Mohamed VI indulta a 1.484 personas en Marruecos con motivo de la Fiesta del Cordero
- Es costumbre que en esta fiesta religiosa el monarca conceda estas medidas de gracia
- Mohamed VI degolló a un carnero en la mezquita Hasán II de Tetuán como parte de la tradición
El rey Mohamed VI de Marruecos indultó este domingo a 1.484 personas, 1.209 de ellas en prisión, con motivo de la Fiesta del Cordero (Aíd Al Adha), que coincide con el final del peregrinaje anual a La Meca. También perdonó el pago de multas.
Entre los indultados hay una persona a la que el monarca le ha conmutado la pena de cadena perpetua por otra menor de reclusión. A otros 114 les ha perdonado el tiempo de prisión que les quedaba por cumplir y ha reducido la pena de prisión de 1.094 personas, según informa el Ministerio de Justicia en un comunicado recogido por la agencia oficial MAP.
En cada fiesta religiosa o nacional es costumbre que el rey conceda estas medidas de gracia, una de sus atribuciones exclusivas, sin que se sepan los criterios que rigen la concesión del indulto.
Mohamed VI degüella a un carnero como parte de la tradición
Cumpliendo con la tradición, el rey de Marruecos ha asistido este lunes al rezo que ha tenido lugar en la mezquita Hasán II de Tetuán, al norte del país, como parte de la celebración de la Fiesta del Sacrificio o Fiesta del Cordero.
El monarca ha llegado a la mezquita vestido con la tradicional chilaba amarilla después de recorrer las calles de la ciudad norteña a bordo de un coche clásico, a través de cuyo techo abatible ha salido intermitentemente para saludar a los ciudadanos que le esperaban en las aceras, según las imágenes retransmitidas por la televisión pública marroquí Al Oula.
Después de asistir a la oración de Aíd al Adha, Mohamed VI, en calidad de máximo comendador religioso de los marroquíes, ha degollado a un carnero blanco a las puertas de la mezquita con ocasión de esta festividad, la más importante del calendario musulmán.
El monarca ha estado acompañado de su hijo, el príncipe heredero Mulay Hasán, su hermano, el príncipe Mulay Rachid y el presidente del Gobierno marroquí, Aziz Ajanuch. Tras el acto, el rey ha sido trasladado de nuevo en comitiva hasta el Palacio Real de Tetuán.
Según la tradición musulmana, el sacrificio realizado por la máxima autoridad religiosa tiene la función de cubrir la obligación del sacrificio a aquellos súbditos que, por la razón que sea, no pueden degollar a un animal el día de la Fiesta del Sacrificio.
¿Qué es la Fiesta del Cordero?
El Eíd Al Adha es la fiesta más importante del islam. Es el día en que se recuerda el pasaje donde el profeta Ibrahim (Abraham en la tradición judeocristiana) accedió a sacrificar a su hijo Ismael como muestra de su devoción por Dios. Este lo sustituyó por un carnero haciendo que Ibrahim degollara al animal y no a su hijo.
Fatiha, divorciada y con una hija,
está en paro y no tiene mucho presupuesto este año
para comprar un cordero.
Por eso ha venido a este mercado, al lado de la Mezquita de Casablanca
y cerca de los barrios más populares.
Aquí solo se venden ejemplares españoles.
Son más baratos que los marroquíes.
"He venido a ver y a comprar
porque la gente nos ha dicho que las ovejas españolas
tienen muy buena carne".
Después de haberlos probado el año pasado,
cada vez hay más compradores que prefieren el ganado español.
Vienen ya marcados con su número de serie
y procedencia.
Deben cumplir las mismas normas sanitarias
que en España.
"Para mí el cordero marroquí sigue siendo el mejor",
nos dice Nora,
"pero este año hemos tenido que buscar algo más barato".
El gobierno marroquí ofrece una ayuda a los ganaderos
de 50 euros
para poder importar los corderos
y evitar así que se disparen los precios.
Aquí ya los llaman "los Alejandros"
para distinguirlos de los marroquíes.
"Es una broma entre nosotros porque el nombre español de Alejandro,
aquí es muy conocido,
y por eso hemos cogido este nombre de pila
para llamar a las ovejas españolas".
A pesar de la fuerte subida de precios,
la mayoría de familias marroquíes
prefieren seguir celebrando esta fiesta religiosa
aunque tengan que tirar la casa por la ventana.
Este año está previsto que se vendan cerca de ocho millones
de ejemplares como estos.
Un cordero español puede costar unos 250 euros,
sale más barato que el marroquí,
pero supone más de la mitad del sueldo mínimo.
Aún así, las familias musulmanas están dispuestas a empeñarse
para sacrificar un cordero en agradecimiento a Dios.
La fiesta tiene lugar al finalizar el peregrinaje a La Meca, que este año comenzó el pasado viernes y terminará este miércoles por la noche. Las familias se reúnen para orar juntas, realizar el ritual musulmán, que trata de evitar el sufrimiento del animal, y repartir la carne entre quien compró el animal, la familia y los más necesitados.
Un carnero, según su peso, puede costar entre 250 y 300 euros, más de la mitad del sueldo mínimo en Marruecos. Muchas familias se endeudan y piden préstamos al banco para poder comprar uno. Este año, debido a las fuertes sequías y por tanto, falta de pastos, el país ha importado 600.000 cabezas ovinas, de las que 400.000 provienen de España.