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'Li'l Abner' de Al Capp, un clásico imperecedero del cómic

  • Se publican dos nuevos volúmenes con las tiras y planchas dominicales de esta obra maestra del cómic
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Detalle de la portada del segundo volumen de Li'l Abner
Detalle de la portada del segundo volumen de Li'l Abner

La editorial madrileña Diábolo ediciones nos está haciendo muy felices con su impagable recuperación de clásicos del cómic norteamericano, como los míticos cómics de terror de EC o Polly and Her Palls, de Cliff Sterrett. Y, por supuesto, Li'l Abner, de Al Capp (1909-1979), del que ya están disponibles los tomos dos y tres, que recogen las tiras diarias y planchas dominicales (a todo color), publicadas entre 1937 y 1940. Además en un formato gigante que nos permite disfrutar a la vez de muchas tiras (cinco por página) y poder apreciar la belleza de esas páginas dominicales. Y es que nos hayamos ante una de las indiscutibles obras maestras de la historia del cómic

Una serie que satirizaba la sociedad estadounidense de la época y en la que prácticamente todos sus personajes eran estúpidos, empezando por su protagonista. Y es que Capp no dejaba títere con cabeza en esta serie, que nos sigue sorprendiendo por su acidez e ironía. Y que, en el fondo, continúa siendo muy actual, porque seguimos cometiendo los mismos errores y siendo tan estúpidos como Capp retrataba a sus contemporáneos... También nos sorprende por sus extravagantes protagonistas y su humor absurdo que ha resistido al paso del tiempo. Sin olvidar sus espectaculares dibujos.

Capp conseguía reírse de todo el mundo y, algo casi imposible, que todas esas personas de las que se reía se rieran con él sin sentirse ofendidos. Incluso los grandes intelectuales de la época se confesaban fans de la serie y la reconocían como una de las mejores sátiras jamás creadas, que mezclaba a la perfección el humor surrealista, la aventura y la crítica social.

Estos tomos son los que coinciden con el despegue definitivo de la tira, cuando cada vez se publicaba en más periódicos y Capp se iba soltando más el pelo, con argumentos cada vez más surrealistas y divertidos.

El premio Nobel John Steinbeck (Las uvas de la ira, Al este del Edén), dijo de Al Capp que era "posiblemente el mejor escritor de la actualidad". Y, curiosamente, el tomo tres incluye una divertida parodia de Las uvas de la ira, esa mítica novela ambientada en la Gran Depresión norteamericana. Justo cuando el escritor recibía el premio Pulitzer por la novela, Capp nos mostró como los habitantes del pueblo de Li'l Abner se mueren de hambre, porque la termita del nabo ha acabado con sus cosechas. Eso llevará al joven protagonista a irse a Boston para intentar ganarse la vida recogiendo naranjas. Hoy en día, esta sigue siendo una de las historias más recordadas del personaje.

Página dominical de Li'l Abner

Página dominical de Li'l Abner

En ese mismo tomo encontraréis otra parodia de Lo que el viento se llevó, de Margaret Mitchell. Capp nos cuenta cómo la actriz Margo Mars pasa por Dogpatch (el pueblo de Abner) y descubre algo que le hará decidir abandonar el rodaje de su película, que parece que va a ser un éxito. Una película titulada Lo que la brisa arrambló, y en la que Margo interpreta el papel de Alpargata O'Tara.

Lo curioso es que, a finales de la década de los 30, las tiras de Li'l Abner eran ya tan populares que se adaptaron al teatro, la radio y el cine, en una película de 1940, dirigida por Albert S. Rogell, y en la que el mismísimo Buster Keaton interpretaba a Lonesome Polecat, uno de los protagonistas. Desgraciadamente era una producción muy barata que no tuvo demasiada repercusión.

Además del cine, en estas tiras Al Capp refleja acontecimientos históricos, como el ascenso del nazismo o la importancia de la radio en la sociedad de la época (recordemos que en 1938 se emitió la famosa adaptación de Orson Welles de La guerra de los mundos, de H.G. Wells, que llevó a mucha gente a pensar que la invasión extraterrestre que contaba era real).

Otra curiosidad es que, en 1938, Abner decidía crear en la tira el "Día de Sadie Hopkins". El padre de la eterna enamorada de Li'l Abner decidía disparar a los solteros del pueblo para que echaran a correr y Sadie los perseguía, de forma que al que cogiese tenía que casarse con ella. Una anécdota que no solo se convirtió en una tradición anual en la tira, sino que fue adoptada por jóvenes de los Campus Universitarios de Estados unidos y Canada (aunque, suponemos, que sin el matrimonio obligatorio cuando los jóvenes eran atrapados). Eso también nos da una idea de lo popular que era ya la tira en esa época.

En fina, una obra maestra del cómic que hemos tenido que esperar más de 90 años, para poder disfrutar de una edición a la altura en España.

Portada del segundo volumen de Li'l Abner

Portada del segundo volumen de Li'l Abner

Un éxito que traspasó fronteras

El éxito de Li'l Abner fue tal que se llegó a publicar en más de mil periódicos de Estados Unidos. Y también en muchos otros países, acumulando millones de lectores en todo el mundo. Enseguida hubo versiones cinematográficas y teatrales e incluso sus personajes aparecieron en las revistas más famosas de la época, como Time y Life. Y Abner se convirtió en el dibujante más popular de su época.

Además, este tebeo es el máximo exponente de un subgénero cómico basado en el contraste entre la vida en el campo y la ciudad, que era muy popular en la época en la que nació la serie. Pero que Capp llevó a su máxima expresión. Por eso el cómic ha tenido numerosos imitadores, algunos tan populares como Rústicos en dinerolandia o Los Flodder. En el primero de los episodios del libro, el protagonista visitará a su tía millonaria en la ciudad, pero enseguida se cansará de la vida cosmopolita y volverá a las montañas.

