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'Don Gil de las calzas verdes' subvierte los roles de género con "la heroína más brillante de Tirso"

  • Los versos y la venganza de una mujer engañada ponen patas arriba la villa y corte
  • El Teatro Corral Cervantes lleva a escena la mejor comedia de enredo de Tirso

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'Don Gil de las calzas verdes' y Tirso subvierten los roles de género en el Corral Cervantes
Detalle del cartel de 'Don Gil de las calzas verdes'.

Don Gil de las calzas verdes es un clásico del Siglo de Oro cuyos versos no han perdido vigencia. Tirso aborda el amor, los celos, el dinero, el poder y la situación de las mujeres, temas universales que siguen apelando a los espectadores del siglo XXI.

El Teatro Corral Cervantes estrena este miércoles esta delirante comedia de enredo, dirigida por Laura Ferrer, que celebra el ingenio y el poder femenino para rebelarse contra los estereotipos de género y las normas sociales.

La protagonista Doña Juana, se llama igual que la madre del autor, y es "una de las heroínas más brillantes que tiene Tirso", destaca Ferrer a RTVE.es. Es un personaje "hacedor por sí mismo y vengativo, que coge las riendas de su vida, pasa por encima de todo y se las apaña para poder burlar a todo el mundo. Y que eso lo haga una mujer es novedoso".

La directora de la obra, Laura Ferrer

La directora de la obra, Laura Ferrer.

La obra plantea que "una mujer para ser absolutamente libre debe actuar y vestirse como un hombre. A día de hoy, parece que tenemos que disfrazarnos a veces de hombres para poder gozar de nuestros plenos derechos. No es como antaño, pero sigue siendo algo sensible y quería resaltar ese aspecto", apunta Ferrer.

La directora ha optado por una puesta en escena "muy sencilla", que aprovecha el corral como marco escenográfico, y da relieve a "las cartas que son unos objetos muy presentes" entre los personajes, que "llegan a destinatarios que no se corresponden y se va liando toda la historia".

"El vestuario va a ser un elemento bastante vistoso", sostiene Ferrer. Realizado por Pablo Alcántara, la ropa es atemporal, algunos personajes llevan mangas anchas con botas de boxeo y las calzas son verdes, pero casi de camuflaje, muy discretas, describe.

El autor teatral, Tirso de Molina, seudónimo literario de fray Gabriel Téllez, fue discípulo de Lope de Vega y también un prolífico dramaturgo del siglo XVII. De su pluma, se conservan unas 60 obras teatrales, pero en un prólogo afirmaba haber escrito 400, con fecha de 1634.

La adaptación es de Arturo Martínez Vázquez, hecha con un gran respeto a la historia y al verso original. Su trabajo ha sido "limpiar mucho de escenas, que tampoco son esenciales y que, al quitarlas, ganamos tiempo para que la obra dure una hora y media, para meter canciones, momentos musicales, transiciones y que sean amenas".

Música original en vivo

La actriz principal Manuela Morales ha compuesto la música de la representación con reminiscencias clásicas y aires que van del blues al rock, que se toca en directo con jaranas, panderos, violas y otros instrumentos de época.

Una escena en la huerta, que todos van al campo y tocan unos músicos, "está íntegra, con los versos de Tirso y luego hemos añadido muchas más canciones con unas letras que recuerdan a los textos que ya dicen los personajes", detalla Ferrer, con lo que "en realidad, no nos hemos inventado nada".

Conocido por haber forjado la primera versión del mito de Don Juan, Tirso fue el primer autor que dio profundidad psicológica a los personajes femeninos, que incluso son protagonistas. En Don Gil de las calzas verdes, una mujer, doña Juana, mueve con habilidad los hilos de la trama.

Una actriz, tres personajes

La obra arranca con un largo parlamento de la heroína que pone en antecedentes a los espectadores. En la versión actual, se trata de un monólogo cantado a coro en el que al mencionar un personaje, este aparece para que el público le ponga cara, a modo de tráiler o resumen de episodios anteriores para situar la acción.

Cartel de 'Don Gil de las calzas verdes'

Cartel de 'Don Gil de las calzas verdes'.

El prometido de doña Juana escapa a Madrid bajo la falsa identidad de don Gil de Albornoz, para pretender a una dama más rica, doña Inés. La misma tarde en que va a conocerla, ella se ha enamorado de otro don Gil, con una hermosa cara de niño y unas calzas verdes. Doña Juana es don Gil y también doña Elvira, confidente de doña Inés.

El enredo va subiendo de intensidad, incluso con menciones a fantasmas, y don Martín acaba desesperado:

"Si a doña Inés pretendo, un don Gil luego pretende a doña Inés, y me la quita;

si me escriben, don Gil me usurpa el pliego y con él sus quimeras facilita;

si dineros me libran, cuando llego, hallo que este don Gil cobró la dita.

Ya ni sé adónde vaya, ni a quién siga, pues nunca falta un Gil que me persiga".

La directora aboga por eliminar la sensación de que el género tiene que ir ligado al personaje, pero aquí era un poco complicado, porque lo esencial es el amor entre hombre y mujer que se repite constantemente a lo largo de la obra. Con todo, a Caramanchel lo interpreta una mujer porque el género del criado no interfiere en la trama.

Ferrer explica que también han echado más leña al fuego y a Doña Clara la encarna un actor, pero en este caso "hemos querido ir a la burla y a la sátira. A buscar la comedia dentro de un hombre absolutamente travestido, de mujer pomposa".

Defensor de la comedia

Tirso de Molina, pese a ser un fraile mercedario, era un acérrimo defensor de la comedia en la que veía reflejada los infinitos matices de la condición humana. Una querencia que le llevó a ser desterrado en varias ocasiones.

"¿Quieres ver los epítetos / que de la comedia he hallado? / De la vida es un traslado, / sustento de los discretos, / dama del entendimiento, / de los sentidos banquete, / de los gustos ramillete, / esfera del pensamiento, / olvido de los agravios, / manjar de diversos precios, / que mata de hambre a los necios / y satisface a los sabios".

Como curiosidad, en Don Gil de las calzas verdes aparecen los personajes de don Juan y doña Inés, que luego protagonizarían El burlador de Sevilla, pero en esta pieza los roles están invertidos. Ferrer detalla que "ella no para de rechazarlo. Y es la que enreda a don Juan con las calzas verdes. Doña Inés le engaña todo el rato y él se lo cree todo". Primero la comedia y luego el drama.

La pieza del siglo XVII termina con un final feliz en el que todos pasan por el altar de difícil encaje en la actualidad. La directora ha preferido detener la acción en otro momento e invita al público a acercarse un poco más a Tirso de Molina para "pasar un buen rato y disfrutar de una obra breve, amena, que tiene música y muy buenos momentos".

Tras el estreno este último día de julio, está previsto que don Gil vuelva en septiembre a representarse en el exterior del corral de comedias en un formato con cena en una terraza.

'Don Gil de las calzas verdes'

En 1615, Tirso de Molina escribió la obra en verso Don Gil de las calzas verdes

Dirección: Laura Ferrer

Adaptación: Arturo Martínez Vázquez

Elenco: Manuela Morales, Martín Puñal, Ángel Ramón Jiménez, Nuria Gil, Enrique Meléndez, Leticia Ramos, José Ramón Arredondo

Compañía: Fundación Siglo de Oro

Lugar: Teatro Corral Cervantes, Paseo de la Chopera 6, Madrid

Estreno: el 31 de julio a las 20 horas