluña que proponen implica “salir del régimen común” en el que se encuentran todas las comunidades, salvo País Vasco y Navarra. “Significa tener la llave de la caja y dejar de captar el 9% de los impuestos, para pasar al 100%”, ha señalado en una comparecencia a los medios.
¿Qué dice el Gobierno?
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ya se ha puesto manos a la obra para convertir a Salvador Illa en el próximo presidente de la Generalitat y, al mismo tiempo, para tener unos Presupuestos para 2025 en tiempo y forma. En una entrevista este domingo en La Vanguardia, aseguró que ve "factible" la puesta en marcha de una financiación “singular” en Cataluña que sea "compatible" con la financiación multilateral del resto de las comunidades y consideró que el futuro en esta comunidad y "en buena medida" de España depende de un acuerdo entre el PSC y ERC.
"Creo que con ERC nos podemos entender en el plano social y, en lo que ellos llaman el nacional, Salvador Illa se ha comprometido a reforzar el autogobierno y yo también, además del respeto a la lengua y la cultura catalana, y a los pactos alcanzados con el president Aragonès, a quien quiero reconocer su colaboración", añadió Sánchez.
En la misma línea, la vicepresidenta primera y ministra de Hacienda, María Jesús Montero, planteó la pasada semana en una entrevista en RNE la posibilidad de ofrecer a Cataluña un tratamiento “especial” en materia de financiación autonómica, pero insistió en llevar a cabo una negociación junto al resto de comunidades autónomas para impulsar un modelo que sea válido para todas. Asimismo, señaló que actualmente están trabajando en la condonación de la deuda autonómica por valor de 15.000 millones de euros que el PSOE pactó con ERC en el acuerdo de investidura de Pedro Sánchez, mediante el cual la Administración General del Estado asumiría esa parte de la deuda autonómica.
Preguntada por este asunto, la portavoz del PSOE, Esther Peña, ha rechazado un modelo de financiación para Cataluña similar al concierto con el que cuentan Euskadi y Navarra y que les permite recaudar y gestionar la totalidad de sus impuestos, pero ha apostado por incrementar los fondos destinados a la Generalitat dado que asumen más competencias que otras autonomías: "El Partido Socialista no está en el concierto que propone el señor Feijóo", ha señalado Peña, que ha echado en cara al líder del PP unas declaraciones de 2016 en las que a juicio del PSOE se mostraba partidario de este modelo para Cataluña.
Puigdemont denuncia el "chantaje" de Sánchez a ERC
Por su parte, el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont ha tildado este lunes de “chantaje” que el presidente del Gobierno ligue una financiación “singular” para Cataluña a la investidura de Salvador Illa como president. En un mensaje en la red social X, ha señalado que este guiño de Sánchez a ERC representa "un escándalo en todos los sentidos" y se ha mostrado convencido de que Cataluña necesita "un concierto económico propio, no como concesión para que gobiernen unos u otros".
"¿No cree que con su chantaje está dando argumentos a los españoles que piensan que los catalanes reclamamos un trato que no nos merecemos? Es decir, que solo se nos concederá aquello que reclamamos no porque sea justo —de otra forma, se nos habría atendido mucho antes— sino porque el partido que ahora mismo gobierna España necesita hacerse con el gobierno en Cataluña al precio que sea", ha recalcado, tachando de "inmoral" jugar a su juicio "con el bienestar y el futuro de los catalanes como moneda de cambio de beneficios para un partido”.
Y ha puesto condiciones a un apoyo de Junts a los próximos Presupuestos: "Han de hablar muy claro si quieren contar con nuestro apoyo. Sobre todo hay que mirar con lupa el grado de ejecución presupuestaria. Porque normalmente lo que te dan por un lado —nuevo modelo de financiación—, te lo quitan por otro —no ejecución de las inversiones presupuestadas—", ha sentenciado.
El PP habla de "corrupción política"
La respuesta de los ‘populares’ no se ha hecho esperar. "No creo que haya un presidente de una comunidad autónoma, del PSOE o del PP, que esté de acuerdo con una financiación singular en contra de las demás, en disposición de renunciar a lo que le corresponde en beneficio de otra. No ha ocurrido nunca desde los años 80 que empezamos a aprobar los estatutos de autonomía", ha recalcado el presidente del partido, Alberto Núñez Feijóo, argumentando que esa medida está "abocada al fracaso".
En la misma línea, el vicesecretario de Economía del PP, Juan Bravo, ha calificado este lunes la propuesta de "corrupción política", acusando al PSOE de "pagar por votos" para mantener a Sánchez en el cargo. "Si nosotros supiésemos que alguien ha pagado a un señor que va a votar 50 euros por su voto, lo llamaríamos corrupción política, ¿verdad? Y cuando pagas vía financiación autonómica para conseguir unos votos, ¿cómo lo llamamos?", ha expresado en una entrevista en la cadena Cope, recogida por Europa Press.