Leonor, en su primera visita oficial en Lisboa: "No puedo negar lo especial que es para mí estar aquí hoy"
- A sus 18 años, la princesa de Asturias sigue cumpliendo con los pasos establecidos en su trayectoria como heredera
- La elección de Portugal como debut de la princesa responde a los lazos históricos y presentes entre los dos países
La princesa Leonor ha aterrizado este viernes en Lisboa con motivo de su primer viaje oficial al extranjero. En la capital lusa ha llevado a cabo una visita de seis horas en las que ha estado arropada por el presidente de la república, Marcelo Rebelo de Sousa.
Allí, la princesa Leonor ha asegurado sentirse "muy feliz" porque Portugal haya sido su primer viaje oficial en el extranjero y ha subrayado que las relaciones con España van más allá de su vecindad, al traducirse en "una amistad sincera y un respeto profundo y mutuo" entre los dos países que le hacen "sentirse como en casa".
La heredera al trono español ha agradecido "la hospitalidad y el inmenso cariño" brindados durante su estancia. Así lo ha recalcado durante el almuerzo ofrecido por su anfitrión en el Palacio de Belém de Lisboa.
Asimismo, ha recordado que hace diez años, Portugal, "este querido país", fue el primer destino de sus padres como reyes de España, tras la proclamación de Felipe VI, y la princesa de Asturias ha resaltado: "No puedo negar lo especial que es también para mí estar aquí hoy".
Primera despedida con honores en Barajas
Leonor de Borbón ha viajado acompañada por el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, tras ser despedida con honores en el pabellón de Estado del aeropuerto internacional de Adolfo Suárez Madrid-Barajas a las 10.30 horas, en un acto en el que también se ha estrenado. Asimismo, el jefe de la Casa del Rey, Camilo Villarino, ha formado parte de la delegación.
En la ceremonia de despedida en Barajas, donde se ha interpretado el himno nacional, han estado la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso, y el alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida.
Una hora más tarde, la princesa de Asturias ha aterrizado en el aeropuerto militar Figo Maduro, donde se le ha dado la bienvenida con un cordón de honor. Allí, el presidente Rebelo de Sousa, quien en un principio no estaba previsto que fuera a recogerla a pie de pista, le ha recibido. En la línea de saludo se encontraban el embajador de España en Portugal, Juan Fernández Trigo, y su homólogo portugués en España, Joao Mira Gomes, así como el jefe de Protocolo portugués, Jorge Silva.
La ofrenda floral, inicio de su agenda lisboeta
Leonor ha abierto su agenda en Lisboa en el Monasterio de los Jerónimos, con una ofrenda floral ante la tumba del padre de las letras portuguesas, Luís de Camões. Se trata de un acto reservado a los jefes de Estado que visitan Portugal, pero ante el carácter histórico de la visita de la hija mayor de Felipe VI, se ha incluido en su programa, aunque sin la presencia del presidente.
Bajo un toque de corneta, la heredera al trono se ha acercado a la corona de flores blancas situada junto a la sepultura, adornada con la bandera española y un lazo con el color de su estandarte y el rótulo "S.A.R. La princesa de Asturias". La tumba de Camões, decorada con una estatua suya y una inscripción de su obra más conocida, Os Lusíadas, está situada en el coro bajo de la iglesia, cerca de la del explorador Vasco de Gama, a quien se dedicó la construcción del monasterio tras ser el primer europeo en llegar a la India por la ruta que bordea África.
Más tarde, la princesa se ha dirigido al Palacio de Belém, residencia del actual presidente de la República Portuguesa, donde la embajada española ha confirmado que había más de 100 periodistas acreditados, cerrando el cupo al no haber más aforo.
La princesa Leonor recibe la Gran Cruz de la Orden de Cristo
Marcelo Rebelo de Sousa ha impuesto a la princesa Leonor la Gran Cruz de la Orden Militar de Cristo, una de las más altas distinciones del país luso. El Palacio de Belém ha sido el escenario de la entrega de la banda de seda roja como reconocimiento a lo que la hija mayor de Felipe VI, de 18 años, representa como heredera a la Corona española.
La imposición ha tenido lugar tras la bienvenida oficial con honores de jefe de Estado en la residencia presidencial y el saludo a las delegaciones, de la que han formado parte el ministro de Asuntos Exteriores español, José Manuel Albares, y su homólogo portugués, Paulo Rangel.
La princesa se ha llevado la mano al corazón en señal de agradecimiento una vez que Rebelo de Sousa le ha colocado la cinta. "Es un homenaje a vuestra alteza, al Reino de España y a nuestra amistad para siempre", ha proclamado el mandatario portugués, mientras ha recordado que la Gran Cruz de la Orden de Cristo la recibió su padre, Felipe VI, en 1988, cuando Mario Soares ocupó la presidencia.
Medio ambiente, tema clave en su primer viaje oficial
Antes de su vuelta a Madrid, la princesa se ha desplazado al Oceanário de Lisboa, donde también le ha acompañado el presidente luso para apreciar el acuario interior más grande de Europa. También ha contado con la presencia del presidente de la Fundación Océano Azul, Tiago Pitta, el coordinador científico Oceanário, Emanuel Gonçalves y el Consejero Delegado del Oceanário, Roque da Cunha.
La heredera al trono ha visitado las instalaciones junto a la bióloga y educadora marina, Marina Duarte Reunión, quien le ha contado de manera detallada algunas curiosidades de los ecosistemas marinos. Tras ello, la primogénita de Felipe VI y Letizia ha participado en una mesa redonda donde ha cambiado impresiones con jóvenes científicos y en la que se ha hablado de la defensa del océano, las expediciones científicas, y políticas oceánicas, ya que el motivo de su viaje es "visibilizar la protección del medio ambiente y la conservación de los océanos, temas prioritarios para Portugal y España".
Una idea que también ha sido remarcada por Rebelo de Sousa, quien, durante el almuerzo, ha subrayado la defensa y la protección de estos como uno de los principales desafíos del futuro "compartidos", sobre todo, para las generaciones más jóvenes y la justicia intergeneracional.
A la salida, el presidente luso y la princesa Leonor han saludado a multitud de jóvenes, entre ellos varios niños y niñas, que se concentraban a las puertas del Oceanário de la capital para poder despedirse, no sin antes sacarse algunas fotos con la futura heredera. Bajo una marea de aplausos y al grito de "Portugal y España", ambos se han marchado de las instalaciones para poner rumbo al aeropuerto, donde a las 18:15h Leonor ha cogido un vuelo a España.
Vínculo especial e histórico con Portugal
La elección de Portugal como debut de la princesa responde a los lazos históricos y presentes entre dos países vecinos que comparten intereses en numerosos ámbitos. También a la estrecha amistad que une a Felipe VI y Rebelo de Sousa, el mandatario con el que el rey ha mostrado una mayor sintonía en los diez años que lleva en el trono.
"Es como un tío para ella", destacan desde el Palacio de la Zarzuela para ensalzar el aprecio que siente la familia real por Rebelo de Sousa, de 75 años y en el cargo desde marzo de 2016.
Este viaje se une a esas primeras veces que ha protagonizado ya la princesa. El 31 de octubre de 2018, con trece años, pronunció sus primeras palabras en público leyendo el artículo 1 de la Constitución Española, donde se establece que "la forma política del Estado español es la Monarquía parlamentaria".
A sus 18 años, la princesa de Asturias ya ha jurado la Constitución en el Congreso y concluido su primer año de formación militar, cumpliendo con los pasos establecidos en su trayectoria como heredera.