El nacimiento de millones de medusas conocidas como huevo frito ayudarán al ecosistema del Mar Menor
- Para los científicos es la primera señal de que "algo va mejor en el Mar Menor"
- Los expertos afirman que son compatibles con el baño, ya que no son peligrosas
Las playas del Mar Menor han sido testigos del nacimiento de millones de medusas, las Cotylorizas tuberculatas, más conocidas como huevo frito. Puede que muchas no lleguen a desarrollarse, pero su presencia, a pesar de que algunos la vean como una amenaza, es una buena noticia para el ecosistema.
Según el biólogo marino del Instituto de Ciencias del Mar del CSIC Josep María Gili es un primer "síntoma de que algo va mejor en el Mar Menor", ya que también estos animales son un buen indicador para mejorar todo el ecosistema. "Esto tiene una parte muy positiva para el resto de organismos en el Mar Menor, porque peces, crustáceos, aves, todos se alimentan de esta medusa", añade el biólogo.
Siguiendo esta misma línea, el portavoz del comité científico del Mar Menor, Emilio María Dolores, concreta que este tipo de medusas "ayudan a contener que no se acumule un exceso de exoplaston y de citoplaston dentro del ecosistema, por lo tanto, su papel es esencial". Sin embargo, ahora queda por ver si todos los ejemplares sobreviven.
Las medusas son compatibles con el baño
Otro punto es la convivencia con los bañistas, dado que estos no siempre ven con buenos ojos a las medusas y aunque el mensaje es de tranquilidad al ser compatibles con el baño y porque no son muy tóxicas, sí pican, y por eso se desplegarán redes. "No es peligroso, pero sí muy molesto", afirma a TVE el director general del Mar Menor, Víctor Serrano. Además, recuerda que "otros años se han instalado como 40 kilómetros de redes". Sin embargo, este año, indica que "estamos hablando de una instalación mucho más limitada".
La previsión es que la mayor parte de las redes se concentren en la cubeta norte del Mar Menor, en la zona de Veneziola y la ribera interna en San Pedro del Pinatar y Los Nietos. Los expertos explican que las redes se pondrán de manera casi quirúrgica, para no dañar el ecosistema. Por lo que se evitarán "embolsamientos de medusas" y acumulación en los laterales que luego puedan entrar en la zona de baño y se tomarán medidas para evitar que se acumule red en el fondo. Uno de los objetivos de los científicos es que también puedan volver el resto de vecinos al Mar Menor.