Los sumideros de las piscinas, un peligro para los niños
- Durante el último año 422 personas murieron ahogadas en España y una de cada diez, en piscinas
- Su capacidad de succión puede ser mortal para los pequeños
Las alarmas han vuelto a saltar tras la muerte del niño que quedó atrapado en la rejilla de una piscina en Madrid. Un menor de 13 años moría el domingo por este motivo en la piscina de su urbanización en Alcalá de Henares. En 2023, 422 personas murieron ahogadas en nuestro país. Una de cada diez perdió la vida en la piscina.
Los sumideros están en el fondo de las piscinas. Son necesarios para mantener limpia el agua pero cuando no hay una instalación correcta, pueden provocar remolinos mortales. El director de la Escuela de la Real Federación Española de Salvamento y Socorrismo, Alberto García, explica a TVE que "si esa fuerza de succión atrapa a una persona y está debajo del agua y no puede despegarse, evidentemente muere ahogada". Y recuerda una experiencia personal en la que vio cómo un sumidero "absorbía un poco a una chica y ella gritaba asustada".
Más riesgo para los más pequeños
Los niños tienen más riesgo porque no tienen fuerza para escapar. El menor de 13 años que fallecía este domingo en la piscina de su urbanización alcalaína murió por este motivo. "Hay que tener mil ojos porque en dos segundos está aquí el niño y de repente está en el otro lado", apunta una socorrista en esta pieza del Telediario.
Lo mejor, para evitar estas situaciones de peligro es localizar los sumideros antes del baño, no nadar nunca cerca de ellos y mucho menos tocarlos. Y si alguien queda atrapado por la fuerza de la succión hay que ir rápido a la sala de filtración de la depuradora y apagar las válvulas de aspiración.
Otras medidas de seguridad
"En las piscinas de uso residencial es un local que está muy cercano a la piscina. En las piscinas públicas está un poco más alejada, pero suele haber un socorrista", le cuenta el responsable de comunicación de la empresa SCP Pool España, Fernando Bachiller Corral, a nuestra compañera Patricia Pereira.
Otras medidas para minimizar el riesgo, según declara Bachiller, son "unas tapas antivortex que evitan que exista un flujo vertical en el sumidero". De hecho lo recomendable es que las piscinas tengan al menos, como mínimo, dos sumideros de fondo. Otra alternativa son "las boquillas de impulsión que elevan la suciedad a la superficie", explica el experto en piscinas a TVE.