M. Night Shyamalan estrena 'La Trampa': "Mi mayor miedo es no poder proteger a mi familia"
- La película es un thriller en el que un asesino en serie (Josh Hartnett) intentará escapar de la trampa que le tiende la policía
- Hablamos con el director y el protagonista de esta obra que llega a los cines este 9 de agosto
Este 9 de agosto llega a los cines La trampa, un thriller trepidante y juguetón con el que M. Night Shyamalan (El Sexto Sentido, El Pueblo), quiere acercarse a Alfred Hitchcock. Cuenta la historia de un asesino en serie (Josh Hartnett) que asiste a un concierto multitudinario con su hija (Ariel Donoghue), cuando se da cuenta de que la policía le ha tendido una trampa de la que es imposible escapar. Y eso es solo el principio de una película llena de giros sorprendentes, situaciones límite y mucha comedia, en la que también participan Saleka (la hija cantante y actriz de Shyamalan), Hayley Mills y Allison Pill. Hemos hablado en Madrid con Shyamalan y Hartnett sobre esta película.
"Cuando la gente me dice que hago películas de terror con giros sorprendentes, no me siento identificado ni sé como responder, porque nunca me he considerado un cineasta de terror —nos confiesa Shyamalan—. A mí me gusta tocar muchos géneros diferentes. Por ejemplo, en La Trampa hay momentos en los que tocamos el terror, pero hay muchísimos más momentos de comedia. En estos últimos 10 años creo que he hecho películas muy divertidas en las que el tiempo que pasas riéndote suele ser muy superior al tiempo en el que puedes sentirte asustado. Así que no me veo como un cineasta de terror. Lo que me gusta es elegir temas que considero intrigantes y el tema de los asesinos en serie y de cómo se comportan en su vida familiar me parecía realmente interesante".
"Porque creo que las cosas que más nos inquietan, a la vez que nos atraen, son las reales —continúa el director—. Y los asesinos en serie son completamente reales. No son leyendas urbanas, sino monstruos que viven entre nosotros. Y tampoco es que haya uno por generación, sino que pueden surgir en cualquier momento y en cualquier lugar. Porque hay mucha gente sin ningún tipo de moralidad".
"Creo que es uno de los personajes más interesantes que he interpretado porque es un personaje que juega a ser otros —añade Hartnett—. Es un personaje construido a través de varias capas, cada una muy distinta a las demás. Y eso lo convierte en un personaje muy interesante desde el punto de vista psicológico. Mi preocupación fue investigar cómo alguien que carece de empatía y es un completo narcisista, además de un peligroso psicópata, puede fingir que tiene una buena relación con su familia y con la comunidad. Y llevar eso lo más lejos posible. La película nos muestra el momento en el que esa fachada que se ha construido, de padre modélico, se agrieta. E incluso también cambia su propia percepción sobre sí mismo".
"Josh y yo —concluye el director—, hablamos mucho sobre lo divertido que podía ser meternos en la piel de un asesino en serie e intentamos ponernos en su lugar. Creo que la mayoría no saben por qué hacen lo que hacen y están intentando comprenderse a sí mismos, procurando entender por qué son diferentes al resto de las personas. También queríamos analizar por qué, en el fondo, todos están buscando que los atrapen. O por qué muchos no sienten nada y su forma de intentar sentir algo es cometer esos horribles crímenes".
"Para mí lo más importante es la familia"
La mayoría de las películas de Shyamalan están protagonizadas por grupos pequeños, casi siempre familiares. "Lo más importante para mí es mi familia —confiesa el director—. Estamos todos muy unidos, vivo a cinco minutos de mis padres, también de mi hermana, de los primos, los sobrinos... Y por eso la relación entre Cooper y su hija tiene mucho sentido para mí y me resulta tan fácil escribir esas escenas en las que van juntos al concierto, porque está en mi genética y también ese miedo a no poder protegerlos. Todos hacemos lo posible por proteger a nuestros seres queridos, pero nunca tenemos un control total que nos permita mantenerlos completamente a salvo. Intentamos hacer lo que podemos y el miedo a fallarles alguna vez siempre está ahí. Mi mayor miedo es no poder proteger a mi familia. Por eso mis películas suelen tratar sobre cosas que me dan miedo".