Como curiosidad en esta imagen podéis comprobar que durante unas cuantas páginas dominicales, Li'l Abner compartía página con otra serie de Capp llamada Washable Jones. En esa época era normal que series compartiesen espacio e incluso a veces las secundarias acababan siendo más populares que las principales, pero eso no ocurrió en este caso y enseguida desapareció para dejar todo el espacio a Abner.

Página dominical de Li'l Abner

Página dominical de Li'l Abner

Un fragmento de la historia de Estados Unidos

Li'l Abner se publicó en estados Unidos durante 43 años, entre 1934 y 1977, y desde la perspectiva actual, este cómic también nos sirve para ver cómo Capp reflejó en sus cómics los cambios políticos y sociales de su época, como la lucha por la igualdad de los afroamericanos y las mujeres.

Como curiosidad, destacar que Capp empezó siendo progresista, pero en los años 60 experimentó un sorprendente giro a la derecha que lo llevó a criticar a los hippies, los manifestantes contra la guerra del Vietnam... y criticó duramente lo que él llamaba la "izquierda revolucionaria".

El protagonista es un joven leñador llamado Li'l Abner (que todo lo resuelve a puñetazos), su familia (Mammy, Pappy, Honest Abe, Tiny) y su eterna novia (Daisy Mae). Además de un puñado de personajes a cuál más estrambótico y estrafalario (casi todos son idiotas, cretinos, perezosos, ignorantes o, simplemente, ingenuos).

Tiras diarias de Li'l Abner

Tiras diarias de Li'l Abner

Personajes que parodiaban los peores defectos del ser humano y eran una sátira de los tipos sociales de su época. Pero que son realmente inolvidables. Como la perezosa Moonbeam McSwine, el senador corrupto J. S. Phogbound, el tirano capitalista Bullmoose o la horrenda Lena the Hyena. Sin olvidar a otros con nombres tan pintorescos como Joe Btfsplk, Labios babosos McGoon, Passionata Von Climax o los Scragg.

Aunque, en el fondo, Capp añoraba la inocencia que desprendía su personaje protagonista, que no era capaz de mentir y que siempre decía lo que sentía. Una inocencia que el autor sentía que se había perdido con los artificios de la sociedad moderna.

Como siempre ha sido habitual en el mundo del cómic, la explosiva Daisy Mae parecía destinada a ser la eterna novia del protagonista, pero, tras 18 años de noviazgo, en los que ella no paraba de intentar "cazarlo", la pareja contrajo matrimonio. Una noticia que fue portada de revistas como Time o Life.

Portada de la revista 'Life' dedicada a la boda de Li'l Abner

Un pueblo imaginario de la América profunda

La mayoría de sus aventuras transcurrían en un imaginario pueblo de la América profunda, Dogpatch, aunque los viajes de Li'l Abner a nueva York fueron cada vez más frecuentes. Y Capp aumentaba cada vez más el surrealismo y el humor absurdo en sus historias, llevando a sus personajes a los cráteres de la Luna o la imaginaria nación de Baja Slobbovia. Ese contraste de culturas (urbana y cosmopolita o entre esos distintos lugares) permitía a Capp realizar sus juegos de palabras y bromas relacionadas con el dialecto "paleto" de Li'l Abner y su familia.

A ese humor surrealista, los juegos de palabras y la crítica social, había que sumar los espectaculares dibujos de Al Capp, que contó con la ayuda de algunos de los mejores dibujantes de la época, entre los que destacamos a un primerizo, Frank Frazetta, uno de los mejores ilustradores de la historia del que Taschen ha publicado un espectacular volumen The fantastic Worlds of Frank Frazetta.

Como curiosidad, recordar que cuando Al Capp tenía 9 años de edad, se cayó del carro de hielo tirado por un caballo en el que viajaba y fue arrollado por un tranvía que le cortó la pierna izquierda por encima de la rodilla. Tras tres semanas a punto de morir se recuperó y empezó a caminar con la ayuda de una pata de palo. Pero nunca pudo volver a jugar como los demás niños, lo que le hizo refugiarse en las tiras cómicas. A los 15 años se escapó con un primo y, durante dos semanas, recorrieron la América rural, lo que sin duda plantó en él las semillas de lo que sería Li'l Abner.

Página dominical de Li'l Abner

Página dominical de Li'l Abner

Una fabulosa edición

Destacar la fabulosa edición de Diábolo ediciones, con un gran formato que nos permite apreciar el arte de Al Capp. Los tres volúmenes publicados hasta ahora contienen las tiras y planchas dominicales publicadas entre 1934 y 1940. Además de estupendos sobre el autor y su obra, que son ideales para que los lectores conozcan al personaje y su universo. Su edición es semestral.

Se salda así una deuda histórica, ya que este clásico apenas se ha visto en España, siendo la edición de Eseuve de 1991 la más completa realizada. También se editaron algunos episodios de los años sesenta en la revista El Globo de Buru Lan, en 1973, y poco más.

Por cierto, que Diábolo acaba de sumar a su catálogo otro cómic clásico tan importante como este: Thimble Theatre. Selección de planchas dominicales (1925-1930), la mítica serie de E.C. Segar donde nacería uno de los iconos del cómic mundial: Popeye. El material que incluye es anterior a la aparición de nuestro marinero favorito, que debutó el 17 de enero de 1929. Pero es tremendamente divertido. Ya lo analizaremos en profundidad en una próxima noticia.

Portada del tercer volumen de Li'l Abner

Portada del tercer volumen de Li'l Abner