Las mínimas no dan un respiro en julio: noches por encima de 20 ºC y más de 140 récords

• España acumula centenares de récords de temperatura mínima más alta este año
• Palma (Baleares) y Cartagena (Murcia) no han bajado de los 21 ºC en todo julio

En el último año, España acumula centenares de récords de temperatura mínima más alta. Getty

Todo un mes de noches tropicales. Esa es la situación que han vivido en Cartagena o Palma, donde dormir durante julio ha sido una tarea casi imposible porque las mínimas no han bajado de los 21 ºC en ningún día del último mes, según el análisis de las temperaturas provisionales registradas por Agencia Estatal de Meteorología (AEMET). Y con al menos tres olas de calor en los últimos 15 días, esta situación se ha extendido a buena parte del resto de la Península y de Canarias. 

El aumento del calor por la noche se ha transformado en un indicador efectivo del calentamiento global para algunos científicos y, en el último año, España acumula centenares de récords de temperatura mínima más alta. Se han batido en casi 140 estaciones solo en el último mes, según el análisis que realiza DatosRTVE. 

Noches tropicales y tórridas en julio

Cuando el termómetro no baja por la noche, la aparición del insomnio dificulta el descanso y los expertos advierten de que se traduce en mayor apatía e irritabilidad. Sobre todo cuando se rebasan los 24 grados, algo que en los últimos 30 días ha ocurrido varias veces en más de una treintena de provincias durante el último mes. 

Desde los 28,1 ºC del martes pasado en el aeropuerto de Zaragoza hasta los 25,8 ºC de Bardenas Reales (Navarra), las mínimas han sido las más altas nunca registradas en casi 50 estaciones de la red de AEMET. Y al menos otra veintena de localidades de Cáceres, Jaén, Córdoba, Granada, Almería, Valencia, Alicante, Castellón, Murcia, Baleares, Melilla o Huesca han alcanzado los 24 grados en el último mes. 

Y ¿cómo impacta en nuestra salud este calor nocturno? Sueño menos profundo y con ciclos más cortos hacen que el descanso nocturno deje de ser reparador, según explican los médicos de la Unidad del Sueño Dr. Estivill del Hospital Universitari General de Catalunya, que recomiendan intentar dormir lo más fresco e hidratado posible.

"Tenemos que tener una buena noche para tener un buen día", afirma el propio Eduard Estivill, que explica que la sucesión de muchas noches de calor extremo "afecta muchísimo a nuestro bienestar". El sueño es un taller de reparación de lo que gastamos durante el día y las fases más profundas solo se alcanzan cuando las condiciones externas son favorables: "Si la temperatura no baja, nos da una sensación de mal descanso". 

Mínimas disparadas por la ola de calor

Las olas de calor que se estaban adelantando en los últimos años han tardado un poco más en llegar este verano. La primera alcanzó su punto álgido cuando ya se había superado la primera mitad del mes de julio y prácticamente se ha encadenado con otras dos que han elevado los termómetros por encima de los 40 ºC. 

Pero su efecto también se ha notado en las mínimas: Salamanca, Cuenca, Teruel o Lleida son solo cuatro ejemplos de mínimas excepcionalmente anómalas para la época del año, con hasta cinco grados más de lo normal algunos días. 

El termómetro tampoco ha registrado ni un día con valores normales en Hellín (Albacete), San Sebastián de los Reyes (Madrid), Lorca y Cartagena (Murcia), Xátiva y Utiel (Valencia), Mora (Toledo) y Teruel, Salamanca, Castellón, Valencia y Murcia capital.

Noches más cálidas todo el año

Con un comienzo del verano suave en junio, parece que 2024 puede estar lejos de los hitos de 2023, el año más cálido a nivel global desde que se tienen registros. Ahora bien, más de la mitad de los días de este año ya han sido más cálidos de lo normal. 

Aunque no suponen un calor sofocante ni afectan tanto al descanso nocturno, el análisis mes a mes de los récords de temperaturas mínimas más altas dibujan la misma tendencia que la media global. Solo mayo y junio tuvieron menos de un centenar de récords mensuales para este indicador. 

Enero, que también fue excepcional en las máximas, dejó mínimas de récord en hasta 265 estaciones meteorológicas, donde se registraron temperaturas en torno a un grado más altas que el hito anterior. 

Abril fue el siguiente mes con más récords de este tipo, subiendo el listón más de 1,5 ºC respecto a los anteriores, y febrero y marzo lo elevaron en más o menos un grado. 

En cuanto a la temperatura media de la España peninsular, las mínimas no han dejado de escalar durante las dos últimas semanas, con un pico de 22,4 ºC el miércoles que supone 4,8 grados más de lo normal para esta época del año respecto a la media histórica. Las máximas tampoco han dado un respiro y han disparado la media más de cinco grados por encima de lo esperado.