Mueren al menos doce personas en los Altos del Golán tras un ataque lanzado desde el Líbano
- Otras 30 personas han resultado heridas tras un ataque que Israel atribuye a Hizbulá
- El grupo chií libanés niega ser responsable del ataque contra la localidad de Majdal Shams, en los Altos del Golán
Al menos doce personas, entre ellos once menores, han muerto este sábado tras el impacto de un proyectil disparado desde el Líbano, en un campo de fútbol de la ciudad de Majdal Shams, en los Altos del Golán, pertenecientes a Siria pero ocupados por Israel desde 1967.
La caída del cohete también ha dejado cerca de una treintena de heridos, seis de ellos en estado grave, diez heridos leves y varias víctimas con síntomas de ansiedad, según ha confirmado el servicio de emergencias israelí.
Fuentes militares israelíes han acusado a Hizbulá del ataque, pero este grupo ha negado ser el responsable, pese a haber reivindicado otros ataques en varios puntos del norte de Israel. Se trata del peor ataque contra civiles en territorio israelí desde el pasado 7 de octubre, según Israel. "La Resistencia Islámica en el Líbano desmiente categóricamente las acusaciones vertidas por algunos medios de comunicación enemigos y diversas plataformas mediáticas sobre la acción que tuvo como objetivo Majdal Shams", ha dicho el grupo armado en un escueto comunicado.
Netanyahu: "Hizbulá pagará un precio muy alto"
Israel ha indicado que en la tarde de este sábado llegaron más de 40 proyectiles al norte del país que lograron interceptar en su mayoría. Pero, sobre las 18:19 hora local, un cohete impactó contra un campo de fútbol. En este sentido, un portavoz castrense ha añadido que "están preparando una respuesta contra Hizbulá".
"La organización terrorista Hizbulá está detrás del lanzamiento de un cohete contra un campo de fútbol que causó múltiples víctimas civiles, incluidos niños, esta tarde", ha indicado el Ejército en un comunicado. "Hizbulá mintió al mundo entero y afirmó que no habían llevado a cabo este ataque. Esto es una mentira", ha sentenciado el portavoz del Ejército israelí, Daniel Hagari.
El coordinador especial de las Naciones Unidas para el Líbano y el jefe de una fuerza de mantenimiento de la paz de la ONU en el Líbano han instado a la máxima contención en la frontera libanesa-israelí, tras el ataque.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, ha asegurado que "Hizbulá pagará un precio muy alto, como el que no ha pagado hasta ahora", según un comunicado de su oficina. Este ha sido el principal mensaje que Netanyahu ha querido trasladar al jefe de la comunidad drusa en Israel, el jeque Muafak Tarif, en una conversación que mantuvieron. "En nombre de toda la nación de Israel, transmito el pésame enviado desde el fondo de mi corazón a las familias de los asesinados y a toda la comunidad drusa", ha agregado el mandatario israelí.
"Había víctimas en el césped y la escena era espantosa"
Diversos equipos del servicio de emergencias israelí, ambulancias y helicópteros de evacuación médica se han trasladado rápidamente al lugar de los hechos para atender a las víctimas.
"Fuimos testigos de una gran destrucción cuando llegamos al campo de fútbol, así como de objetos que estaban en llamas. Había víctimas en el césped y la escena era espantosa, inmediatamente comenzamos a tratar a los heridos y algunos fueron evacuados a clínicas locales", ha relatado uno de los médicos. Las alarmas antiaéreas, según ha añadido este médico, han seguido sonando mientras los equipos de emergencia israelíes prestaban atención médica a los heridos.
Además, un equipo de expertos en desactivación de bombas de la Policía israelí del distrito norte siguen inspeccionando y asegurando la zona de los Altos del Golán donde han caído "múltiples municiones para eliminar cualquier riesgo adicional", según detallan en un comunicado.
El ministro de Defensa israelí, Yoav Gallant, está llevando a cabo una evaluación con el Jefe del Estado Mayor del Ejército, el Teniente General Herzi Halevi, y otros altos funcionarios de defensa, según han anunciado en sus redes sociales.
"No hay duda de que Hizbulá cruzó todas las líneas rojas", ha advertido el ministro de Exteriores israelí, Israel Katz en una entrevista con la televisión israelí Canal 12. "Nos enfrentamos a una guerra total", ha añadido Katz.
Mientras, la misión de la ONU en el Líbano (FINUL) está hablando con las partes en conflicto para rebajar las tensiones, ha dicho a Efe el portavoz de la misión, Andrea Tenenti.
Este último episodio escala la tensión en la frontera entre Israel y Líbano, donde hay un intercambio de fuego diario desde el pasado 8 de octubre, como nunca antes entre el Gobierno de Nentanyahu y la milicia libanesa.