Josh Hartnett también destaca que esta película es, ante todo, una historia familiar: "Sí, es una historia sobre la familia, no sobre la que todos quisiéramos tener, pero sin duda es una historia familiar. No sé si es una película para ver en familia, porque está recomendada para mayores de 13 años, pero digamos que la familia se puede divertir viéndola todos juntos".
Hablando de familia, estamos acostumbrados a que M. Night Syamalan colabore con su hija Ishana Shyamalan, que ha sido su ayudante de dirección en varias películas y que hace apenas un mes estrenó en cines su primera cinta como directora, Los Vigilantes (The watchers), producida por su padre. Pero en esta película una de las grandes protagonistas es su otra hija, Saleka, que es una conocida cantante y compositora que ya había hecho algunos papelitos en cintas anteriores de su padre pero no tan importantes como este. Porque interpreta a Lady Raven, una popular cantante en cuyo concierto transcurrirá la mayor parte de la historia. Además, la idea de la película surgió de las conversaciones entre padre e hija.
"Escribí el personaje como una versión de la propia Saleka —nos confiesa M. Night Shyamalan—, porque pienso que mi hija tiene un gran sentido de la moralidad y creo que las cosas que hace Lady Raven y las decisiones que toma, son cosas que Saleka haría de la misma manera. Creo que Saleka es un ser humano muy puro y sin filtros. Y, por cierto, creo que Josh también es muy parecido en ese sentido. Y las apariciones de ambos en la pantalla tienen mucha fuerza, porque Josh aporta todo una vida de experiencia ante las cámaras y ella es muy receptiva a eso y es capaz de darle la réplica. Y yo he disfrutado mucho viendo cómo interactuaban y cómo reflejaban todas esas emociones y sentimientos. Ha sido algo mágico".
Josh Hartnett: "Quería que Cooper fuera un asesino muy orignal"
Todos tenemos en la cabeza a decenas de psicópatas de las películas, pero a la hora de preparar su personaje (apodado "el Carnicero"), Josh Hartnett ha preferido fijarse en asesinos de verdad. "He leído muchos libros que intentaban generalizar, desde un punto de vista psicológico, lo que sucede en la cabeza de estas personas. Pero no he querido tomar ninguna característica concreta de ningún asesino en serie en particular. Porque sentía que ya hay muchas películas sobre asesinos en serie en donde han hecho eso. Y normalmente lo hacen muy bien, pero queríamos que Cooper fuera auténtico al 100%. Y por eso lo abordé haciéndolo lo más atrevido posible, pero evitando que recordase a ningún otro asesino como esos en los que todos pensamos".
Preguntamos a Josh por qué nos resultan tan atractivos los psicópatas en el cine y por qué nos interesa tanto el Cooper al que interpreta: "Creo que este personaje es muy diferente a otros psicópatas que han aparecido en películas. Ya he comentado que nos gustaría que fuera totalmente original y supongo que en muchos aspectos lo es".
"En cuanto a por qué la gente se siente atraída por Cooper —añade—, creo que es por dos razones: porque verlo intentar explorar su propia identidad sin poder controlarse es muy entretenido, e incluso gracioso. Y segundo, porque creo que a todos nos resulta muy atractiva esa idea de que hay un monstruo en cada esquina. Después de ver esta película igual ves a tu vecino de una forma muy diferente. Y creo que eso nos intriga a todos: como una persona que, en teoría, es parecida a nosotros, puede ser tan diferente".
Josh nos confiesa que trabajar con Shyamalan ha sido un sueño hecho realidad porque: "He sido fan suyo durante años. Nos conocimos hace 20 años, en el estreno de The Village (2004). Tenía un amigo en la película y conocí a Shyamalan en una cena y tuvimos una conversación muy interesante. Él sabía que yo soy muy fan de su carrera, desde el principio, pero hasta ahora no ha encontrado un personaje que encajase conmigo. No sé por qué penso que este asesino en serie era el ideal para mí (ríe), pero estaba dispuesto a interpretar a cualquier personaje que me ofreciese. Así que ha sido muy divertido poder asumir un desafío tan grande, sabiendo que estaba en las manos del mejor director posible y que me iba a apoyar en todo".
La Trampa es una película trepidante y divertida, con sorprendentes giros de guion y algún guiño a clásicos del género como El silencio de los corderos. Sin olvidar el habitual cameo del propio director. Una película ideal para refugiarnos en el cine de los calores del verano.